Los dos que han fracasado y no lo reconocen

Los ciudadanos ni somos tontos, ni nos hemos caído de un eucalipto. Para desgracia de quienes tienen almas de trileros, hay tanta información que resulta patético el engaño. Algo así como "quiero pero no puedo". Manipular es tentación que transcurre entre ciencia y arte. La primera se basa en hacer uso de instrumentos publicitarios, mediáticos y de la red, con el viejo fin de hacernos comulgar con ruedas de molino. La segunda se basa en viejas herramientas dialécticas que se mueven entre el sofisma y la demagogia.

PODEMOS. ¡Menudo batacazo en dos tiempos!. Han dilapidado la emoción que brotó del 15-M. Pero voy a señalar tres momentos estelares - ver las estrellas al darse de bruces con el suelo- Salir mostrando la Constitución Española como exigencia máxima por parte de un político que no cree en ella, es cuando menos una contradicción. Pero ignorar que el Texto de 1978 es un contenido de enunciados que se desarrollan con los Estatutos de Autonomía y las sentencias del T.C. es un acto de ignorancia supina.

Pasarse el tiempo entre elecciones: rogando, implorando, exigiendo, ser ministro del Gobierno, resulta cuando menos un estado de necesidad personal o una absoluta falta de dignidad al servicio de la ambición para tocar poder como sea.

La absoluta incapacidad para mantener a las personas que conformaron el núcleo intangible de un proyecto que caló en la sociedad harta de estar harta, ha sido un error gravísimo, que se acompañó con, poner fuera a los mejores y dentro a los peores.

PP. ¡De victoria en victoria, hasta la derrota final!. En España no sabemos de término medio. O la indiferencia nos engaña haciéndonos creer que las gentes no se han enterado de la corrupción y otras lindezas. O de repente todos los demonios salen e impregnan al tejido social que nos muestra su desprecio que gota a gota colmó el vaso.

Se llegaron a creer los chicos pelín pijos de sonrisa eterna que el pueblo español les había perdonado sus "hazañas" en Madrid, Valencia, Murcia, etc., con un Congreso en el que Casado tomó la tijera de podar. No hizo caso alguno de los temblores terráqueos en Cataluña y Andalucía, que hacía presagiar el Tsunami.

Pero siguen sin enterarse y desde la prepotencia vuelve a la ofensa. ¿Y si Cs decide no pactar con el PP y con Vox por razones de estrategia mirando al futuro?. ¿Cómo se puede dar por sentado que Cs se conformará con ser mindundi o manguta de los más votados con las siglas del PP, ellos que han estado insultando y señalando la maldad de los pactos entre perdedores?.

Para ambas fuerzas políticas, por mucho que lo escondan, el descalabro ha sido histórico. Han logrado poner en marcha un nuevo ciclo socialista. Amen.