Mariña Ambiental: bajo control "aparente"

Fundación ALCOA. Planes Bravo para voluntarios de la factoría aluminera. Limpieza de playas en lucha contra el plástico. Elecciones para Concellos y Diputaciones. Ofertas y arqueos de los acontecido durante cuatro años. ¿Tormenta perfecta?.

Transformar bauxita en aluminio supone un proceso industrial con vertido por tierra, mar y aire, pero muy en especial la presencia amenazante de esa balsa repleta por los denominados lodos rojos. Sobre este último particular en plena pandemia -así pasó desapercibido- el diario CONFIDENCIAL publicó un trabajo que titulaba: "La balsa de lodos de San Cibrao: una bomba de relojería que dejará ALCOA como legado", consecuencia de esas 3.000 toneladas diarias de residuos indisolubles vertidos sobre una laguna toxica de 87 hectáreas de superficie y 42 hectómetros cúbicos de capacidad. Tal amenaza medio ambiental está protegida por un dique de contención de 80 metros de altura a 60 metros de una planta de acuicultura, a 200 de un núcleo habitado y 450 del mar Cantábrico.

La alerta sobre la situación que puede dejar Alcoa en Galicia la lanzó la Sociedad Galega de Historia Natural (SGHN), una asociación independiente y científica dedicada al estudio, divulgación, conservación y defensa del medio natural. La entidad ha solicitado a la Xunta los informes de sus técnicos e inspectores ambientales e información sobre las fianzas y avales depositados por Alcoa ante un eventual derrumbe. La SGHN reclama que se adopten medidas legales para bloquear los bienes y activos de la multinacional, a fin de garantizar la descontaminación integral de sus instalaciones y la estabilización de la balsa de lodos rojos "con las mejores técnicas disponibles a nivel mundial". También solicita a la Xunta, a través de la Consellería de Medio Ambiente, una auditoría externa sobre la estabilidad del gran almacén, preferiblemente de un organismo público de prestigio como el Instituto Geológico y Minero de España. En un comunicado, Adega advierte de que actualmente esta balsa aún no cuenta con un proyecto de cierre y clausura definitivo, ni tampoco con un plan de descontaminación.

Pero, ¿cuál es la vida que le queda a la balsa de lodos rojos de Alcoa? Fue el expresidente de la compañía en España, Rubén Bartolomé, marcó 2025 como el horizonte de la vida útil de la infraestructura. No obstante, y según explicaba recientemente la propia Alcoa a raíz de un comunicado de la asociación ecologista Adega, en 2014 la compañía presentó ante la Xunta de Galicia «un plan que permitiría extender la vida del depósito, conforme a la legislación vigente, hasta el 2034 si se aprueba.

En el pasado había inquietud y señalamiento de responsabilidad a los Concellos sobre el medio ambiente. Por tal motivo el Jefe Provincial de Sanidad se dirige a los Alcaldes con fecha 18 febrero de 1955 reclamando con la máxima brevedad los siguientes datos. Núcleos de población pertenecientes al Concello que disponiendo de alcantarillado en funcionamiento con estación depuradora viertan sus aguas residuales a un río y nombre del mismo. Distancia en metros desde el poblado hasta la salida del colector al río en cuestión. Distancia exacta del desagüe en el río hasta el núcleo de población o primer lugar habitado por el que pase dicho rio. Relación y características de las industrias que vierten sus aguas residuales en ríos del término municipal así como nombra de los referidos ríos y punto dónde tiene lugar el vertido. Condiciones resumidas de los abastecimientos de aguas potables en los núcleos de población.

Estamos en tiempos en que las denominadas infecciones por aguas contaminadas, muy en especial por materia orgánica producen brotes de gastro enteritis. Pero también riesgo de intoxicaciones por materias inorgánicas vertidas a las corrientes de agua de uso habitual procedentes de las diferentes actividades desde las industrias hasta el uso de pesticidas.

Con lo que antecede algunos sanitarios demandamos que aun cuando las competencias sean de la Xunta, los Ayuntamiento, como administración más próxima a la realidad ciudadana se comprometa a ejercer capacidad de control sobre el medio ambiente -incluidos los ruidos- dando cuenta en plenos municipales no sólo del estado en que están las playas, también el resto del territorio y las medidas que adoptan al respecto. Tal actitud y aptitud estaría dentro de ese lema "menos política y más sociedad".