Año Nuevo: 'Nos hemos pasado de la raya. No hay tiempo'

Este nuevo año veo, como novedoso, dos temas sumamente importantes que, por primera vez, son comunes en todo el globo terráqueo: la pandemia, y el deshielo. Los dos presenta la misma importancia, pero con tiempos diferentes, la pandemia "YA", el deshielo "mañana".

Vamos a comenzar por el deshielo. De forma popular se oye, que la Tierra se está calentando, que el nivel del mar está subiendo, pero no indagamos más. El deshielo de los glaciares no es un accidente natural, es causado por "el hombre", que ignoraba que el cambio climático, es una consecuencia del ingente vertido de gases a la atmósfera, provenientes de la enorme industrialización del planeta, especialmente en el último siglo. Hemos oído varias veces que eso no es verdad, pero los negacionistas no presentan argumentos alternativos que expliquen el caso.

No importa que lo nieguen, los accidentes por alteraciones meteorológicas son cada vez más frecuentes y sumamente peligrosos, y los vemos todos, ocurran cerca o a miles de kilómetros, porque disponemos de comunicación global en pocos minutos. Qué consecuencias supone para el hombre el deshielo, pues además de la crecida del mar, la disminución del agua dulce, la invasión del agua salada, el desequilibrio de las lluvias (nada por unos territorios y excesivas en otros), cambio climático. Podemos añadir el aumento del calor en la Tierra, si bien explican los investigadores que está causado por la producción de CO2, la intensiva combustión de hulla y petróleo, el exceso de deforestación y la cría intensiva de animales como vacas, entre otros; estas causas están aceptadas por la mayoría de los gobiernos, que tratan de buscar energías alternativas, y aminorar las producciones malignas.

Nos podemos preguntar si realmente ese deshielo supone incremento de los riesgos a corto plazo. Existen en España dos personajes muy importantes que llevan más de veinte años investigando los glaciares. La primera vez que nos los presentaron fue la cadena 2 de la televisión nacional el año 2013, con el título "Viviendo al filo con Adolfo Eraso y Karmenka (Carmen Domínguez)", ella una profesora de universidad que dedica un semestre del año a investigar. Juntos se dedicaron a instalar estaciones de medida en los glaciares de los hemisferios Norte y Sur, que miden cada hora la descarga glacial y se puede extrapolar cómo se van derritiendo los casquetes a medida que les afectan los cambios en el clima y la atmósfera. En los tres años que ha durado la primera fase de la investigación se han instalado cuatro estaciones, de las que dos están en casquetes glaciares del Hemisferio Norte (Ártico Noruego e Islandia) y dos en casquetes del Sur (Antártida Insular y Patagonia Chilena)”, dicen que lo hacen porque ven gran peligro en el rápido crecimiento.

Hace apenas dos o tres semanas, Sandra Sabatés, en El Intermedio, entrevistó a Carmen Domínguez, glacióloga, exploradora, matemática y cofundadora del proyecto Glackma que trata de estudiar el cambio climático a través de los glaciares. Ha sido galardonada en 2020 por la Asociación Diálogo de la Amistad hispano-francesa. Carmen Domínguez explica que "su trabajo consiste principalmente en estudiar el glaciar en el momento, para poder ir anotando la evolución.
En 13 años, el deshielo se ha duplicado y en TAN SOLO CUATRO SE HA VUELTO A DUPLICAR, Nos hemos pasado de la raya. Tenemos una inercia creada y aunque queramos frenar no va a ser de forma instantánea. Ya tenemos que actuar, no hay tiempo, tenemos que reducir el consumismo y que haya acuerdos de verdad y que se realicen".

La entrevista termina diciendo "Con la crisis sanitaria actuamos de inmediato porque se ven los efectos inmediatos, pero con la crisis climática no se actúa porque no es un problema de cuando tú estás gobernando, pero es un problema de largo plazo ya no tan largo". Hay que pensarlo, hay que tomarlo en serio, pero el cambio social y económico será muy grande, actualmente la economía se basa en la gran producción industrial, si no compramos se frena la producción, sobran fábricas, sobran trabajadores, no hay nóminas, no hay turismo ¿cómo se resuelve?. Quizá éste sea el gran cambio que predecían.

Sobre la pandemia, yo creo que estamos llegando al máximo de contagiados y pronto empezarán a descender, con las vacunas el mal va a disminuir hasta desaparecer.

Otro virus que ha desaparecido es el señor Trump, en toda la historia de los pueblos no ha existido un presidente de estado que mintiera descaradamente como él ( "No hay pandemia", cuando estaban muriendo por cientos sus ciudadanos), no se molestó en recubrir la mentira con la apariencia de verdad posible. Desde que los sofistas griegos inventaron aquello de que es "más importante parecer que ser" la mentira se multiplicó exponencialmente, pero también es verdad que ellos desarrollaron la retórica al máximo para encubrirla. Cuidado, que el poder atrae a los corderillos, y/o a los violentos, hagámonos críticos.