Galicia es una comunidad donde el peso de la industria es más que evidente. El textil, la

alimentación y la transformación de la madera forman un triángulo productivo que da empleo a decenas de miles de personas y sostiene buena parte de las exportaciones gallegas. El textil, por ejemplo, representa ya el 23,1% del total de las exportaciones de bienes de la comunidad. De hecho, Galicia lidera este sector en España, con el 37% de las exportaciones nacionales. La industria alimentaria, por su parte, aporta el 13,6%, con un peso muy marcado del sector pesquero.
El crecimiento sectorial de las diferentes industrias ha estado íntimamente ligado al desarrollo tecnológico. Y pese a las diferencias que puedan presentar, hay un denominador común que se repite en fábricas, plantas de procesado y talleres: los
PC Panel, una especie de ordenador industrial diseñado para funcionar directamente en zonas de producción.
Cada sector, un entorno complicado
En una fábrica de conservas o en un centro de procesado de pescado, por ejemplo, las condiciones no son fáciles: humedad, agua a presión, temperaturas variables
Cualquier equipo convencional duraría poco en ese entorno. Al contar con un diseño estanco que impide la entrada de líquidos, los equipos
PC Panel Full IP69K son inmunes a este tipo de tratamientos.
En el caso del textil, donde los ritmos de producción son altos y hay que coordinar muchas tareas en cadena, este tipo de paneles se integran en los puestos operativos para controlar tiempos, verificar pedidos o revisar instrucciones. En las empresas madereras, el reto es otro: polvo, virutas, golpes, calor... La misma certificación IP69K los protege también frente a pequeños sólidos que pueden acabar corroyendo los circuitos impresos de las placas lógicas.
Lo importante es que no fallen
A diferencia de otros sistemas que requieren mantenimiento frecuente o están más pensados para oficinas, este tipo de equipos se coloca en la propia línea de producción y no necesita apenas atención. Basta con limpiarlos como si fueran una superficie más de trabajo. El operario puede consultar una orden, validar una tarea o recibir una alerta, todo desde el mismo punto donde está produciendo, a través de una pantalla táctil capacitiva multipunto resistente.
Además de contar con un diseño estanco, carecen de ventiladores y su consumo es más parecido el de un ordenador portátil, con apenas 45 W de energía. Asimismo, aguantan vibraciones según los estándares más sofisticados (IEC 60068-2-64). De igual modo, todos los puertos están protegidos con conectores roscados.
Hablando de conectividad, este tipo de dispositivos cuentan con todo tipo de puertos de uso estándar e industrial. Puertos COM -RS232, RS232, RS232, RS485, RS232-, Ethernet, USB 2.0 y 3.0, salida de imagen digital, etcétera. La idea no es otra que integrarse en el proceso productivo como un componente más en la cadena, con opción a panelado frontal y compatibles con el estándar VESA para instalarse en soportes convencionales.