Paula Alvarellos con el bastón de mando entregado por su antecesora, Lara Méndez.
Foto: GaliciaXa
Estimada alcaldesa:
En primer lugar quiero felicitarte por tu nombramiento en el pleno extraordinario de ayer, en que una mayoría de 13 concejales de los 25 que conforman la Corporación Municipal de Lugo te eligieron alcaldesa de nuestra ciudad. No puedo dejar de reconocer que siento envidia (sana, si es que eso existe), porque si hay algo que tiene que ser un honor absoluto es ser elegida cabeza visible de nuestro municipio, como tantas veces repetía el exalcalde Orozco.
Te enfrentas a desafíos terribles. Heredas un ayuntamiento que sube su endeudamiento para hacer frente a gastos absurdos y de difícil solución, como puede ser el mantener las ridículas y mal llamadas Caldas, el edificio inútil pomposamente denominado "impulso verde" o el repintado de un carril bici denostado por gran parte de la ciudadanía. Heredas un casco histórico que parece una zona de guerra, con una gestión del tráfico insostenible y unos plazos ya vencidos en la ejecución de unas obras que a ver cuándo acaban y cómo terminan. Heredas también una administración lenta y anquilosada, de difícil gestión y decimonónicos procedimientos en varios frentes...
Supongo que eres consciente del reto que supone, pero también estoy seguro de que no te vas a amilanar ante los obstáculos y que trabajando duramente y robando tiempo a tu familia y vida personal (es el gran precio que se paga en estos cargos y que muchas veces no parece que nadie aprecie) podrás superar.
En todo lo que necesites creo que sabes que cuentas con los ciudadanos de Lugo para sacar adelante a esta ciudad y resolver los muchos asuntos que tenemos pendientes.
Te deseo muchos aciertos, porque tu bien es el bien de Lugo y tus éxitos serán los de la ciudad.
Mucha suerte y muchos ánimos, Paula.
