El palo y la zanahoria que maneja con sabia habilidad el Divino Pedro se está decantando hacia el lado de la zanahoria. El último globo sonda se ha lanzado mientras el Divino vuela hacia Canadá y Estados Unidos. La velada promesa del indulto y la libertad de los políticos catalanes presos.
El viaje soñado de codearse con Justin Trudeau y con los líderes mundiales en Naciones Unidas es para el Divino tocar el cielo con la mano, pero cuán verdad es frunce el ceño, que no hay rosas sin espinas, que mi tesis me está causando muchos sinsabores.
Comprende las dificultades de su colega Donald con los medios de comunicación y las acusaciones sobre su falta de preparación y la falta de buen sentido, que roza una mente en mal estado. Menos mal que en Plurilandia no han propuesto crear una comisión sobre su salud mental. Ya llegará piensa el Divino cuando el avión se mueve mucho al atravesar una turbulencia.
Pelillos a la mar. A disfrutar de estos días de ensueño que le esperan. En vez de admirar mi habilidad e inteligencia hablan de falta de escrúpulos. Estúpidos.
Tiene que asegurarse como sea el apoyo de los partidos que le encumbraron. Ha ordenado a Carmen Igualdad sacar, hacer lucir una estupenda zanahoria para el Iluminado de Blanes y su jefe Carlitos el Tramposo. Libertad para los presos y luego para los fugitivos, perdón exiliados.
Otra zanahoria muy apetitosa para su ideólogo Pablo para sangrar a los ricos e imitar las tácticas bolivarianas. Ojalá se marcharán de Plurilandia, que anticuado es eso de España, unos millones de habitantes y se despejará el panorama. Claro es que habría que hundir la economía y anular a tanto abogadillo del estado, tan sabiondos y antipáticos con su Constitución y sus leyes. La Ley como dice Pablo es lo que quiere la gente y la mayoría social.
Tengo que hacerme fotos, muchas fotos, para que mi TV se las haga ver a mis súbditos. Hay que tapar las torpezas de mi maldita tesis, que me habían asegurado que era muy buena. Por cierto tengo que terminar de leérmela, haber si encuentro tiempo en la Asamblea General durante los plúmbeos discursos de mis colegas, que bien suena lo de colegas.
Cierra los ojos y se olvida de los imbéciles del ABC y del Mundo, se sume en un dulce sueño lleno de marchas triunfales y repleto de campos de zanahorias. El palo puede esperar. Llegará. Cada cosa a su tiempo. Mis majorettes están muy bien adiestradas por mi Carmen Igualdad. Mi chistera esta repleta de trucos. Que siga la magia y mi audacia se vea recompensada por la gloria.
Joaquín Antuña - joaquinant@hotmail.com
