La sátira es el arma para defenderse contra los desafueros y los abusos de los poderosos o dicho con Darío Fo el genial artista italiano flagelo de tiranos "La sátira es el arma más
eficaz contra el poder, el poder no soporta el humor, ni siquiera los gobernantes que se llaman democratas, la risa libera al hombre de sus miedos".
Dario Fo que conquistó el Premio Nobel de Literatura en 1997 actuaba en un circo con su mujer y compañera Franca Rame. Era un espectaculo total en que las diatribas eran feroces y se salía de estos recitales en el Circo Teatro con renovados bríos para derribar de forma no violenta y pacífica las patrañas y rebatir las mentiras del poder. Años después otro cómico Giuseppe Grillo inflamaria a las multitudes y surgiría Il Movimiento 5 Stelle, los grillinos.
No pretendo compararme con estos dos grandes cómicos y escritores. Cito mucho a Italia porque he transcurrido 14 años en Roma y he adquirido el estilo desenvuelto y feroz de la sátira trasalpina, pero mi compromiso con la democracia y mi intolerancia ante los desafueros y atropellos es par a la de estos literatos.
La situación en el ruedo ibérico es intolerable. Se ha instalado la mentira entre nuestros gobernantes y ya es difícil distinguir cuando dicen la verdad o cuando profieren embuste tras embuste.
Un político se presenta a unas elecciones con un programa y no deja pasar ni siquiera 24 horas para cambiarlo de cabo a rabo.
Este mismo poltico,a quien ya dediqué un libro en La Editorial Nueva Estrella se burla de las leyes y de la Constitución y lo hace con las malas artes y prosopopeya que merece por su egolatría el título de Divino Pedro y que ahora después de un posado histórico en el Congreso se convierte en Pedro I, el Divino de Pozuelo.
Su falta de ética y sus burdas maniobras que contrastan con su aspecto atildado y pacato salen a relucir en una serie de sabrosos relatos en que aparecen sus acólitos Sancho Abalos, Carmen Igualdad, la economista Mary Poppins de la vieja hornada y de la nueva otras marjorettes que danzan con desiguald fortuna al rededor de su Macho Alfa.
Estos episodios podrían ser inofensivos y las mentiras digeribles si no fuera porque Pedro I esta poniendo en peligro la mismísima democracia, envileciendo con constantes mentiras la vida política y marrullerias de parvulario que están enterrando la Transición española y sustituyendola por el Reino del arbitrio y conduciendonos de hecho a una dictadura.
Los últimos episodios típicos de Republica bananera de Sancho Abalos y la jerarca venezolana en el Aeropuerto de Barajas son de astrakanada. Bolivia y la excursión a la embajada de México de nuestros diplomáticos policías embozados son de opereta.
Su ambición que raya en lo grotesco, sus constantes vuelos en helicóptero y en su Falconcrest saca los colores a quien pretende ser el paladín de lo verde siendo como es el mayor contaminador del reino.
Hay otros artículos también mordaces que retratan y sacan punta a las costumbres actuales de feminismos desaforados de anticlericalismo de manual, de buenísmo ridículo que proporcionan mucha diversión a quien los lea.
Plurilandia y los dislates de la nación de naciones reciben su ración de varapalo como no podía faltar. Los grotescos nacionalistas con su épica de opereta y sus consignas dignas de Mussolini nos proporcionan diversión.
Pedro I de Pozuelo pretende y consigue enfrentar a mujeres con hombres, a las dos Españas con su aplauso a la República y su denigracion del franquismo que enfurece a tirios y troyanos, su ambición sin fronteras de convertirse en el primer Presidente de la Tercera República en 2030 podría ser un perfecto y risible personaje de farsa, pero amigos es un peligro para la Democracia y merece un "impeachment" a la española.
No se trata de la confrontación de la derecha con la izquierda,esto es una trampa más de este personaje de Trapisonda, sino de que entre todos comprendamos que es un político nefasto que se ha apoderado de un partido respetable y anulado la crítica, pretende terminar con la separación de poderes, suprimiendo el judicial y convirtiendo su voluntad en ley.
Su pirueta verde siembra la incertidumbre en la economía con su transición catastrófica, que sin apoyarse en el sentidiño gallego pone en peligro miles de puestos de trabajo.
Si se quiere acabar con la contaminación lo primero es eliminar la toxicidad de las mentiras de Pedro I de Pozuelo y con Ortega hay que decir Delenda es Pedrismo.
Sátira amigos y de la buena. Es la defensa que tenemos los ciudadanos contra la tiranía.
Joaquin Antuña - joaquinant@hotmail.com
