El presidente de Caixanova, Julio Fernández Gayoso, defendió la necesidad de manejar los tiempos "con reserva y discreción", en la negociación para un posible proyecto común con Caixa Galicia, para "no hacer daño" en un proceso que, en sí mismo, es "enormemente complicado". En declaraciones a los medios en Vigo, posteriores a la entrega del los III Premios de Interpretación Musical, Fernández Gayoso aseguró que este asunto debe tomarse "con mucha calma y tranquilidad", puesto que procesos como éste son complejos y llevan tiempo. "Paciencia y discreción, de ahí no me vais a sacar", aseguró a los periodistas.
Según explicó el presidente, las partes están hablando y "habrá más conversaciones", recalcando que "un proceso de este tipo no se arregla en tres días". En ese sentido, abogó por manejar los tiempos con "reserva y discreción" para no complicar ni hacer daño a un proceso en sí "enormemente complicado". Preguntado sobre si es optimista o pesimista en el proceso, afirmó que, en este momento, aplicar adjetivos sería "tirar una moneda al aire". "Hay que ser realistas", aseguró, al tiempo que insistió en que se está trabajando con discreción. "Cuando haya novedades lo vais a saber inmediatamente", afirmó a los periodistas, para insistir en que el proceso es "complejo" y se debe ir con "tranquilidad".
En cuanto la posibilidad de llegar a un proyecto común entre Caixanova y Caixa Galicia con el mantenimiento de los empleos de la caja viguesa -el alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha dicho que en Caixanova no se perderá ningún puesto de trabajo-, Julio Fernández Gayoso aseguró que "es imposible" entrar en esos detalles en el momento inicial en el que se encuentran las negociaciones. "Esas cosas se plantearán pero en su momento", apuntó. "Sé que tenéis mucho interés, yo también", concluyó, dirigiéndose a los periodistas.
Caballero señala que "lo más probable" es que Caixanova "siga sola" e insiste en que "lo que procede" es una absorción
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, aventuró que "lo más probable" es que Caixanova "siga sola" tal y como van los contactos con Caixa Galicia, e insistió en que, en todo caso, "lo que procede" es que haya una absorción de Caixa Galicia por parte de la caja del Sur de Pontevedra, dada la situación financiera de ambas. En declaraciones a los medios tras visitar una obras de humanización, el regidor vigués apuntó que "la verdad -sobre la fusión de las cajas- ya se abrió camino" y que "toda Galicia" ya reconoce que "lo que está ahora encima de la mesa es la absorción".
Reiteró que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, "ocultaba" el estado de las entidades, y pretendía "regalar Caixanova al norte para resolver un gravísimo problema financiero". También recordó la "mentira" de los 1.200 millones para llevar a cabo la operación, ya que "se necesita una cifra muy superior" y "es imprescindible la financiación pública para que sea viable". Abel Caballero recordó que aceptará la operación siempre que se trate de una absorción, que la nueva caja tenga sede en Vigo y cuente con la dirección de los actuales responsables de Caixanova, y pidió nuevamente a paralización de la ley de cajas de la Xunta. "Si no se aceptan esas condiciones, Caixanova continuará su camino, que creo que es lo más probable", aseveró, al tiempo que lamentó que el presidente gallego "está obstinado contra Vigo y contra Caixanova", y le pidió "que deje de hablar de fusión equilibrada y llame a las cosas por su nombre".