Don Obama y su familia han llegado a la Casa Blanca en autobús

Don Obama y su familia han llegado a la Casa Blanca en autobús.
-¿Por qué?
-Cuando llegaron al aeropuerto quisieron coger un taxi pero hasta que pasó un taxista negro ninguno le paraba. Joder, si soy don Obama, decía.
-Cariño, ¿llevamos todo? ¿No se nos habrá quedado algo en casa?- le decía doña Obama.
-No, mujer, no. ¿No ves qué maletas llevamos? ¿Por qué te crees que no hay un taxi que nos pare? –dijo el.
-Pues a ver si pillamos un camión –dijo ella.
Cuando llegaron a la Casa Blanca, no daban crédito.
-¡Que no, hombre, que no! ¿Cómo va a ser este señor el presidente?, que el presidente viene en tanque y no en un camión. Mira que los hay con cara- decía un guardia.
-Qué es este señor ¡joder! ¿No veis que es el nuevo?– decía el camionero.
-Pues que lo demuestre, coño, que nos enseñe el contrato de alquiler y el recibo de la fianza, que el otro se ha marchado sin pagar– decían los vigilantes.
Pi, piriripi, pi, pi… sonó el móvil del presidente…
-Diga. Soy Obama –dijo el presidente Obama en voz alta para que oyeran los vigilantes.
-Enhorabuena, cha, che, chi, cho, chu, manú, gitanú, digo Obana, Obanú –dijo el pelo de un bigote que salía por los agujeros del teléfono.
-¿Y quién coño es cha, che y Pinoché? –dijo don Obama.
-Soy Aznar, che y te llamo para pedirte que bombardees Guernica, che, allí ya están acostumbrados, che, y hay terroristas, che…
-No plagies al rey, gilipoyas. Pídele ayuda al Bush que ahora está en el paro y tiene más tiempo y experiencia, corto y a tomar por c…
-¿Quién era cariño?
-El che, digo, el cha, digo, el cho, digo, el chu, digo el bigotes, digo, un cara, digo...
-Ah, ya sé. Ese.