IRRESPONSABILIDAD SUPREMA Y LUCHA ANTIMAFIOSA

En Italia, se acaba de homenajear (mayo 02) a los grandes jueces Falcone y Borsellino, asesinados hace diez años por la mafia siciliana. En estos actos, se dio cuenta de que una politica competente, judicial, policial, de informacion, economica, financiera, cultural, social, de lucha legal contundente contra el terrorismo mafioso, de recurso a los arrepentidos para poder entrar en las potentisimas familias, de movilizacion politica, judicial, policial, mediatica y ciudadana contra las mafias y los que los apoyan, era y sigue siendo esencial.

En Palermo, en los 80 se habian cometido 250 asesinatos vinculados con la mafia; en el 2000 tuvieron lugar 8 y ningun tenia que ver con esta. Sin embargo, a pesar de las duras medidas carcelarias de aislamiento, control de sus contactos con abogados y visitas, del cumplimiento integro de las penas, etc., se ha comprobado que los capos detenidos siguen en contacto con mafiosos del exterior. Y que estos, en una fase de maxima ocultacion, siguen controlando contratas publicas, subvenciones, subsidios, etc. Sicilia que exporto la mafia, el sur de Italia, es la region mas subvencionada del mundo, y sigue siendo una de las mas atrasadas.

En Italia, diferentes sectores estan denunciando que se quieren cambiar las leyes que permitieron la detencion y condena masiva de cientos de capos mafiosos. Se quiere cambiar, como sucedio en España con el GAL, la corrupcion, el narcotrafico, etc., las leyes que garantizan que los arrepentidos puedan colaborar adecuadamente en la detencion y control de los principales capos y sus redes. Y sin los cuales, la lucha es practicamente imposible. Lo cual se verifico/verifica en España, Italia, Estados Unidos, Rusia, etc., donde los infiltrados y arrepentidos fueron/son basicos para combatir a las organizaciones terroristas mafiosas.

Despues de los atentados terroristas masivos contra los Estados Unidos, se esta desarrollando una fuerte conciencia internacional de la necesidad de llevar a cabo una lucha legal, pero implacable de tolerancia cero, contra las diversas formas del crimen organizado terrorista. Una lucha legal, rigurosa y constante que requiere poner en marcha medidas internacionales, nacionales y locales de lucha en todos los frentes terroristas, criminales y mafiosos (internacionales, estatales, regionales, municipales, institucionales y de calle, militares, tecnicos, politicos, judiciales, funcionariales, policiales, sindicales, movimentistas, economicos, financieros, comerciales, infomediaticos, culturales, asociativos, juveniles, movimentistas, discursivo-representativos, simbolicos, iconicos, etc.), y contra sus multiples manifestaciones de alta, media y baja intensidad.

La democracia debe armarse muy en serio para hacer frente, legalmente pero con la maxima energia, al complejo mafioso-terrorista del crimen organizado en todas sus formas, a su alimento material y espiritual, infraestructural y superestructural; a los complejos y redes sociales de corrupcion, politiqueria, degradacion, actuacion, agitacion, compra, chantaje, intimidacion, etc., de los que se valen y generan. De lo contrario, la mafia terrorista, el crimen organizado en sus diversas formas (sin olvidar el narcotrafico, las narcoguerrillas, los narco-regimenes y grandes traficos ilegales), acabara minando a la sociedad e imponiendo la ley totalitaria y corrupta del miedo, compra, chantaje, violencia y terror, la ley de la mafia.

Por lo que se viene viendo en España (Italia, Francia, Argentina, Colombia, Mejico, Venezuela, Peru, Brasil y en otras partes), en determinados sectores de la judicatura, la Audiencia Nacional, el Tribunal Supremo, Constitucional, el campo politico, etc., no quieren enterarse de que la lucha contra el gran crimen organizado, terrorista y mafioso, contra la corrupcion, politiqueria y degradacion que generan y de la que se valen, exige tomar medidas politicas, judiciales, policiales, carcelarias, economicas, financieras, informativas, ciudadanas, etc..

Medidas nacionales e internacionales, contundentes, claras y continuadas, para impedirles a dichas organizaciones criminales que puedan actuar a sus anchas, burlarse de las leyes, de las medidas antimafiosas, antiterroristas, anticorrupcion, amparandose en todo tipo de alimentos materiales y espirituales, redes y complejos, infraestructuras y superestructuras; en la actuacion, manifiestamente irresponsable, de lideres maximos y minimos, de tribunales y asociaciones juridicas, de magistrados, jueces, fiscales, abogados, politicos, sindicalistas, empresarios, comerciantes, financieros, periodistas, colaboradores y grupos mediaticos varios, de profesionales, funcionarios, profesores, intelectuales, artistas, autores, deportistas, etc.. Y que, en algun caso, convertidos en hooligans politicos, judiciales, mediaticos, profesionales, sociales, callejeros, etc., colaboran con dichas organizaciones criminales de forma descarada, inadmisible desde el punto de vista de la defensa justa y energica de la democracia (ante amenazas gravisimas), y completamente escandalosa. Lo que provoca gran inquietud y alarma social.