Pescanova ha solicitado al juez de lo Mercantil número 1 de Pontevedra la intervención urgente de la firma ante la falta de toma de decisiones por parte de Deloitte, que ha comunicado a la empresa que no llevará a cabo ninguna actuación hasta el próximo jueves, día 2 de mayo. Ello supone, según ha señalado la compañía gallega, que durante prácticamente una semana Pescanova se encuentre sin gestión ni dirección efectiva, "ausente de toma de decisiones que resultan absolutamente esenciales para el mantenimiento de la actividad".
En un nuevo escrito remitido al juez, la firma ha justificado su petición de intervención ante el vacío de poder en la toma de decisiones urgentes. Como ejemplo, la compañía ha informado al juzgado de la comunicación recibida de la filial Pescachile, por la que su gerente general pide la toma urgente de decisiones con respecto a una solicitud de declaración de quiebra a petición de una entidad financiera, mediante la convocatoria de una sesión del consejo de dicha filial, que no se ha podido realizar. "Es extremadamente urgente una actuación inmediata en dicha filial".
Estos hechos denotan a juicio de la firma gallega la "gravedad" de la situación que se ha originado en Pescanova, lo que requiere, en su opinión, de una respuesta "urgente e inmediata", mediante la reposición de las facultades de administración y gestión en su consejo de administración, y, en cualquier caso, con el nombramiento de un segundo administrador concursal de entre las entidades financieras acreedoras. "Su participación activa en el marco del concurso deviene esencial para el logro de la financiación precisa para facilitar una propuesta de convenio que permita la continuidad de la actividad, para la mejor satisfacción de los acreedores y el mantenimiento del mayor número posible de puestos de trabajos".
Ante la falta de designación de un segundo administrador concursal, Pescanova ha trasladado al juez su inquietud y preocupación por los "graves efectos" que la suspensión de facultades de administración del consejo tiene sobre la gestión diaria de la firma, que requiere de una alta especialización y conocimiento, dada su complejidad y dimensión internacional. En este sentido, en el recurso de reposición remitido ayer al juez, Pescanova cuestiona a Deloitte como administrador concursal de la firma y se pregunta si una firma de auditoría puede gestionar el "día a día" de Pescanova, al tiempo que duda si Deloitte puede negociar, en exclusiva, con las entidades financieras los acuerdos que se hayan de alcanzar para la continuidad de la actividad empresarial de las filiales.
La Xunta pide "dejar trabajar" a Deloitte y evita valorar que Pescanova recurriese la decisión de apartar al consejo
El conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, ha pedido "dejar trabajar" al administrador concursal de Pescanova, Deloitte, y ha evitado entrar a valorar que la compañía gallega recurriese el auto que aparta de la gestión de la compañía al consejo de administración. "No hacemos ningún tipo de valoración", ha zanjado el titular del departamento autonómico en declaraciones a los medios, antes de destacar que el juez y el administrador "tienen que dar los pasos para desarrollar el concurso y, por lo tanto, encontrar todas las vías para que Pescanova garantice tanto los puestos de trabajo como su viabilidad".
Tras presidir un acto en el centro de supercomputación de Galicia, Conde ha llamado a "dejar trabajar" al administrador concursal y al propio juez, "también en una colaboración permanente entre el administrador concursal identificado por la CNMV como con los directivos de la propia empresa". Preguntado por la posibilidad de que esta medida aboque a la firma gallega a la liquidación, el conselleiro ha incidido en que el administrador concursal "tiene un único objetivo que es, en principio, identificar cuál es la situación de las cuentas de la empresa" y, "por lo tanto, cuales son las diferentes vías para encontrar la viabilidad de la misma". "Y trabajar en el futuro de los puestos de trabajo y de la empresa".
"Ese es el objetivo que se plantea siempre que se aborda un proceso de estas características", ha constatado Francisco Conde antes de insistir en la petición de "dejar trabajar al administrador concursal" para que pueda "identificar vías de futuro".
El trabajo, según ha enfatizado el dirigente autonómico, "debe ir en una sola dirección" con la vista puesta en "garantizar los puestos de trabajo y la viabilidad de la empresa". Conde también ha declinado hacer una valoración sobre el hecho de que el exconsejero y accionista Alfonso Paz-Andrade se desprendiese en febrero de acciones de Pescanova valoradas en 2,55 millones. "No tenemos nada que decir en ese sentido", ha apuntado, antes de remitir a la "valoración que tendrá que hacer en su momento la propia CNMV".