Aceptémoslo, a todas las culturas le gusta decir que son únicas. Y es cada cultura es única a su manera, pero sin dudas una de las más fascinantes es la cultura hispana. Entendiendo que hispana es la cultura de los hispanoamericanos.
Hay que decir que en más de treinta países de América hay influencia de la cultura que se esparció con la colonización. Hoy es una cultura variopinta, pues los países hispanoamericanos convergen otras culturas como la francesa, portuguesa y la africana, esto además de las culturas indígenas autóctonas y las costumbres que han emergido después de los procesos de independencia.
Sin embargo, algunos aspectos de la cultura sí que se pueden englobar pues se presentan en casi todos los territorios hispanos.
1. Conocimiento de hierbas medicinales
En la cultura chamánica azteca usaron cepas de cannabis
Indica con potentes efectos psicoactivos como la Critical para curar enfermedades. Los chamanes esperaban el momento de floración para recoger los cogollos y las hojas y así curar con su humo o con aceites que obtenían al machacarla. En aquellos tiempos habrían sido muy felices de haber contado con semillas feminizadas y de rápida que favorecen el cultivo y la producción.
Otras plantas que eran usadas por los chamanes incluyen los cactus de mescalina (o mezcalina), la llamada Hoja del Diablo, balché, peyote y las semillas de ololiuhqui.
Pero la ciencia ha hecho cambiar a las costumbres; sin embargo, los hispanos siguen teniendo una fuerte predisposición sobre los
remedios naturales, algo que no observa en muchas culturas.
Remedios herbales como el té de malojillo, el té con limón, el jengibre para la garganta y lo mareos y la sábila son más comunes en los países hispanos que en el resto del mundo.
Aunque técnicamente, este es un rasgo prehispánico, pero es una costumbre que no se perdió durante la colonización y que incluso hoy sigue teniendo popularidad.
2. Fuerte filiación familiar
Es difícil poder decir cómo o porqué nace esta característica, pero sí que es algo muy de los hispanos. La familia hispana va más allá de los padres y hermanos; suele extenderse hacia los tíos, primos, abuelos y otros grados de filiación.
Los núcleos familiares de las familias hispanas quedan perfectamente retratados en el cine latino y también en Hollywood, pues se muestran familias numerosas celebrando todos juntos y compartiendo rituales que los mantienen muy unidos.
Un perfecto ejemplo de esto se puede apreciar en la película Coco, una de las últimas obras maestras de Disney.
3. Platillos mixtos ridículamente exquisitos
Desde el asado argentino al sur del continente hasta los chilaquiles mexicanos; la comida latina está llena de sabores, texturas, olores e ingredientes diferentes en cada país o región.
De hecho, es tan variada que tiene incluso
su propio diccionario para lograr homologar los diferentes nombres que se le dan a diferentes elementos de la cocina.
Algunos de los elementos casi universales en la comida hispana son
Maíz (muchas veces preparado en forma de tamales o tortillas)
Aguacate o palta como acompañante de prácticamente lo que sea
Picante agregado de manera natural como sabor a las comidas
Platos mixtos donde hay hasta siete contornos diferentes
4. Son muy patriotas, algunos hasta chovinistas
Los hispanos suelen estar más que orgullosos de sus raíces. Curiosamente, es común que sean descuidados en cuanto a fechas importantes como la independencia, pero basta con conocer la casa de un hispanoamericano que migró para entender que lo que sienten por su país es verdadero amor.
Venezolanos, colombianos, argentinos, mexicanos, salvadoreños; en fin, casi todos sino todos los hispanos exhiben el amor por de una manera muy peculiar.
Incluso algunos rayan en chovinismo, clamando que la cultura de su país es la mejor y dando a entender que menosprecian otras culturas, algo que no cae muy bien cuando lo dicen estando fuera de su país.
