Un cuento para no dormir
La factoría aluminera cerró. Había agotado su tiempo. Fue superada como tantas otras industrias por la competencia. Se quedó vieja. Era una fuente de gastos inútiles. Lo dejó todo perdido por tierra, mar y aire. Hasta Lantarón -Dios del Cantábrico- aplaudía. Volvería a recuperar su espacio entre los humanoides. vencía, así, a Baco. Sus hijas las sirenas entonaban hermosas canciones. Poco a poco el pringue rojizo fue desapareciendo en Lago y Lieiro.

Los llegados antaño desde Avilés ya se han ido. Regresaron a sus pueblos astures que huelen a sidra. Otros han recuperado las casas de esos lugares negruzcos en las cuencas mineras. El ye vuelve a escucharse alto y claro. O cuando hablan de una moza dicen que es pequeña pero galana. ¡Qué gracia tiene verlos monte arriba!.
Algo similar sucede con los bercianos. Cerraron los negocios que mancharon la historia del puerto para Las Reales Fábricas de Sargadelos. ¡Si, esos Campos!. Volverá el silencio nocturno para descanso de quienes fueron gentes de mar y hablan gallego. Hasta veremos alguna muchachada bañarse en la Barra con las subida de la marea o nadando contra la corriente de la ría en la pleamar. Y desde luego, alumnos de la escuela maniobrando en un chalano mientras una cucharilla trata de capturar alguna Chibana o Anguila. Hasta los cangrejos han regresado en los bajos del puente que une Lieiro con San Ciprián.
Alguien grita. ¡volvieron las pulgas a las playas y los camarones a las pozas!. De ser así, hasta las cuevas de siempre han sido otra vez ocupadas por los pulpos y el congrio. En las Cabezas vuelve el mejillón. En la Anxuela comienzan a brotas piñas de percebes. Por O Cabalo se puede ver a muchachos y jubilados pescando a caña Julias y Maragotas.
Quedó el puerto de ALCOA-SAN CIPRIAN. Será la entrada y salida de las mercancías. Un gran espacio intermodal. Área Integral Estratégica dotada de comunicaciones terrestres- autovía y ferrocarril- y de alta tecnología mediante cable. Para actividades sostenibles para el medio ambiente. Procedente la materia de la mar y los bosques, así como de la recuperación de cultivos tradicionales como lino y maíz.
Se hizo todo lo que correspondía para recuperar la actividad de la flota pesquera en el muelle de San Ciprián y saneando la ría se convirtió en la puerto deportivo de atraque para las embarcaciones de recreo. Se optó por un turismo sostenible, de la naturaleza con viajes programados a Los Farallones dónde se creó un acceso para poder pasar la jornada en las islas más accesibles y disfrutar de la pesca submarina desde tales aguas.
En la Isla de la Atalaya se creó un espacio que explica los antecedentes balleneros del puerto, así como la actividad industrial a la que dio lugar la transformación del mamífero en saín.
El embalse se convirtió en un espacio de entrenamiento para deportistas del remo.
Alguien tuvo la idea. Un espacio temático sobre las diferentes etapas por las que pasó la factoría aluminera con un panel dedicado a los que fueron miembros del comité de empresa, su historial desde su procedencia hasta las condiciones personales por las que dejaron la empresa.
Mosquera Mata, Pablo A.