A sus 72 años Mario Draghi ha terminado su mandato al frente de la Banca Central Europea y viene considerado un hombre del futuro para Italia. Eugenio Scalfari el director del diario La República de Roma lo considera un candidato a ser un futuro Presidente del Consejo e igualmente principal candidato a suceder a Sergio Mattarella el actual Presidente de la República italiana en 2022.
Se habla mucho de la volatilidad de la política italiana, pero no se sopesa el equilibrio
que proporciona la incorporación de grandes personajes, con un brillante curriculum en el mundo de la economía como fueron los casos de Luigi Einaudi, Presidente de la Banca de Italia y de Carlo Azeglio Ciampi, que de gobernador de la Banca de Italia paso a ser primer ministro y posteriormente Presidente de la República hasta 2006.
Para Scalfari Mario Draghi tiene ante si un gran futuro. En Austria Waldheim pasó de ser Secretario general de Naciones Unidas a ser elegido Presidente de la Republica, aunque su pasado nazi enturbia un elevado mandato. En Corea del Sur Banki-moon no pudo llegar a la máxima magistratura por un asunto irregular económico anterior a su mandato en Naciones Unidas y el general Dwight Eisenhower fue elegido Presidente de los Estados Unidos por su papel tan relevante en la milicia. Evidentemente Charles De Gaulle es otro caso evidente.
Son casos en que personajes con grandes méritos en la vida civil aceptan ser elevados a cargos del máximo significado político. El historial de Mario Draghi es impresionante ya que fue entre otros cargos gobernador de la Banca de Italia del 2005 al 2011 y que viene reconocido como el máximo defensor del Euro hasta el punto de ser considerado como uno de los padres de Europa junto a personajes del calibre de Robert Schuman.
Este factor de equilibrio ha jugado un gran papel en Italia dando estabilidad al país y proporcionándole la incorporación de grandes talentos a la vida política, que ejercen un rol de primus ínter pares.
En la actual inanidad y mediocridad de los actuales líderes políticos españoles, que ninguno de ellos podría dirigir una gran multinacional o tener protagonismo internacional uno tiene envidia de que en España no tengamos ejemplos de este tipo y la clase política se convierta en un peso para complicar la vida a los ciudadanos y no para resolver sus problemas.
Mario Draghi si la salud le respeta podrá sin duda prestar grandes servicios a Europa esta vez desde Italia.
Joaquín Antuña - joaquinant@hotmail.com
