Proyecto FICOS - XIV
Ávila Soto, Federico - lunes, 02 de junio de 2025
El Proyecto, exposición razonada - (6)
A través de los siglos, las sociedades conformadas que recibimos en herencia generacional, siempre se ha conformado el poder a partir de unas relaciones interesadas del más listo, pudiente, espabilado o sanguinario proceder de personas, con un afán individual de dominio y riqueza, utilizando a un entorno próximo como mando o tropa que le fortalezca en sus "sueños" de grandeza. Y son muchos los caminos y estrategias que se inventan en ese proceder, prima la lucha "animal" de clase, sobre la lucha solidaria común humana, en las adversidades y logros.
En el Proyecto FICOS, se crearán comisiones de toda clase a iniciativa de todas las personas que conformen el estado, siendo responsabilidad de la presentación, propuesta y explicación, la persona que, como afectada, tenga capacidad de análisis y de exposición para, con la ayuda de otros interesados y expertos en la materia, acordar soluciones o vías de solución. Al conformarse un modo de vida diferente, unas relaciones diferentes, unas instituciones diferentes, unas formas distintas de encauzar los problemas, seremos conscientes, que las sociedades que heredamos tienen raíces muy profundas en las costumbres, en las creencias, en sus fiestas, en sus celebraciones, en sus tradiciones que, en su mayoría, son completamente opuestas y ajenas al proyecto que deseamos implementar; es por eso, que las comisiones serán de "toda clase" donde los interesados, conocedores y capaces de exponer claramente las contradicciones, exigencias o propuestas adaptadas a las nuevas realidades, lo puedan hacer con la mejor voluntad, profesionalidad y conciencia de "las herencias" acumuladas por miles de años.
Este Proyecto FICOS, no es para dividir a la sociedad en ricos y pobres, creyentes y no creyentes, liberales o comunistas, trabajadores o empresarios, explotados y explotadores, sino que es un proyecto de garantías de futuro, que logren y consigan erradicar toda guerra, explotación, abuso, violación y uso de unas personas por otras que en nuestras sociedades nos han impuesto, para gloria y disfrute de los más perversos personajes y, en forma piramidal, el abuso de los más pudientes, a costa de los más débiles, sean estos, de carácter, de sentimiento o de formación y cultura. La evaluación de nuestro trabajo, conocimientos, profesionalidad, comportamientos y respectos, serán las "leyes" que nos encaucen "positivamente o negativamente" conscientes de nuestro accionar diario, y conocedores de nuestros propios "defectos o virtudes, que la sociedad bien organizada en tantos controles y comisiones evaluarán.
Seguridades
El robo, el asesinato, el fraude, el engaño, la apropiación indebida, la ocupación del hogar, el desahucio, las pérdidas de carácter climático o de fenómenos naturales, así como otros muchos derivados que suceden en la vida diaria y que, al padecerlos, hay unas consecuencias negativas para quienes lo padecen, y unas muchas complicaciones en reclamar justicia o reparación; trae consigo, un movimiento o negocio de innumerables empresas, que nos ofrecerán toda clase de seguridad ¡pagada!
¿Quién no tiene hoy un seguro contra incendios, contra el robo, contra accidentes, contra un daño al vecino o a un transeúnte? ¿Quién no tiene hoy un seguro de decesos adaptado a cada economía? ¿Quién no tiene un seguro para su perro, gato o cualquier otro animal?
La seguridad la han conformado como un objeto de negocio a escalas gigantescas. Grandes empresas de seguros nos ofrecen toda clase de seguridad, y por millones de asegurados, les entregaremos cada uno una sustancial parte de nuestro salario mensual o anual, que hará ricos a unos pocos especializados en crear, organizar, ofrecer e implementar la necesidad de eses seguros.
Paralelamente a este movimiento o negocio que mueve una economía gigantesca, y que forma parte de las élites empresariales, políticas, jurídicas y económicas, se armará un verdadero ejército de ladrones, asesinos, fraudulentos, mentirosos, defraudadores, ocupas y desocupas que se beneficiarán de todas las malas artes que se inventan, al desgobierno de la cosa pública que, difícilmente reparará daños y pérdidas ocasionados por la acción depredadora de innumerables elementos, que su forma de vida es vivir de lo ajeno o del daño hecho a lo ajeno. Y tenemos que tener en cuenta, que la parte más importante de ese ejército está protegida, amparada, camuflada o enmascarada en el organigrama de la administración pública en todas sus vertientes.
Si usted, o ustedes
, tienen la desgracia de sufrir las consecuencias de un terremoto o de muchos de los desastres climáticos, como los incendios, por ejemplo, debido al calor que destruye amplias zonas de arbolado y cultivo, verá que los administradores de la cosa pública y la justicia son campos completamente ajenos al sufrir y padecer de las familias, por conseguir restituir su situación anterior.
Si usted, o ustedes
, que viven armoniosamente en una vivienda de alquiler, criando a sus hijos, o disfrutando de una vejez que, al ser objeto de mercado esa vivienda, que por años usted o ustedes han disfrutado, verán cómo todo un armazón jurídico impuesto y negociado entre políticos e inversionistas, lo pondrán a usted, o ustedes, ¡en la calle! ¡Cuánto sufrimiento, cuanta desesperación, cuanta incertidumbre, cuanta falsedad, cuanta mentira, cuanta promesa incumplida, y cuanto lavado de manos observaremos en los que nos representan! La inseguridad es la norma para toda persona o familia que, por motivos ajenos, (pérdida del trabajo, fallecimiento, enfermedad, accidente y otras muchas causas) se ven impedidos de un hogar, o de que los echen de su hogar.
La vivienda, el hogar, el núcleo principal que da continuidad a la vida humana, en el barrio, en el pueblo o ciudad, ha sido y es objeto codicioso de plusvalías, desde el más simple "propietario" de una vivienda, hasta las grandes corporaciones de inversores, que juegan en el casino del mercado como forma de enriquecimiento de un variopinto ejército de avariciosos, codiciosos y usureros interesados.
Si usted, o ustedes..., son víctimas, o familiares de víctimas de maltrato, de violencia sexual, de feminicidio hacia la mujer, o de homicidio por cualquier causa, se verán envueltos contra su voluntad, en innumerables procesos de años, donde "la justicia y la prensa" hurgarán en sus vidas, los someterán al escarnio público y..., la mayor parte de las veces, el daño ocasionado por la "Justicia", medios de comunicación e interesados, será muy superior a las penas aplicadas y al resarcimiento de lo perdido, maltratado, violado o publicado y, aunque el sexo masculino también puede ser objeto de estos hechos y padecimientos, es el sexo femenino el que más y frecuentemente, se convierte en víctima del accionar de personas faltas de los más elementales valores del respeto y dignidad hacia los demás.
La diversidad de fórmulas creativas de lo "Público" a través de los siglos, jamás ha conseguido dotar de seguridades a los diversos pueblos, etnias o civilizaciones. La "creatividad" siempre ha sido impulsada para robar, matar, imponer y vivir a costa de los más débiles, cultural y tecnológicamente menos avanzados, creando las condiciones propicias para la explotación, el robo, el asesinato o genocidio, y la dependencia por generaciones del poderoso, sean simples empresarios, como grandes "hombres de Estado" que, se las inventan todas, para hacer grande a este rey, a este zar, a este imperio, que jamás garantizarán seguridades de vida a las capas sociales más numerosas y desfavorecidas de eses sistemas administrativos.

Ávila Soto, Federico