Gastro: Tortilla de huevos cocidos de codorniz

Todo lo humano es herencia y tradición y creación e invención. En el campo de la gastronomía también, en el campo del articulismo literario de opinión también.

Pues hoy, inventaremos-crearemos un plato-comida, al menos, nosotros no conocemos que alguien lo haya inventado en la teoría o en la práctica.

Este plato esencialmente, dejo los matices a los cocineros y cocineras para que agreguen o quiten. Es una tortilla sea francesa o sea española. Como ustedes quieran. Pero en el proceso de realización de esos dos tipos o variedades de tortilla, antes se han cocido huevos de perdiz o de codorniz, y se les ha quitado la cáscara...

Y, cuándo ya está la tortilla casi para hacerse y rehacerse se insertan dichos huevos cocidos enteros, sin romper... y se termina la tortilla. Después se presenta, una tortilla francesa con huevos cocidos de perdiz o codorniz, o una tortilla española, con patatas y los demás enseres que quieran añadirle según las regiones o el gusto, más hecha o menos, y dentro huevos cocidos de perdiz o codorniz enteros...

Existe una tradición que la comida, como cualquier asunto se ha insertado en las letras. Los humanos hacemos cosas y después, las escribimos, ahora las fotografiamos, pero aunque la historia, por ejemplo, las grandes bibliotecas griegas y romanas, la mayoría se destruyeron, y, con ellas miles de recetas de comida, escritas y realizadas, posiblemente durante siglos. Pues los humanos, hemos siempre unidos mundos. Diríamos, que el hombre y la humanidad –aunque algunas corrientes filosóficas, especialmente materialistas, indican que no hay que utilizar el concepto humanidad que es metafísico-. Pero las letras literarias y la comida han estado relacionadas, aunque se hayan perdido muchos textos...

También otra variedad podría ser un plato de uno/dos huevos fritos acompañado de un huevo o dos de codorniz o de perdiz cocidos, adornado de un pimiento frito o asado, quizás algunas patatas... Los adornos ya los puede aportar cada cocinero/a. De tal modo

Estamos planteando algo más profundo, una evolución de la cocina tradicional con ingredientes tradicionales, pero no preparados de las formas tan alambicadas y/o rococós y/o barrocas y/o conceptual y/o minimalista de las cocinas nuevas -que por otro lado, tienen mucho mérito en sí-, sino de una forma tradicional, tanto de preparación de los platos, de los ingredientes, como de la expresión o puesta en escena para el comensal... algo que no difiera mucho de lo que siempre se ha hecho, pero con un elemento nuevo o más, pero sin retóricas. Platos para preparar en poco tiempo o un espacio temporal semejante a los tradicionales...

El huevo es el símbolo, la forma de huevo es el signo y símbolo de multitud de realidades humanas, a nivel cultural, religioso, social, psicológico. Símbolo de la vida, el omphalos del ser humano. Nacemos de un huevo en forma de célula masculina y célula femenina en todos los mamíferos -metaforizando los significados...-. Exponer y visualizar el huevo en forma de huevo en la comida, podría tener más significados. Porque somos grandes consumidores de este alimento, huevos de todas las clases y tipos, pero generalmente, se baten o se hacen líquido o pasta con otras substancias. Raramente existen platos en los que el huevo esté entero y completo, no fritos, sino cocidos, en toda su forma, con clara y yema.

Aquí en esta invención o diseño de plato y gusto y comida y color y forma y manera, estamos intentando revitalizar la forma de huevo y del huevo completo y entero. Evidentemente no crudo, pero si cocido, situado en el plato, en este caso dentro y rodeado por una tortilla a la francesa o una tortilla a la española con patata –cierto es que por las regiones y territorios de este largo y ancho país y paisaje y paisanaje han ido creándose distintas modalidades-, pues podrían formar este huevo o huevos cocidos -que aquí hemos indicado de perdiz y codorniz por ser más pequeños, pero caben también huevos de gallina, y otros tipos que existan en el mercado, ¡vaya el de avestruz...!-, se pueden realizar enormes variedades de platos posibles. Abrir una puerta a una nueva forma estética y de color y de combinación de sabores y de formas y de maneras de degustar... la comida, con moderación, como un placer honesto y moral humano...

Existe el hornazo, "que aquel día, el vientre de una madre se abrió y nació hace décadas, algún ser escribidor de líneas". El hornazo típico en estos lugares, fiesta movible, con eso de la Semana Santa cristiana y Pascua Judía, es un huevo cocido dentro de una torta dulce... ¡Bueno ya hemos terminado una columna periodística de gastronomía, siguiendo a los grandes maestros de este género, pero intentado ir un poco más lejos..., ahora, quedan que los comensales de los artículos tengan la liberalidad de admitir cambios...! ¡Paz y bien y buen sabor y buen alimento...!