En el documento, la entidad gallega destaca que la industria alcanzó en junio de 2011 su mayor número de ocupados en los últimos cinco trimestres, al llegar a los 177.000). Esto, junto al comportamiento de los servicios (mantiene 735.900 empleos), "compensa" la crisis en la que profundiza la construcción, tanto en el empleo como en la licitación de obra pública.
El sector industrial, cita el Informe de Coxuntura de la caja gallega, registró un aumento del 1,6% de su producción en el primer trimestre del año, que es más del doble del crecimiento económico conjunto de Galicia. La principal alza se debe al mercado internacional (las exportaciones crecieron un 3,9%), con subidas especialmente marcadas en Noruega, Reino Unido, Alemania, Países Bajos, Turquía y Finlandia. Al mismo tiempo, el aumento del transporte de mercancías por barco fue del 3,7%.
Sin embargo, la construcción ha llegado el pasado mes de junio a su nivel de ocupación más bajo en el último decenio, una cifra que está "en línea" con las caídas en la producción de viviendas (del 50,8% a marzo de 2011) y de la licitación de obra pública (del 49,7%). Apunta, además, el estudio que no se aprecian "síntomas de recuperación". De este modo, la industria creó empleo y también repuntó en el sector terciario, en el que destacan el comercio y las actividades profesionales y artísticas. Registraron pérdidas, sin embargo, los grupos de información y comunicación y las actividades financieras.
El PIB gallego, que creció un 0,7% en el primer trimestre, "sugiere que la economía se estabilizó desde la segunda mitad de 2010. La demanda española, asegura el estudio, "sigue siendo el principal factor limitativo de la producción industrial gallega", mientras que "apenas frenan la actividad" la insuficiencia de mano de obra, de bienes de equipo o de materias primas. En cuando al índice de confianza empresarial, pese a que se recuperó en el primer trimestre de 2011, "aún mantuvo un valor muy negativo". "Las perspectivas no parecen optimistas, ya que tan solo el 7,3% espera un incremento de la actividad", señala. Frente a la construcción, en la que "persistió la crisis", el estudio apunta que los servicios tuvieron una evolución que contribuyó "muy positivamente" al crecimiento del PIB. No obstante, los resultados del turismo reflejan "una sensible desaceleración tras la celebración del Xacobeo".
El crecimiento del 0,7% del PIB se debe, según los analistas de Novacaixagalicia, "sobre todo al comportamiento del sector externo" y, en menor medida, al gasto en consumo final de las administraciones públicas. No obstante, la demanda de los hogares "no se recuperó", como tampoco lo hizo la formación bruta de capital. El informe destaca que el "mayor dinamismo" se registró en el sector exterior, pues las exportaciones de bienes y servicios crecieron un 3,9%. Esta evolución positiva "se debe más al comportamiento de las mercancías que a los servicios". El documento subraya que las exportaciones de bienes aumentaron su valor en un 23,4%, un "espectacular aumento" que atribuye a "una transacción singular con Noruega. En relación a los precios, el estudio indica que la tasa gallega del IPC "siempre fue superior a la española en una o dos décimas". No obstante, la menor variación observada en mayo y junio "presagia una paulatina desaceleración de aumento de los precios en el segundo semestre".
El informe incluye también un artículo del director del Servicio de Estudios, Bolsas y Mercados Españoles (BME), Domingo García Coto, que considera que el sector financiero "recuperará su posición" como mecanismo financiador de la economía tras su reforma y el ajuste de su capacidad.