La pandemia que nunca se fue

Lo sabemos. Hay dos naciones. La que pintan los que mandan. La que sufren los que obedecen. La que paga IRPF sin rechistar. La que tras virguerías contables o financieras escurre el bulto y paga lo mínimo. Lo peor es que la izquierda ya no es tal. Ahora sólo importa estar y disfrutar. Para ello se pacta con el diablo. Se agrandan las diferencias entre pueblos y personas.

La mentira y la manipulación son herramientas comunes a la derecha y a la izquierda. Ya nadie se acuerda de aquel anuncio de los cien años de honradez. La verdad nos haría libres. Por eso se le tiene a buen recaudo.

La última hazaña. Miguel Sebastián, que no es sospechoso de ser casta derechona ha dicho: "COVID 19, balance de diciembre 2022: fuerte repunte". Supongo que de inmediato será proscrito. Si existiera la Santo Oficio le haría como a Galileo. O adjuras, o te quemamos...

Nos sorprende con datos que no proceden de China, proceden del otro gigante asiático: La India. Y además nos recuerda que en el culto y tecnológico espacio de occidente el virus ha matado a más de cinco millones de personas.

Pero introduce una terrible disyuntiva. La libre circulación del virus sin restricciones. A pesar de las ocultaciones voluntarias para evitar "el pánico y sus efectos sobre la economía", hemos pasado de los 12,5 millones de infectados en noviembre a los 17,1 millones de infectados en diciembre. Los nuevos casos diarios, nuevas muertes por día -ahora ya no se publicitan en los informativos- y el porcentaje de vacunación con pauta completa, permite afirmar alto y claro que la pandemia no ha terminado.

Y lo más importante para los que dedicamos una parte de nuestras vidas a la salud pública como profesionales -asistencia, docencia e investigación- el ritmo de los contagios tiene mucho que ver con las aglomeraciones festivas, la climatología que invita a compartir espacios cerrados y la mutación en el Genoma del agente causal. ¿Qué problema hay en volver a recomendar las mascarillas en espacios cerrados?.

Nuestro sistema de asistencia sanitaria, siempre por estas fechas que coinciden con el alza de los brotes gripales, tiende a colapsarse. Con lo que la mortalidad por otras dolencias puede verse aumentada. No olvidemos que hay clara relación entre el tiempo que se tarda en atender determinadas patologías como los tumores y el pronóstico para con dichas entidades nosológicas.