Aforismos XLII de Juan de Portoplano

Aquel día el de Portoplano hizo el siguiente experimento cogió un periódico, empezó a leerlo, cuándo terminó, volvió a hacerlo pero detrás hacia delante, cuándo llegó al principio, empezó de nuevo, pero esta vez, solo viendo los titulares, y al llegar al final, volvió de atrás hacia delante. Cuándo terminó, entendió y comprendió, que había captado la información de otra manera.

- Demasiado filósofos y pensadores y escritores en los medios de comunicación hablan con demasiada seguridad y autoridad. Pero me parece, que el oficio del pensador es afirmar, pero también, dudar.

- Casi todos los hombres quieren imponer a otros sus ideas y sus proyectos de existencia, en vez, de simplemente mostrarlos, y ellos verán, si quieren o pueden o desean aceptar esas ideas o esos proyectos.

- Si alguna opinión personal a usted le molesta es fácil resolverlo. Usted, con respeto, exprese sus argumentos y datos para que yo reflexione o analice. Si yo, no cambio de parecer, y usted cree que lleva razón y tiene la verdad, también es fácil, usted siga su camino y yo, yo el mío. Dentro de unos años podremos volver a dialogar...

- No entiendo, porqué siendo usted ateo o agnóstico no lee la Biblia, igual, que lee la mitología griega. Aprendería usted mucho de si mismo, si leyese y pensase y meditase y reflexionase sobre la Biblia, porque puede que no sea un libro inspirado por Dios, pero al menos, es literatura, al menos acepte dicho libro o libros como literatura y protofilosofía... Déle el mismo valor, al menos que los escritos de Platón o de Aristóteles...

- Si no te detienes a pensar, sino que la primera solución que se te ocurre la llevas a término, te equivocarás muchas y muchas veces. Algunos errores serán graves, errores que te llevarán a otros errores, si sigues no pensando las diferentes opciones y pensarlas tranquila y sosegadamente...

- Estimo que con un mayor grado de moralidad en mayor grado de verdad, los individuos y los colectivos y los pueblos cometerían y cometeríamos menos errores, y por tanto, seríamos más felices, tendríamos que soportar menos sufrimientos, que nos echamos a nosotros mismos, o a los demás, a veces, los demás son los cercanos...

- Procura, que no se diga de ti, ya ha fallecido, pero sigo soportando el dolor y el sufrimiento y la pena que me infringió esa persona. Un sufrimiento sin sentido y sin razón, por odio o inquina o rencor o envidia o por sus traumas personales. Sin olvidar, que no es lo mismo, el que ataca para robar, que el que se defiende de no ser robado. Porque demasiadas veces, la persona de buena voluntad, sin ser perfecta, que solo se ha defendido de un mal, es la tenida por mala, y la que ha provocado el mal, como buena.

- Por mucho que quieras a tal persona equis, puede que esa persona no se haya comportado bien con la persona zeta. Y, aunque no estimes a la persona zeta, en ese asunto, tiene razón dicha persona y no la equis...

- Siempre he creído que a mayor verdad-realidad, bondad-realidad, belleza-realidad, todo funciona mejor, y se evitan muchos sufrimientos y penas y angustias...

- Me hubiese gustado ser un gran filósofo o pensador, un gran escritor pensador, o un gran artista plástico, pero solo he sido un pequeño escritor y filósofo y pensador y pintor. Tan pequeño que no sé, si una gran parte de lo producido se habrá ya perdido, y, no sé, si el resto lo hará en las próximas décadas. Decir, que he fracasado, es exacto. Pero qué le voy a hacer, si no tengo tanto talento o creatividad o ingenio o don de gentes o empatía o..., como los demás. Tengo que aceptar mi fracaso, y no caer en otros fracasos, por ejemplo, de conducta. Porque cuántos aprendices de artistas e intelectuales y escritores caen en malos hábitos morales, porque no aceptan su fracaso...

- En este virus, existe una duda en el ambiente, nadie sabe con seguridad, si ha sido un trasvase natural de un virus animal, murciélago indican, a un ser viviente humano. Segundo, si ha sido tomado un virus natural, y ha sido transformado en laboratorios, y, por errores de algún tipo, sin quererlo o sin voluntad, por accidente ha pasado a otro ser vivo y de éste al ser humano, o directamente al ser humano. Tercero, si ha sido dejado adrede y con voluntad, inoculado a algunos individuos directa o indirectamente, y ha pasado a toda la humanidad.

Estos son los tres escenarios básicos, que están en la mente y conciencia de casi todos los seres humanos. De momento, solo queremos sobrevivir, pero la duda está permanentemente, en casi todo el mundo, en la calle, expresándolo o no, pero siempre dándolo a entender con matices, silencios, palabras...

- Si usted tomase al Nazareno, los Cuatro Evangelios, como un libro de filosofía, quizás aprendería mucho sobre si mismo y sobre los demás. Tómelo a la misma altura, que los libros de sabiduría o sentencias o aforismos de la antigüedad grecorromana...