La sentencia por la catástrofe marítima del Prestige se conocerá el 13 de noviembre, 11 años después del siniestro y casi cuatro meses después de que concluyese el juicio, según ha informado el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), donde tendrá lugar la lectura del fallo. La sala que ha enjuiciado los hechos, presidida por el magistrado de la Audiencia Provincial de A Coruña Juan Luís Pía, ha escogido para dar a conocer el fallo el mismo día en el que se produjo el siniestro, que provocó una marea negra de petróleo que alcanzó a las costas de Galicia, y también a las del Cantábrico y Francia.
Se conocerán ese día las penas contra tres de los cuatro acusados, el capitán del Prestige, Apostolos Mangouras; el jefe de máquinas, Nikolaos Argyropoulos, y el exdirector general de la Marina Mercante, José Luis López Sors. El cuarto acusado, el primer oficial, Ireneo Maloto, no llegó a ser juzgado, en una vista que se prolongó durante nueve meses, al encontrarse en paradero desconocido. Todos ellos se enfrentan a penas de cárcel que oscilan entre los 12 y los 5 años de cárcel por delitos contra los recursos naturales y el medioambiente. La mayor pena ha sido solicitada por la Fiscalía para Mangouras. Sin embargo, en la lectura de sus conclusiones definitivas, reclamó que el capitán del Prestige, de 78 años, no ingresase en prisión, donde estuvo durante tres meses de manera preventiva. También pasó en Barcelona otros 21 meses en libertad vigilada.
En el proceso, figuran, como responsables civiles directos, la aseguradora The London Steam-Ship Owners Mutual Insurance Association Limited y el Fondo Internacional de Indemnización de Daños Debidos a la Contaminación por Hidrocarburos (Fidac). Como responsables civiles subsidiarios las entidades Mare Shipping Inc, Universe Maritime LTD y el Estado Español. En concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Público reclama 4.328 millones de euros de indemnizaciones por los daños derivados de la marea negra.
Ahora, se conocerán las condenas y responsabilidades civiles por una catástrofe ocurrida el 13 de noviembre de 2002, tras registrar el buque, en medio de un temporal, una vía de agua. El petrolero, con 27 tripulantes, se encontraba navegando a unas 28 millas de Fisterra (A Coruña) con 77.000 toneladas de fuel, de las que vertió más de 60.000 toneladas, provocando uno de los mayores siniestros marítimos.
Desde el 13 de noviembre y, tras detectarse el primer vertido, el Gobierno español optó por alejar de la costa al barco, que estuvo escoltado por la Armada y al que se prohibió atracar en cualquier puerto español. Finalmente, el 19 de noviembre de 2002, el Prestige se hundió.
Víctimas del accidente de tren en Angrois se reúnen el 14 en Compostela
La Asociación de Perjudicados por el Accidente Ferroviario del Alvia ha convocado a los afectados por el siniestro de Angrois del 24 de julio a una reunión "informativa y consultiva" el jueves 14 de noviembre en Santiago. La cita, a las 18.00 horas en el Hotel Gelmírez, pretende analizar los pasos dados en cuanto a mejoras en materia de seguridad desde el día del descarrilamiento del Alvia, cuando murieron 79 personas. También busca resolver "preguntas e inquietudes" de las víctimas en cuanto al cobro de las indemnizaciones.
Así lo ha explicado, en declaraciones a Europa Press, el presidente de la asociación, Cristóbal González, quien ha destacado que este martes -en una de las reuniones periódicas que mantienen con el Ministerio de Fomento desde septiembre- la titular del departamento, Ana Pastor, les comunicó que la semana que viene recibirán un informe de lo que se ha realizado en este tema. González ha señalado que, de esta forma, se podrá dar lectura al escrito en el encuentro en Compostela, que se reproducirá dos jueves más tarde, el 28 de noviembre, en Madrid.
El presidente de la Asociación de Perjudicados por el Accidente Ferroviario del Alvia ha animado a todos los afectados a asistir -la invitación ha sido remitida a unas 220 personas-, pues, a su juicio, puede ser "interesante" para aclarar dudas en un momento en que se ha "superado lo peor", pese a que "ahora mismo aparecen otras secuelas". Las víctimas han incurrido en gastos, ha apuntado, que la asociación entiende que deben "ir al margen" de la indemnización que recibirá cada uno de ellos, pese a que hayan hecho uso del anticipo que se les entregó para cubrir costes de manutención, alojamiento y transporte, entre otros. Aunque no son "cuantiosas", estas cantidades deben abonarse de manera independiente, en opinión del colectivo, que aborda esta circunstancia con las empresas aseguradoras.
En cuanto a medidas de seguridad, Cristóbal González opina que ha habido "bastantes avances", como el nuevo reglamento que se va a dictar sobre el tráfico ferroviario, la posibilidad de implantar cinturones en los vagones, anclajes de los asientos y sistemas de sujeción para los equipajes. También el seguro obligatorio de viajeros "va a cambiar" en lo referido a las indemnizaciones, ya que responde a una ley del año 89 y "han transcurrido muchos años" desde entonces. "Se está haciendo bastante trabajo", resalta este afectado, quien en todo momento trata de "desvincular" el apartado de la seguridad del procedimiento judicial, por lo que evita pronunciarse sobre el levantamiento de las imputaciones a todos los cargos de Adif.