No necesito adversarios y el silencio e I. S. Cámara
Caminero, Jmm - viernes, 13 de junio de 2025
Se está perdiendo la necesidad de observar, de ir observando dentro y fuera de las casas, de ir en silencio observando el exterior y observando el interior. Se está olvidando.
Te cruzas por la calle en un tramo con diez personas, y, la mitad, sin exagerar llevan el móvil en los ojos o en las orejas. No dejan que su cabeza les hable, que su interior les diga cosas, que el exterior con sus sentidos: ojos, oídos, nariz y la piel te diga algo. Te cuente el viento pequeño, el ruido de un coche o un árbol al moverse, una frase que una madre le dice a su hijo o un amigo a otro amigo, de un amante a su amor, y, mil otras cosas. No se deja que desde dentro emerjan percepciones, recuerdos, sensaciones, ideas, conceptos...
No sé, cómo terminará esto. Pero creo que se está abriendo otra etapa del existir humano. El ser humano si continúa así, que parece que sí, dentro de dos o tres generaciones ya será, será en muchos sentidos otro ser humano, ya llevará los artilugios cibernéticos instalados en su piel o en el exterior de su cabeza -si no dentro-. Ya será otra cosa, seremos una sociedad más parecida, creo a los termiteros. Pero no hablaremos hoy de ello...
Si alguien lee algunos de estas tortillas de palabras e ideas e imágenes y retórica que les envío cada semana. Si alguien lo hace, debe saber, que algunos de las variedades de tortilla, cito a artículos concretos, a otros columnistas, por muchas razones, primero, porque ustedes me han otorgado la liberad de pensamiento y conciencia y expresión y escritura y publicación; segundo, porque deseo sea usted consciente, que existe un mar de riqueza cultural en nuestra sociedad y país, del articulismo de opinión, llevamos al menos dos siglos y medios. Y, en este tiempo han aparecido miles, decenas de miles de ojos-plumas, de oídos-plumas, de manos-plumas que han rellenado cientos de miles de artículos. Falta un Centro Documental del Articulismo de opinión en nuestro de país y sociedad -también del periodismo en general-.
Bueno, pues me he encontrado con un notable autor, que todavía recita poemas en prosa que forman y conforman paellas de artículos. Se llama Ignacio Sánchez Cámara, pensador y profesor y escritor y articulista... entre los miles de estas tapas para degustar, en unos tres-cinco minutos cada día, me he encontrado con uno titulado: Wittgenstein y el silencio, publicado en ABC Cultural, el día 01 de diciembre del 2001, en el que nos habla-dialoga-piensa-siente sobre la necesidad del silencio. Necesitamos para ser y estar en el mundo, el silencio, necesitamos masticar silencio, es tan necesario como en la música, no habría música, si no hubiese entre las notas un silencio. El silencio nos habla. Somos voz y somos silencio y silencios...
Podría escribir este artículo, igual y semejante, sin citar a este articulista o a los cientos que ya he nombrado. Pero creo que hay que ser generosos y filantrópicos, quizás sea deformación académica de las citas. Quizás, también sea, para que usted sea consciente que está leyendo o pensando un género, una columna periodística que lleva con nosotros ya más de doscientos cincuenta años. Que existe una tradición ya larga.
Y, que este modo de escribir y de redactar textos es una forma de que usted piense. No interesa tanto lo que yo le pueda decir sobre el silencio, sino lo que usted reflexione sobre el silencio. Y, quizás, cuándo llegue a su casa, al atardecer cansado de trabajar, si se sienta en su silla o sillón, y, se aburra porque no tiene ganas de hacer nada, quizás se diga a sí mismo, me voy a obligar a no hacer nada durante cinco minutos. Me voy a obligar al silencio.
Y, si lo hace se percatará, que desde dentro empezará a sonar una sinfonía de ideas, recuerdos, palabras, conceptos, deseos, temores... Y, desde fuera, percibirá cosas que quizás no se haya fijado nunca. Esa figura que lleva en su armario de cristal diez años, y, no se había fijado que tiene colores verdes tenues... Quizás, recordará a sus hijos o sus nietos o a sus abuelos... Quizás, se dará cuenta de la importancia del silencio. Existen etapas más allá del silencio, pero eso ya será una conversación para otro día...
Invito, le invito a que lea artículos de opinión, de todos los articulistas y de todos los colores y de todas las ideologías. Si lo hace entenderá el mundo mejor, comprenderá otros puntos de vista. Reflexionará sobre otros temas. De ahí, el título de esta columna: "No necesito adversarios". Tenga la voluntad y el amor sobre si mismo, de permitirse leer diversos puntos de vista, no necesita adversarios. No necesita... No busque adversarios, es casi una necesidad urgente de nuestra sociedad y nuestro país y nuestro Estado de ser consciente de este concepto o esta idea. Para eso lea opiniones diferentes a las suyas... Paz y bien.

Caminero, Jmm