Quisicosas (IX)

Había, no hace muchos años, un anciano jesuita en Roma que padecía de tremendo estreñimiento hasta el punto de que, cuando iba a sentarse al trono, tras ponerse cómodo, pasaba por el refectorio y comentaba a los contertulios: “Oggi, Dio mi ha fatto il beneficcio”. Fácilmente entendible: Hoy, Dios, me ha hecho el beneficio.

Estos días, el gallinero mediático anda -cierto que como siempre- alborotado con la aceptación por parte del Presidente de turno de la Unión Europea que, casualmente, es el elegido por los españoles para regir -nunca mejor dicho- los destinos de diecisiete autonomías, Ceuta y Melilla -de momento- y la nación catalana, de la invitación que le efectuó Mr. President Obama, no sabemos si animista o islámista por parte del progenitor A (Black) y cristiano por parte de la Progenitora B (White), para asistir a un “Desayuno de Oración”.

Y decimos que el gallinero mediático anda alborotado porque, aunque no es como el público con los árbitros que: “unos a su padre y otros a su madre”, aquí, podíamos decir que existe casi unanimidad en que no debía de ir: unos por coherencia, otros por decencia y algunos por inconveniencia. Pero él, inefable, no entiende que alguien no entienda que él no debe ir cuando quien debe explicar el por qué ha sido invitado es el propio Sr. Obama.

Así las cosas y, sin perjuicio de otra quisicosa más profunda sobre el tema, yo creo que debe de ir:

1º.- Porque a lo mejor, “Dio noi ha fatto il beneficcio” y vuelve o poniendo crucifijos en las escuelas o convirtiendo en románticas o neoclásicas o barrocas a sus niñas, o yendo a presentar la ofrenda al Apóstol el 25 de julio o, en fin ordenando que en todos los colegios del Reino empiecen las clases o bien con un Padrenuestro, un Avemaría o Alah-al-Bahr. El por fin ansiado cambio.

2º.- Porque, a lo mejor, ordena sustituir los desayunos de cereales y mantequilla con tostadas o los pepiños de ternera por piononos y jesuitas. Que, por cierto, los elabora divinamente la pastelería del bajo de mi despacho.

3º.- Porque como ya ha dicho en su día, no hay que preguntar qué puede hacer Obama por nosotros, sino qué podemos hacer nosotros por Obama. Y, a la vista está. Rezar, orar, y quizá algo que no tuvo ni tiempo, ni ocasión, ni ganas, de leer algunos textos de la Biblia aunque dada la originalidad, simpatía, talante y alianza de civilizaciones a lo mejor, intenta, para darle colorido a la ceremonia intercalar alguna Sura del Corán, alguna poesía de Gamoneda y quizá la canción que gusta tanto a su hija, del grupo Mago de Oz cuyo título no reproducimos por tratarse de jornada de oración. No sabemos que su Sra. asista de vocalista si hay coro. Y, las niñas, esta vez, a lo mejor van con burka. Sea todo por la alianza de civilizaciones.

¿Podemos hacer algo más por Obama?. Quizá sí.

Se me ocurre que trucar el pie de foto del soldado americano en Afganistán y donde dice: “War prisionner”, poner “Peace prisionner”. Es que si se llamase John…… pero es que se llama Barak Hussein. ¡Nuestras puras raíces islámicas!.

I love you Hussein.
Y, que opina Vd. de todo esto Mr. Zapatero?.
Thank you.
Amén.