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Pandemia, Alcoa y Madrid

miércoles, 10 de junio de 2020
Cuando se junta el virus con los problemas laborales y lo aderezamos con una fuerte dosis de demagogia, nos podemos encontrar con un cúmulo de estupideces que poco tiene que envidiar a Donald Trump. Es lo que tiene mezclar churras con merinas, es decir, echar la culpa a los madrileños de la propagación del virus y, con ello a Madrid, y decir que si la empresa del aluminio estuviese en la Capital todo estaría resuelto. Está visto, una vez más, que los radicales de uno y otro lado, sólo aportan crispación, desasosiego y falsedades.

Nadie está libre de estar representado por los políticos que no vota. Si los gobernantes de la Comunidad de Madrid privatizaron la sanidad madrileña, poco tienen que envidiar el gran Director de la Comunidad de Galicia, a quien tan bien se le dan los conciertos. La música de las pelas suena a negocio.

Si las autoridades nacionales gestionaron mal la pandemia, había que saber que, las carencias de todo tipo que había y hay en los hospitales, obedecen a la general escasez de recursos de que adolecen, y que la causa no es otra que haber derivados los recursos a negocios privados, de los que aparentan ser buenos amigos de los mandamases. Aquí que cada cual aguante su vela. Fácil es arruinar una economía y después culpar al siguiente. Lo saben bien los ayuntamientos de Madrid y Viveiro, por sólo poner dos ejemplos.

El virus está ahí y no se fue. Irresponsables los hay en todos los sitios, independientemente de lugar de nacimiento, color, olor y sabor. Estigmatizar a los madrileños con la propagación, sólo obedece a la inopia, a mezclar racismo con ignorancia y el reparto de carné de galleguidad, hábito de algunos ultras. Los irresponsable son... y pónganle ustedes los adjetivos que quieran, que muchos despectivos merecen aquellas personas tan sumamente egoístas, que anteponen su disfrute personal, a la salud de sus semejantes, independientemente de donde vivan.

En cuanto a ALCOA que tanto nos preocupa, y cada cual le da la importancia que quieran a uno, alguien debiera decirles a quienes van a la Mariña en busca de votos, que hay que ser sincero, que no vale echarle la culpa al precio de la luz, que por cierto para el resto de los ciudadanos es muchísimo más cara; que el problema de fondo es el imperialismo chino y que ALCOA, como otras empresas, está, desgraciadamente, abocada al cierre... o seguir viviendo de las subvenciones, llámese energía, llámese como se quiera. Así de triste, y a mí me duele decirlo, pero real.

Y en este apartado conviene recordar la Historia y saber que INESPAL, empresa pequeña de la SEPI, cargada de deudas, en un mundo de tiburones como son los mercados y las multinacionales, fue devorada por ALCOA a precio de ganga. Hoy ALCOA no aguanta el empuje chino. Por cierto, un empuje que requiere de gobiernos fuertes, cohesionados y con leyes severas, que evite los fraudes a Hacienda y a la competencia empresarial, totalmente desleal, con España y Europa. Los chinos no sólo nos inundan los mercados, sino que nos roban. Y hay que dejarse de mandangas y decirlo clarito para que se actúe.

Y fiar el problema de ALCOA a pequeñas empresas nacionales, no creo que sea la solución. Me gustaría mucho equivocarme.

En cuanto a declaraciones de que si eso ocurriera en Madrid ya estaría solucionado, es un ejemplo más de la calidad de los políticos que nos representan. Muchos se ríen cuando digo que nuestros políticos son como los pollos, de cuarto y mitad. Pues lo reitero, y si llega al cuarto. La Nissan se va de Barcelona y nada tiene que ver con otros de la misma camada como Quim Torra o Puigdemont. Se van por estrategia comercial. En Madrid también cierran empresas, porque deberíamos saber, a estas alturas de la película, que las empresas no se montan para dar trabajo a la gente, sino para ganar dinero.

Mientras tanto, aprieta China. Por su parte, EE.UU. entra en declive y Europa duerme en las sábanas de la subvenciones y sueña con los viejos imperios históricos. Por su parte, los chinos capitalistas, disfrazados de comunistas, invaden todos los mercados con sus productos y hunden las economías de países como España, ALCOA incluida. Esa es la realidad.

En cuanto al reiterado desprecio a Madrid, a muchos pequeños cretinos les habría que decir que para muchos como yo fue destino de emigración. Como triste sería ahora que lo fuera para cualquier trabajador de ALCOA. Madrid no es culpable de la imbecilidad de algunos, ni ineptitud de nuestros representantes. Muchos somos los que vivimos de primera mano lo que significa encontrarte sin trabajo en nuestra Tierra, que también es de los que viven dentro y de los estamos fuera. Y ahora parece que, una vez más, la Tierra a la que tanto queremos, expulsa a sus hijos. No, no es Galicia, ni Madrid, sino aquellos que habiendo sido elegidos para solucionar estos problemas, se dedican a otros menesteres más lucrativos y se muestran incapaces de solucionar un problema tan atávico como la emigración. Los gallegos nonacimos para emigrar, nos expulsan aquellos que no saben dirigir nuestra Tierra. Se lo decía a Fernández Albor por los tiempos de sus meriendas. Y se lo repito ahora a esta "ilustre" Tropa.

En cuanto a Madrid, convendría poner los puntos sobre las íes a los radicales salva-patrias. Madrid no es el gobierno ni las instituciones aquí radicadas. Madrid, es, además del tópico rompeolas de la Españas, una ciudad enorme plagada por una inmensa mayoría de gente trabajadora, que se levanta a las seis de la mañana. Y que curra todo el día, de sol a sol, y si acaso a sombra, para conseguir un sueldo cada vez más pequeño. Gente que vive en barrios humildes donde hasta el pan es de baja calidad. No, queridos vecinos, nunca ataron aquí a perros con longanizas ni otros cuentos que tanto les sirven a otros para fabular. Aquí lo que se atan son los machitos para currar, buscarse la vida de las formas más variopintas... Hoy hay muchísimas más dificultades que cuando llegué yo (1975). El alquiler es muy caro, los sueldos de más de mil euros ya no son desdeñables, hay muchos trabajos que ahora ocupan emigrantes extranjeros, que también necesitan comer... Cierto es que en la televisión lo ponen muy bonito, pero eso es igual que en "Españoles por el mundo", los pobres y sus miseria no salen. Cierto es que hay también hay señoritos, esos que no dan palo al agua, que van a manifestaciones con banderas, los que ocupan las terrazas y llenan los restaurantes de alta categoría. En Madrid, igual que en cualquier sitio, también hay sus golfos, sus mafiosos, sus ladrones... Pero también hay honrados, amigos, serviciales, cariñosos, alegres, respetuosos, educados de cualquier sitio. Que haya chusma es, aunque indeseable, inevitable en todos los lados.

Así que, amigo lector, si eres afectado y tienes la fortuna de quedarse, enhorabuena. Y quien, por desgracia, coja el camino de la emigración, que la vida le sea leve y ánimo. Las lágrimas siempre riegan las ilusiones y nos hacen más fuertes.

Evidentemente, mis mejores deseos para las gentes de ALCOA.
Timiraos, Ricardo
Timiraos, Ricardo


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