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¿Existe vida después de separada? (II)

lunes, 20 de septiembre de 2010
El duelo “efectivo”, los EX y la madre que los parió

Aprender a resolver los apegos ayuda a alcanzar la independencia emocional
Pasados esos primeros días y semanas de impacto emocional, donde descubres una nueva vida sin tu “ex cari” debes saber que hay un proceso por el que pasar donde elaborarás ese impacto emocional, a este proceso se le conoce como DUELO AFECTIVO.
Se sabe que el duelo es el conjunto de reacciones emocionales que tienen lugar tras la pérdida de alguien importante. Asimilar sentimientos como; ira, dolor, soledad, desconfianza e incertidumbre en un espacio breve de tiempo. No se duerme, no se come, se suspira constantemente y se tiende a visitar lugares comunes y abrazarse a recuerdos, pero todo parte de un proceso. También lo hay que quieren deshacerse a toda costa de todo lo que le recuerde a ese ser.

Fases del Duelo
Un duelo normal equivale a conductas lógicas cuando pierdes a alguien que has querido y sobre todo tienes en un pedestal y se suceden diversas fases como: Tristeza, donde se empieza a llorar y no se para. Enfado, o ira, cuando ves que no se puede hacer nada más. Culpa, lo que se debía haber hecho o no hacer con esa persona. Soledad, que emana  de la imposibilidad de volver a compartir y, otros sentimientos tales como fatiga, impotencia, shock, anhelo, emancipación y alivio y por ultimo se llega a la ACEPTACIÓN, el PERDON y agradecido recuerdo. El trabajo con el perdón a uno mismo y a quién pierdes emocionalmente reconvierte la culpa en comprensión y esta en agradecimiento. Esta elaboración del agradecimiento origina de forma instantánea un profundo sentimiento de paz y serenidad. Presentar ausencia de sentimientos puede ser debido a que hay muchas emociones que afrontar, es una forma de protegerse.
       
¿Se puede morir de amor?
No de amor, hoy en día nadie muere, el duelo patológico es cuando todo se intensifica, las emociones se desbordan y no se logra avanzar. La forma en como te relacionabas con tu ex pareja, como se produjo la ruptura y el entorno con el que se cuenta (familia, profesión o amigos) ayudan a como afrontar mejor o peor y el tipo de redes de apoyo con las que se cuenta o no. Sería importante entender lo que significa el concepto de Dependencia Emocional, y es una necesidad afectiva  extrema que una persona siente hacia otra siendo incapacidad de soportar la soledad. Aunque ya hablé muchas veces sobre este concepto, sabemos que las personas que hacen duelos complicados tras la perdida de la pareja, como los  dependientes emocionales vivieron en su vida abandonos tempranos por las figuras paterna o materna, debido a enfermedades, separaciones o situaciones escolares de internamiento, etc...

Claro que hacerse cargo de hipotecas o de los niños, en muchos casos y tener que involucrarse rápidamente a actividades que antes se hacían en conjunto, no da tiempo a elaborar un proceso de duelo con toda la calma que se quisiera. Para superar a tu ex, lo mejor que puedes hacer es trabajar bien la estructura emocional propia y resolver tus apegos para avanzar hacía la independencia emocional. Ver que la propia valía de una persona no está en tener o no una pareja al lado. Es bueno encontrar un lugar, un nuevo sitio en la mente de cada a uno al ex e iniciar la reconstrucción del proyecto de vida. Si existió mucha rabia cuando se produjo la ruptura, debido a maltrato,  infidelidad o similares, suele ser un obstáculo para resolver el duelo pero es importante resolver cualquier duelo anterior que puede mantenerse enquistado en las emociones y es como solucionar capas internas pues la no sana resolución de los primeros obstruye la resolución apropiada de los últimos. Mecanismos de defensa como, la negación, nacionalización, transformación o sentimientos desplazado; indiferencia, rencor, depresión... para trabajarlos y reconvertirlos en culpa responsable. El agradecimiento y llevar todo el sentir pasado hacia el ex hacía una sensación de gratitud por lo anteriormente vivido es de gran trascendencia pues se sanea el perdón.
Castro Liz, Ana
Castro Liz, Ana


Las opiniones expresadas en este documento son de exclusiva responsabilidad de los autores y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de la empresa editora


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