Elegir una hipoteca es una decisión importante. Por ello, resulta imprescindible informarse adecuadamente para dar con aquella que se adapte mejor a nuestras necesidades y posibilidades. De igual forma, en los últimos años conseguir acceder a
una hipoteca se ha vuelto una tarea más complicada y existen requisitos más exigentes que son necesarios cumplir para que se concedan, lo que no quiere decir que sea imposible.
La institución finaciera ING ofrece servicios de bancas, seguros e inversiones, así como hipotecas a las que denominan hipotecas naranja, teniendo a tu disposición multitud de opciones entre las que puedes elegir. Además, podrás hacer la solicitud de la hipoteca de forma online y tendrás a un gestor personal que te acompañará en todo el proceso. Para el contrato de cualquiera de las hipotecas naranja dispones de un simulador para saber con rapidez y facilidad la cantidad que puedes solicitar y el tiempo en el que puedes devolverla.
Calcular la hipoteca naranja que decidas será una tarea sumamente sencilla. Así, descubrir el importe y el plazo será tan fácil como acceder al simulador con el que cuenta la propia web de ING. Dispones de 3 opciones distintas de hipotecas naranja que desglosaremos a continuación.
Tipos de hipotecas naranja
. Hipoteca naranja variable
Este tipo de hipoteca no conlleva comisiones y cuenta con una cuota competitiva que se renueva cada 6 meses. Dicha cuota permanecerá igual durante el primer año, pues el interés será igual. Tras ello, la cuota se actualizará cada 6 meses y dependerá del euríbor (se aplicará el euríbor más el diferencial que haya sido acordado al firmar).
. Hipoteca naranja fija
La principal característica de esta hipoteca es la tranquilidad que ofrece. No tendrás que preocuparte del euríbor pues pagarás siempre la misma cuota, independientemente de lo que pase, durante los 25 años de hipoteca y sin ningún tipo de comisión.
. Hipoteca naranja mixta
Esta hipoteca ofrece multitud de ventajas, combina la tranquilidad de la fija con la flexibilidad de la variable. Se caracteriza porque el precio se mantiene durante 10 años. Dispones de un gestor personal durante todo el proceso y no conlleva comisiones. No tendrás que preocuparte si los intereses suben o bajan, pues durante un largo período de tiempo como son 10 años, tu cuota se mantendrá igual. Después, tras ese tiempo se renovará cada 6 meses atendiendo al euríbor (se aplica el euríbor más el diferencial que se haya acordado durante la firma).
ING proporciona distintos tipos de hipotecas entre las que elegir aquella que sea más favorable para cada persona. El proceso es sencillo y dispones en todo momento de servicio de antención al cliente con un gestor que te guiará en el proceso. Además, no necesitarás ni desplazarte, pues cuentas con la posibilidad de llevar el proceso de forma 100% online. En tan solo 4 pasos podrás solicitar tu hipoteca: calcula tu cuota a través del simulador, luego solicita tu hipoteca, respondiendo al formulario y conociendo si es en principio viable o no tu hipoteca, después envía la documentación correspondiente y por último se llevará a cabo la tasación y firma.
