Wert y los premiados

La actitud de un grupo de universitarios premiados por sus brillantes expedientes, negándole el saludo al ministro Wert en un acto de homenaje a los mismos, quedó coja. Es evidente que estos muchachos en sus respectivas carreras son unos fuera de serie, pero en esta ocasión les fallaron las formas. ¿Qué es eso de dejar con la mano extendida al ministro de la mala educación? Si esos son los fenómenos de la promoción, ¿cómo serán los que aprobaron raspadillo? Y es que hasta hoy era un crack cualquiera.

Una vez estigmatizada la demoníaca “Educación para la Ciudadanía”, y encumbrada la imprescindible “Religión”, las cosas van a cambiar, y la exigencia y el rigor volverán a ser fundamentales en nuestras aulas. Como con Franco. Y de ahí el cabreo de los lumbreras. Porque a sus hermanos pequeños se les exigirá lo que no está en los escritos, y si en las Escrituras (la sagradas, no las notariales).

Chavales. Reconoced vuestro error, pues rectificar es de sabios, y vosotros sabios sois. No teníais ni tan siquiera que haber asistido. Sois demasiados inteligentes para perder el tiempo con semejante compañía. ¿No veis como al final va a tener razón este columnista y os fallaron las formas? No obstante mi más cordial enhorabuena. Y a ver si lográis quedaros a trabajar en España.