La recuperación del sector turístico en la ciudad de Lugo ha terminado de consolidarse este verano. Los datos lo confirman: más de cuarenta mil visitantes pasaron por la Oficina Municipal de Turismo durante los meses de junio, julio y agosto, es decir, el
doble de lo que se registró en el mismo periodo de la última temporada prepandémica. Aprovechando el tirón estival, desde el ayuntamiento acaban de anunciar la futura puesta en marcha de un plan que estará precisamente diseñado para seguir mejorando estos números.
La iniciativa centrará sus esfuerzos en resaltar la historia, la gastronomía y los entornos naturales que es capaz de aportar Lugo, tratando siempre de ganar músculo frente al turismo internacional, que es claramente el talón de Aquiles del municipio. Para la socialista Lara Méndez, alcaldesa lucense, la sostenibilidad es el elemento diferenciador que el sector debe incluir en sus actuaciones para marcar la diferencia. La regidora entiende que no sólo se trata de presentar espacios de interés, sino que además es importante ofrecer experiencias.
Para activar una iniciativa de este calibre que apueste por la renovación del atractivo turístico local es necesaria una importante inyección económica. Es ahí donde aparece la figura de los fondos europeos, a los que el ayuntamiento ha solicitado una partida presupuestaria de dos millones y medio de euros para vehicular el plan turístico que podría mantener la tendencia alcista que está cosechando Lugo como destino de referencia. En este punto, hay que aclarar que la gestión del proyecto correrá a cargo del PSOE y no del BNG, a pesar de que ambos partidos gobiernan en coalición. Esto es debido a que se trata de una ayuda económica cuya solicitud depende en exclusiva de la alcaldía.
Tres ejes sobre los que trabajar
El proyecto presentado a Europa tiene como casilla de salida el hecho de seguir promocionando la riqueza patrimonial de la ciudad de Lugo, desde su espectacular pasado romano hasta el conjunto de edificios históricos que ocupan el casco viejo. Sobre esa base se han perfilado los tres grandes ejes que dan forma al plan turístico en cuestión: gastronomía, sostenibilidad e innovación tecnológica.
El primero de ellos, que se centra en dar cabida al potencial gastronómico de la zona, busca que la actividad turística deje de estar vinculada al municipio lucense sólo en un periodo concreto de la temporada. Para ello, la idea pasa por recuperar la cocina romana a lo largo de todo el año, a base de productos locales, ecológicos y de temporada, enlazándolos además con las costumbres agrícolas y ganaderas que han venido asentándose en la zona durante siglos. El concepto trata de combinar la gastronomía y la historia para ofrecer a los visitantes una propuesta en la que pueda estar implicado el mayor número posible de hosteleros locales.
Bajo esta misma línea, el segundo eje contempla la creación de un club enogastronómico en la
Fábrica da Luz, a orillas del río Miño. Este tendría un carácter público-privado y estaría compuesto por todos los restaurantes de Lugo que quisieran formar parte de él. La peculiaridad de esta idea no sólo reside en el disfrute de un entorno natural con tantas posibilidades como el que nos ocupa, sino que además se incluirían relatos y recreaciones de tinte histórico para acompañar a cada uno de los menús. Es justo en este contexto donde está pensado añadir, a través de diferentes actividades, el valor que siempre han tenido en el Concello el modo de vida y los oficios tradicionales. Al respecto, la tentativa pasa por articular una labor de investigación histórica que sirva para rescatar todo ese caudal identitario que pueda venderse de manera turística.
La tecnología para conocer al visitante
Por último, sólo resta poner de relieve el contenido del tercer eje del plan del ayuntamiento de Lugo, que en este caso versa sobre la eficiencia energética y el aprovechamiento de la tecnología. Desde el gobierno local entienden que el turismo sostenible debe funcionar como el núcleo de todo, por lo que el objetivo se centra, entre otras cosas, en potenciar la movilidad eléctrica, recurrir al uso de energías cien por cien renovables y fomentar el autoconsumo de energía. El proyecto buscará ser lo más respetuoso posible con el medio ambiente y, en este sentido, llevará a cabo distintos cursos de formación dirigidos a las pymes del sector.
La apuesta por la innovación será otro de los pilares esenciales. La iniciativa recurrirá a la realidad aumentada para crear escenarios en tres dimensiones de los enclaves más representativos, en los que los visitantes podrán sumergirse e interactuar de forma virtual para conocer de primera mano cómo ha sido la vida en Lugo a lo largo de la historia. Además de esto, el plan turístico habilitará un portal web en el que los viajeros podrán aportar sugerencias, inquietudes o comunicaciones de cualquier tipo a través de distintos formularios para mejorar la calidad del servicio. Esto, unido al uso del bigdata en las webs de los turoperadores lucenses, será muy útil para conocer mejor los gustos y las preferencias de los turistas.
Cabe destacar que un análisis de datos a gran escala como este se caracteriza por seguir el modelo de las dos grandes referencias que a día de hoy lideran la aplicación de una tecnología así, como son el comercio electrónico y las plataformas de juegos de azar. En el primero de los casos, el bigdata se emplea sobre todo para precisar el perfil de los compradores en función de los datos que estos van dejando en la web mientras navegan. De esta manera, los ecommerces analizan indicadores como el tiempo que un consumidor permanece en las diferentes categorías de compra, los productos sobre los que se interesa o el método de pago que suele emplear. Se trata de una información fundamental que ayuda a conocer bien qué desea la clientela.
Por su parte, los entornos especializados en el juego a través de internet suponen el otro gran ejemplo en esta tarea de utilizar el bigdata de forma excelente. No en vano, los
casinos online nuevos se caracterizan por invertir elevados presupuestos económicos en esta herramienta a la hora de averiguar con la máxima certeza cuáles son las prioridades de los jugadores. La industria del juego es experta en el estudio de variables que permiten conocer, entre otras cosas, cuáles son las salas que mejor funcionan, las temáticas de máquinas tragamonedas que cuentan con mayor aceptación o las horas en las que se producen inicios de sesión más duraderos. Con este recurso al alcance, no resulta extraño que desde el ayuntamiento de Lugo hayan tomado buena nota de ello.
