El gato de Su Señoría
Bermúdez de Castro Olavide, Ignacio - lunes, 01 de octubre de 2012
Hace 30 años que el por entonces alcalde de Jerez, Pedro Pacheco, acuñó la frase de que la justicia es un cachondeo. Entonces este columnista no frecuentaba las salas de vistas, pero hoy en día les puedo asegurar que tal supuesto desmadre es inexistente. ¿Qué la Justicia española es mejorable y lenta? Obviamente, y a las pruebas me remito, pero eso es otro tema.
Y todo ello a pesar de lo ocurrido en unas dependencias judiciales compostelanas, cuya titular lleva a su gato a las vistas. Dos cosas a destacar. La primera, por obvia, no dejaré de mentarla. Es tan kafkiano llevar a un minino a estrados como a un rinoceronte. Y la segunda, que ya va siendo hora que aquella inmensa minoría de magistrados que piensan que el juzgado es suyo, se caigan del guindo y reparen que el mítico Gary Cooper de Solo ante el peligro, ya está en los cielos.
Lo del felino es intolerable, y requiere de la intervención del Consejo General del Poder Judicial. De no ocurrir, que a nadie le extrañe que se vuelva a escuchar lo de que la Justicia es un cachondeo. Confiemos en que la más que probable queja de los letrados santiagueses prospere, pues malo sería que no les dieran la razón. Si esto aconteciera tal vez la solución sería que ellos llevaran a los juicios a sus perros.

Bermúdez de Castro Olavide, Ignacio
Las opiniones expresadas en este documento son de exclusiva responsabilidad de los
autores y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de la empresa editora