Oscar Wilde escribió el famoso relato "La importancia de llamarse Ernesto". Estamos a la espera de que algún escritor actual, de renombre, nos sorprenda con otro relato sobre "La importancia de llamarse Pedro".
El nombre de Pedro se deriva del latín "Petrus", que significa piedra, y el Pedro más famoso, discípulo predilecto de Jesús, fue bautizado por el Mesías con el proverbio "Tu eres Pedro, y sobre esta piedra elevaré mi Iglesia" Esta herencia divina confiere a los Pedros y Petrus las propiedades naturales de la piedra: dureza, resistencia, solidez y firmeza, al margen de las condiciones de su entorno.
Pedros famosos en nuestra procelosa historia acreditan dichas cualidades: Pedro 1º El Cruel, implacable con todos sus adversarios políticos, Pedro III El Grande, hijo de Jaime I el Conquistador. Modernamente, en el mundo del arte, la cultura y la política otros Pedros famosos acreditan la importancia de llamarse Pedro: Pedro Vargas, Pedro Almodovar, Pedro Madruga, Pedro Salinas, Pedro Duque, y como no Pedro Sánchez, ínclito Presidente del Gobierno de la España ecologista y plurinacional. También podríamos bautizarlo como Pedro el "bisiesto", por haber venido al mundo un 29 de febrero, por lo cual celebra sus cumples cada cuatro años, por tanto el día de su "embestidura" como Presidente, cumplió nada menos que once añitos.
Tal condición explica sus poses, modos y maneras de adolescente mal criado: "he sacado muy buenas notas en las elecciones, soy el más guapo del cole, yo elijo a mis amigos en contra de lo que diga mami (doña Susana) y quiero el caramelo del poder para mi sólo. ¡ En todos caso a un adolescente no se le puede pedir más.
"Con dinero o sin dinero hago siempre lo que quiero y mi palabra es la Ley", entona Pedro, plagiando la canción El Rey, de Vicente Fernández. Pedro interpreta el arte de la política como "un comediante de ideas cortas y ambiciones largas y practica el arte de la mentira con tal habilidad, que miente hasta cuando dice la verdad". El Sr. Sanchez, en su calidad de Presidente practica una pirotecnia verbal, que se manifiesta en periódicas homilías discursivas en las que se contradice a si mismo con la mayor infalibilidad. Ha perdido la credibilidad y no se le cree ni cuando dice la verdad. Es un consumado actor polisémico y polifacético, lo mismo interpreta un sainete de Arniches que un esperpento de Valle Inclán.
Endiosado y de sí mismo enamorado / maneja el NO con singular destreza / por medio del gesto, el verbo y la cabeza / la rosa mustia y el puño bien cerrado.
Paralelamente, si acudimos a la psicología, apreciamos su profunda megalomanía, asociada al llamado síndrome de Hibris, que produce una borrachera de éxito, arrogancia y prepotencia y un ego desmedido e incontrolado en el ejercicio y conservación del Poder. "Pocos ven lo que somos, pero todos ven lo que aparentamos", decía Maquiavelo. Pero en su afán de superación, después de haber sido expulsado por su partido resucitó de entre los muertos y ha sido elegido por la Providencia para salvar a España "dando a luz" un Gobierno progresista, europeista, feminista, ecologista y multidisciplinar compuesto por 22 miembros y miembras. Se dice que una de las principales cualidades del lider es rodearse de personas y colaboradores mas preparados que él. Sanchez lo tenía relativamente fácil, pero ni siquiera eso ha conseguido. Preside el Gobierno mas progresista de la historia, una efebocracia democrática, al margen de una meritocracia práctica.
Conservar el poder tras haberlo conseguido / es su principal y único objetivo / más dicho logro tiene un coste muy elevado / el cómplice chantaje de sus socios y aliados. Han cogido el país al borde del abismo, pero afortunadamente hemos dado un paso al frente.
Nuestro singular y legítimo Presidente del Gobierno es además un viajero infatigable, un hombre de "altos vuelos". Desde su acceso a la Presidencia, en junio del 2018 hasta el momento actual ha viajado por todos los continentes, contabilizando unos cien desplazamientos, cuyos objetivos políticos e institucionales permanecen en muchos casos en la sombra o el desconocimiento.
En todos caso según algunos sondeos, ajenos al CIS Tezanoico, Pedro Sanchez inspira poca o ninguna confianza a un 70.2% de los ciudadanos españoles.
Quiero reseñar que en este breve e irreverente currículo sanchista no existe el ánimo de injuriar o insultar a D. Pedro Sánchez, como persona y ciudadano, sino haciendo uso de mi libertad expresión exponer mi opinión sobre su actuación como Presidente del Gobierno de todos los españoles, circunstancia que lo somete a crítica y censura sobre el ejercicio de tan alta magistratura.
