El virólogo francés Luc Montagnier aseguró que la secuencia del SARS -Cov 2 fue claramente manipulada antes que el virus se propagara por el mundo, Hemos llegado a la conclusión de que este virus fue creado, dijo el científico francés, galardonado en 2008 con el Premio Nobel de Medicina por su participación en la investigación que condujo al descubrimiento del virus del VIH, durante una entrevista con el canal francés CNews.
Esto no es una teoría es la opinión experta de una eminencia en virología y la definición de que poderes que no conocemos están detrás de la pandemia; Ha habido una manipulación del virus: al menos una parte, no la totalidad. Hay un modelo, que es el virus clásico, que proviene principalmente de los murciélagos, pero al que se han agregado secuencias de VIH, dijo en la entrevista.
Ahora bien, donde nos lleva esto, a muchas elucubraciones, pero ciertamente hay una resonando fuerte, Bilderberg, sabemos que sus intereses son el poder global y cómo, con sus decisiones, cambian el devenir de miles de millones de personas en el mundo. En las reuniones secretas de Bilderberg se decide el destino del mundo. El objetivo del Club es acabar con nuestras libertades personales y manipularnos mediante un único gobierno mundial establecido en la ONU, misma que observamos va perdiendo su valor, los «bilderberges» actúan para mantener a la población atemorizada y, como consecuencia, controlada, para muchos analistas ellos han creado esta pandemia para infundir miedo, controlar la población y poner en valor sus ensueños de paraíso terrestre.
Por queéde esta Pandemia, notablemente este sentimiento también invade a cualquiera que busque reflexionar seriamente sobre el COVID-19, una de las mayores crisis humanitarias de la vida moderna, que está afectando cada ámbito de la vida humana y que está dejando pobreza, muerte y miedo.
Porque en el fondo, esta pandemia ha dejado en evidencia un asunto clave de la convivencia en sociedad: más que ante un tema sanitario estamos en presencia de un tema ético y moral, por una parte, y a mentes malignas por otra; además, vemos un escenario hecho para obligar a repensar el nuevo orden mundial después del COVID-19, lo que los guionistas de la crisis llaman una arquitectura que permita modernizar la ONU, que esté por sobre el Consejo de Seguridad y los cinco furiosos, y sobre los organismos económicos internacionales.
Entonces la pregunta razonable es ¿Existe un grupo secreto, un grupo exclusivo, un grupo selecto, un grupo de personas capaces de poner y quitar gobernantes, capaz de imponer una agenda económica a nivel mundial y capaz de dirigir las riendas del planeta sin la necesidad de pasar por el corsé de la democracia?
Transcurría el año de 1999 y se estrenaba la película del director norteamericano Stanley Kubrick Eyes Wide Shut (Ojos bien cerrados) en esta vemos el poder en su dimensión quizás más esotérica y pagana; observamos como al amparo de la construcción de la maquinación se crean organizaciones secretas con mecanismos de propaganda y desinformación, que claramente logran obnubilar a la opinión pública, distorsionando su entendimiento; cualquier semejanza con la realidad es mera coincidencia
El profesor Montagnier difunde teorías caprichosas, dijo al semanario francés LObs, es claro que los medios publican lo políticamente correcto y lo demás es considerado especulación, dado el fuerte control editorial de alguna prensa, naturalmente a los miembros de este grupo no los elige nadie. Está formado por un centenar de los más influyentes políticos, monarcas, banqueros y periodistas, cuál sería el vínculo con el COVID entonces, juzgue usted.
Hasta ahora la pandemia provocó fenómenos que ni las guerras mundiales generaron: las grandes potencias, acorraladas por un virus; cuarentenas globales; calles vacías y militarizadas en todos los países; fronteras nacionales infranqueables, derrumbes imparables de los mercados; el petróleo, a precio de regalo; una recesión
planetaria sin precedentes desde 1929 y esta vez mucho, mucho miedo.
(Antonio Yelpi Aguilar es Consultor y Docente)
