Y Dios se hizo pobre para los pobres
Agrelo, Santiago - jueves, 25 de diciembre de 2025
Una Iglesia de los pobres
Es navidad: La luz de Dios ha brillado para nosotros; la Palabra eterna de Dios ha puesto su tienda entre nosotros.
El profeta lo anunció así: "El pueblo que caminaba en tinieblas vio una luz grande; habitaban tierras de sombras, y una luz les brilló".
Y así comenté ese anuncio, hace muchos años, apenas comenzado mi servicio en la Iglesia de Tánger:
«Cuando en nuestra asamblea escuchamos hoy las palabras del profeta, vemos caminos de África, caminos en el desierto y en el mar, caminos por los que se van hombres y mujeres que huyen de la noche: vemos hambre y esperanza de pan, miseria y esperanza de justicia, violencia y esperanza de paz
vemos rostros concretos de hombres y mujeres que hemos conocido, hombres y mujeres avanzando, cada uno en su noche: unos en su soledad, otros en su tristeza, quien en su enfermedad, quien en su esclavitud, aquel en el miedo, aquel otro en la desesperación. Cuando oímos las palabras de profeta, vimos nuestro propio rostro, pues también nosotros caminamos en nuestras tinieblas, no sólo porque también es nuestro el dolor de nuestros hermanos, sino porque tenemos nuestra propia oscuridad, hecha de egoísmos, esclavitudes, miserias y pecados.
Para los lejanos, para los cercanos, para nosotros, para todos es la buena noticia de esta noche santa, a todos se ofrece la gran alegría que llega del cielo: "Hoy, en la ciudad de David, nos ha nacido un Salvador, el Mesías, el Señor". A todos los que estaban sometidos al dominio de la muerte se les anuncia el nacimiento del que es la Vida.
Con el nacimiento de Jesús, llega el que es luz para los ciegos, libertad para los cautivos, gracia para los pecadores, buena noticia de Dios para los pobres.
Con el nacimiento de Jesús, la salvación está tan cerca de los pobres que pueden mirarla, tocarla, acariciarla, adorarla, amarla, estrecharla en los brazos y guardarla en el corazón.
Con el nacimiento de Jesús, la gloria de Dios habita en nuestra tierra, y la pobreza de los hombres se sienta a la derecha de Dios en el cielo.
Con el nacimiento de Jesús, el amor de Dios y la fidelidad del hombre se encuentran, la justicia y la paz se besan, la fidelidad brota de la tierra y la justicia mira desde el cielo.
Con el nacimiento de Jesús, la tierra ha dado su fruto, una cosecha abundante, generosa, como nunca la ha habido ni puede haberla jamás, una cosecha permanente de bendiciones del cielo para los creyentes, cosecha de paz para nuestro tiempo y de gloria para nuestra eternidad, una cosecha permanente de verdad en la obediencia del hombre a su Dios.»
Entonces lo escribí así: "Con el nacimiento de Jesús".
Hoy he vuelto a recordarlo, porque es necesario recordarlo siempre; pero algo me obliga a recordar también, que aquel día, en Belén, con Jesús, estaba naciendo su cuerpo místico, su Iglesia, la comunidad de fe en la que vive el Señor. Necesito recordar que la navidad de Jesús, es también navidad de la Iglesia.
Necesito recordarlo, para grabar en el corazón lo que somos, lo que estamos llamados a ser, lo que en el mundo ha de ser nuestra misión.
Naciste con Jesús, Iglesia cuerpo de Cristo, y has de crecer con él, si quieres ser como él: luz para ciegos, libertad para cautivos, gracia para pecadores, evangelio para pobres, salvación para todos
Naciste con Jesús para ser Iglesia que acoge a cuantos la legalidad vigente, no sé si laica, cristiana o atea, desaloja de un mísero espacio donde cobijarse
Naciste con Jesús, para ser Iglesia que acoge a cuantos la legalidad vigente arroja fuera del camino
Naciste con Jesús, y reclamas de tus hijos un parecido indispensable con el Dios que nace pobre en Belén
Naciste con Jesús, para hacer política viviendo contracorriente, viviendo en el mundo sin ser del mundo, viviendo al modo de Jesús de Nazaret
Naciste con Jesús, y llevas justicia y paz a todos los hambrientos de paz y de justicia
He dicho Iglesia; tal vez sea mejor que digamos: comunidad eclesial, comunidad eucarística, comunidad de hombres y mujeres que hacen fiesta en torno a un Dios que nace pobre, hombres y mujeres que sueñan con recibirlo, y ser uno con él: ser como él, ser él
Navidad en los caminos de la inmigración:
Entre el 3 y el 12 de diciembre, en el bosque de Ras Asfour, cerca de Uchda (Marruecos), han sido encontrados nueve cadáveres, que se supone son de inmigrantes subsaharianos
dos eran de mujer
fallecieron a causa del intenso frío
Ofrenda:
Vengo a ofrecerte, Señor,
el tesoro de mi nada,
la oscuridad de mi noche,
la amargura de las lágrimas,
la pequeñez de mi fe,
y esa estrella de luz blanca
que has encendido en mis ojos
y que llamaste esperanza...
Feliz Navidad, Virgen María, madre de Jesús, madre de la Iglesia, madre de los pobres. Feliz Navidad, Iglesia cuerpo de Cristo, sierva del Señor, sacramento del amor que es Dios.
Dios se ha hecho pobre, para que llevemos a los pobres en el corazón.
(Fr. Santiago Agrelo es Arzobispo emérito de Tánger)

Agrelo, Santiago