
Toda persona tiene que examinar y evaluar lo que hace cada día, a qué hora se levanta, a qué hora se acuesta, y, en medio del bocadillo qué piensa, siente, hace, actúa...
Es obvio y evidente que no es lo mismo, alguien con diez años, que con treinta o cincuenta o setenta primaveras u otoños. No es lo mismo una pe...