Del pasado al presente y ante el futuro (3)

El concello de Cervo cambia de Alcalde. Taladrid da paso con la aquiescencia del Gobernador Civil y Jefe Provincial del Movimiento en la provincia de Lugo y el nombramiento del Ministro de la Gobernación Camilo Alonso Vega al nuevo regidor municipal Arcadio Pardiñas Vila, natural de Burela, que en junio de 1971 lleva doce años en el cargo, recordando como al hacerse con el bastón tenía 1.600 habitantes y en esas fiestas de San Juan 1971 alcanza los 3.000. Con Pardiñas formaban consistorio: Manuel Mon y Jorge Dean como tenientes alcaldes; Antonio Barcia, Jesús Enríquez, José Ramón Ben, Antonio Rouco Basanta, Federico Ruiz Cayón, José Farré Pico como concejales. Burela prevé la construcción de un Colegio Nacional y un Instituto de Enseñanza Media. Y lo más conflictivo. Un proyecto para unos cien chalets en la playa de la Areoura. Recordemos dos hechos. Se construyó un edificio que pretendía ser hotel, las viviendas unifamiliares, todo ello en territorio del Concello de Foz con invasión de la playa y del terreno afectado por Costas, razones que hasta hace poco tiempo justificaron la paralización y por fin el derrumbe de tales construcciones.

Pero con todo lo que antecede será en el puerto la obra más emblemática. Una ampliación del dique muelle de 280 metros. Una fábrica de hielo para la flota. Son 120 embarcaciones adscritas a la Cofradía de pescadores que ocupa a 1.000 productores. Se pretende un carro varadero para tareas del mantenimiento en los barcos. Ampliación de los depósitos de CAMPSA para suministrar combustible a la flota. Y por fin un proyecto para la construcción de viviendas sociales que beneficien a las familias que viven de la mar. Pero no será única la actividad la pesquera. Hay fábrica que usa el caolín y la madera. Los equipamientos y servicios hacen de Burela una villa con excelencia por su calidad de vida con un complejo deportivo en A Marosa. Todo ello en una parroquia del Concello de Cervo.

Mientras tanto: ¿Qué acontece en San Ciprián?. Ese Museo Provincial del Mar que se constituye en 1970 y que dirige Don Francisco Rivera Casás. Se procede a urbanizar Los Campos. Servicios Médicos de la Seguridad Social que añadir a los del ISM sitos en el edificio de la Cofradía. Urbanización de los terrenos próximos a la playa de Cubelas en el puerto de arriba. Acceso a la estación del FEVE. Y la puesta en escena del Plan Marisquero para proteger eficientemente la explotación y cría del marisco que tanta fama está adquiriendo desde esta procedencia y con ese viveros naturales como son las islas Farallones o el Cabo de Morás.

Hoy la crisis de Alcoa continúa siendo uno de los principales obstáculos a los que se enfrenta la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao en términos de actividad. La caída en la bauxita y la alúmina, componentes primarios para la fabricación de aluminio y principales tráficos de las dársenas portuarias de ALCOA-SAN CIPRIAN.

Los destacables resultados de los puertos nacionales contrastan enormemente con los del puerto de San Ciprián, donde la caída en la actividad alcanza el 60,65% en los primeros nueve meses del año, pasando de los 4,7 millones de toneladas en 2022 a 1,8 este año. De este modo, en el conjunto de los dos puertos que gestiona el organismo, el descenso se situó en el 26,78% -de 8.842.566 a 6.474.946 toneladas-.

40 años dañando el medio
El rechazo a la planta nuclear en el ayuntamiento de Xove fue una de esas luchas comunitarias en defensa de la tierra: miles en la marcha histórica del 10 de abril de 1977 impulsada por el nacionalismo gallego. Poco después llegó el aluminio con una promesa de industrialización para la comarca desechando una posible apuesta por el naval, el forestal o la industria agroalimentaria, sectores propios que hoy echamos en falta.

Las emisiones vienen afectando durante décadas a vecinos, ganado y cultivos de la zona. Alcoa fue condenada ya diez veces a indemnizar con más de 4 millones de euros a particulares, que cursaron demandas y llegaron al Parlamento con la asociación vecinal Airiños do Lago.

Serafín González, presidente de la Sociedad Galega de Historia Natural, explica que el flúor se utiliza en el proceso de producción de aluminio: "Siempre hay ciertas emisiones que se tienen que mantener por debajo de unos máximos legales. Si son importantes, pueden afectar a los cultivos y también a la salud de las personas, porque el flúor es un elemento muy agresivo". Diversos informes mostraban que se excedían claramente los límites.

Más afectaciones ignoradas en el debate público: el carbón que abastecía las térmicas gallegas venía de Indonesia, donde Greenpeace denunció en un extenso informe la vulneración de derechos humanos, afectaciones en la salud, en el medio y violencia contra las comunidades locales. En el caso de Alcoa San Cibrao, la bauxita proviene de la minería en Guinea Conakry. En un informe de Human Rights Watch, se denuncia la escasa compensación para los habitantes de la zona, la destrucción de tierras ancestrales y recoge testimonios que revelan que desde el comienzo de la minería, ha escaseado el agua para la población

De estos problemas derivados del proceso, el debate mainstream de los grandes medios de comunicación y los partidos solamente proponen soluciones para el precio (no el consumo) de la energía, con una tarifa eléctrica o con un Estatuto de las electro intensivas. El Estado ha estado subvencionando la electricidad de Alcoa con más de 1000 millones de euros, lo que la UE ha calificado de "subvenciones disimuladas".

Tal fue la dejadez, que Alcoa afirma que la situación es "insostenible", que se van, que no hay nada que hacer. El despido de trabajadores en una zona dependiente de esta empresa capitalista necesita de una solución .El plan no partirá de una estrategia socioeconómica de futuro para la zona, basada en el interés público y responsable con el medio o con la minería. Los tiempos y las condiciones las marca Alcoa.

Hay que buscar industrias sostenibles, basadas en la riqueza autóctona del país y que no contribuyan a destruir el planeta, sino todo lo contrario: a restaurarlo. Argumenta Patricia Grela que "Alcoa representa el ejemplo de la ausencia de transición ecológica porque es totalmente insostenible energéticamente". Sería más "conveniente" invertir teniendo en cuenta la crisis climática, y menciona la necesidad de apostar por la industria agroalimentaria o la generación de energía eólica.

Patricia Grela apoya "Hay que hacer una planificación democrática con vías a producir menos, hacer una transición energética y recuperar sectores indispensables para la vida". Menciona Grela a la agricultura ecológica, la ganadería extensiva, el mar o lo forestal.

Antón Sánchez: "Si en los años 70 tuviésemos capacidad de decidir, seguramente todos los recursos que se apostaron por estas industrias se hubiesen destinado al naval, a la industria agroalimentaria…

"Los primeros empresarios de electricidad en las aldeas eran los molineros", recuerda Casal Lodeiro, haciendo referencia a una descentralización de la producción de energía. "Tenemos que volver a eso, porque así estaría en manos de cada comunidad aprovechar lo que tuviese. Pero no centralizar en grandes parques toda la producción, porque eso es lo que le conviene a los monopolios".

En lo que todas coinciden es en cuestionar una industria tan destructiva con el medio y en la necesidad de una respuesta de futuro para los trabajadores. En el caso de Alcoa San Cibrao, las condiciones las pusieron desde un despacho de Estados Unidos, que se quiere marchar para lucrarse en otro lugar, dejando pasivos ambientales y una comarca deprimida.

Y una gran incógnita poco debatida. ¿La actual mano de obra de ALCOA sabe hacer alguna otra cosa distinta a la que hace y que le permita ser reinsertados laboralmente en otros sectores?.