Egrégores
miércoles, 24 de mayo de 2023
Egrégor en griego -egrégoroi-, es un concepto inmaterial, que hace referencia a la posibilidad de la manifestación de un efecto, causado por el "pensamiento" -individual o colectivo-.
La ciencia médica, lo define como "engrama". Y, nos dice: "Huella mnémica, creada mentalmente, que nos hace responder de forma consciente o inconsciente de una forma determinada de acuerdo a ella, y como restos de la excitación neurofisiológica, que la sensación y la percepción conscientes dejan en el sistema nervioso una vez desaparecidas, y que influencia de modo transitorio o duradero, el comportamiento posterior ante excitaciones similares".
Aclarémoslo.
Partimos del hecho de que, según ha demostrado la ciencia empírica; los pensamientos, son pulsos eléctricos que emiten ondas. Son los responsables de todo aquello que consideramos nuestra realidad, generando emociones diversas.
Se manifiestan como ondas que se mueven y trasladan por el espacio, impregnando con un patrón determinado todo lo que tocan. Cada vez que se emiten, se trasladan al que la mecánica cuántica denomina «Campo Unificado» -campo cuántico-. Un «cuanto», es la menor cantidad de energía que puede transmitirse en cualquier longitud de onda. En el caso del ser humano, como ser consciente, emite y genera con su energía de dualidad onda-partícula mental, una nueva forma de creación energética individual o, en su caso, se une a otras del mismo signo en cuanto a colectivo; afectando posteriormente al propio individuo o al grupo del que éste, forma parte constituyente.
Al fin y, como consecuencia; todo ser humano es co-creador de realidades buenas o malas. Personales o colectivas, al construir "egrégores", como secuela y corolario de creencias, ideologías,doctrinas, filosofías, mitos, símbolos, etc. Supeditando, subordinando, limitando, restringiendo y coartando de una u otra forma la libertad del individuo. Para bien, o para mal, según el signo u orientación que lleve el "egrégor" "fabricado".
Todo hábito repetitivo, engendrado por una forma determinada de raciocinio y,corroborando la tesis de que "la energía sigue al pensamiento", creará un "egrégor", que implicará un "miasma", esto es, un ambiente determinado donde nos hallaremos condicionados positivamente por una atmósfera: agradable, saludable, alegre, vital, etc. O, en su caso negativamente, si es: tóxica, incómoda, ponzoñosa, dañina, etc.
El "miasma", crea un campo cuántico por el cual, un grupo copia el mismo patrón o programa de conducta.
A nivel individual, por ejemplo, sabemos que a veces un pensamiento arraigado por largo tiempo en algún cajoncito de nuestra mente, terminará en ocasiones por sobrepasarnos. De alguna manera, se convierte en autónomo y, actuará en nosotros mientras lo alimentemos con nuestros pensamientos, sentimientos o creencias replicantes.
Responden al signo de polarización de nuestra creación, y al alimento que les proporcionemos.
Por esta razón, el «egrégor» es como un "ente vitalizado". Actúa como un almacenamiento de energía, impulsado por los sentimientos, deseos, ideales y temores de su creador. Cuanto más numerosos son, tanto más se fortalece el «egrégor» para influir en nuestras vidas.
Los «egrégores» neutros, son los más numerosos. Éstos son por ejemplo, las amistades del barrio, los círculos profesionales o grupos de amigos de toda la vida. Estos «egrégores», no son muy inductivos en términos de pensamiento, porque las personas comparten cosas, pero viven sus vidas cotidianas, sin que esto tenga un impacto real y perenne en su psique. Otra cosa es, como hemos explicado, si ese hábito pensante, se ha convertido en una preocupación, una rutina, una manía y, al fin en una obsesión...

Méndez, Ricardo S.