Opinión... mod(l)esta IV

Hace unos días leía en La Voz de Galicia unas declaraciones del Sr. Alcalde de Lugo donde decía más o menos literalmente que: “Blanco (se entendía que se refería al Ministro de Fomento D. José Blanco de Palas de Rey) aprendeu a democracia no meu colo”.
Yo siempre tuve mis dudas acerca del sentido democrático del Sr. Ministro y conste que no di pábulo jamás –no me lo creo, simplemente- a la especie que circulaba por Lugo de que cuando vendió su casa en la ciudad le había pedido a la compradora la mayor cantidad de dinero B posible. No me cupo nunca en la cabeza que un demócrata, ideológicamente socialista, pudiese subvertir el principio fiscal de proporcionalidad en función de los ingresos de cada cual basado en el principio inalienable de solidaridad.
Mi duda acerca del sentido democrático del Sr. Ministro y al parecer cabeza de lista por Lugo tira por el campo de la docencia. El bilingüismo filial lo delató. Creo que el Sr. Alcalde de Lugo es profesor de filosofía. Si su alumno Blanco asimiló el concepto filosófico de la “cognitio rerum per altiores causas naturali lumine comparata” en buena lógica, dentro de su sacrosanta libertad debía, creo yo, dar ejemplo de limpieza y pulcritud acorde con la luz natural o de la razón. No mentir.
Dando por supuesto que uno no es experto en silogismos ya sean en Barbara, Celarent, Darii o Ferio, uno sí sabe que desde los romanos rige el principio de que “si la mujer del César no sólo tiene que ser honesta sino también parecerlo”, no es menos cierto que el César estaba obligado a cumplir la trilogía del "Honeste vivere, alterum non laedere, cuique suum tribuere". Y esto creo que es aplicable tanto al César que suscribe como al César Alcalde maestro del César Blanco como también a este albo César.
Por ello, en reconocimiento al derecho fundamental a la presunción de inocencia, esperamos que el Sr. Blanco demuestre, a la brevedad posible, al pueblo al que pide que lo vote –donde no me cuento- y al pueblo que le paga el sueldo – ahí si me cuento y además inspeccionado por Hacienda a la que contribuyo regularmente- que, como decía el charlatán de feria: “Ni 400.000, ni 300.000, ni 200.000, ni 100.000, ni un sólo euro he recibido ilegalmente de ese presunto delincuente que me ha denunciado. Si ha sido legalmente, yo lo aceptaré siempre que exhiba factura o recibo justificativo”. No me disgustaría que Hacienda lo inspeccionase como a un anciano de más de tres cuartos de siglo que tiene que trabajar para pagar al personal que no quisiera despedir. Y sin B, ni subvenciones, ni prebendas. En Guitiriz se fabrican unas tortas de maíz riquísimas
Sr. Alcalde de Lugo: “no todos los alumnos salen figuras, aunque el Sr. Blanco, Ministro del Gobierno de España aparenta haberlo conseguido, ser figura. Ahora bien, entiendo que es urgente que confirme su presunta inocencia. Más urgente que la llegada del AVE a Galicia.
A la espera de los “facta concludentia”.
A mandar.