La Delegación Territorial de la Xunta de Lugo, acogió la exposición 'El Camino a Viena', que recoge dibujos de escolares de 22 países, en torno a los ideales de Naciones Unidas. El Delegado Territorial, José Manuel Balseiro, inauguró la muestra junto al Presidente de la Fundación Paz y Cooperación Joaquín Antuña y al Director de Galicia Digital, Xulio Xiz. Esta es la escueta nota emitida por la Delegación Territorial de la Xunta. Tengo que añadir, mi agradecimiento a Galicia Digital, al polifacético Don Xulio y a su bella hija Teté por su excelente colaboración y, claro está, a la Xunta por el muy buen trabajo realizado en el despliegue que llenaron los amplios salones de la exposición en que se muestran dos preciosos cuadros de la pintora, Francisca Blázquez y trabajos, mejor sería decir, Obras de Arte de estudiantes de Argentina, Mexico, Azerbaiyan, Irán, Hong Kong, entre otros y naturalmente de España, precisamente de un colegio de Bayona en Galicia.
A los amables lectores que deseen visitar esta exposición, tengo que comentarles que se trata de escuelas de bellas artes, por lo que la calidad de las obras es muy elevada. Esta exposición del Camino a Viena ha estado en Alicante, Majadahonda, Madrid en dos ocasiones y Zaragoza. Los participantes se han imbuido en los ideales de Naciones Unidas, por un lado, exaltando a Don Quijote como forjador de utopías y por otro mirando a las estrellas donde se vislumbra el futuro del mundo.
Paz y Cooperación lleva más de tres décadas convocando certámenes sobre temas mundiales aprobados por la Asamblea General de Naciones Unidas. Os invito a visitar la exposición, tened cuidado no os rompaís la crisma en las endiabladas escaleras de este edificio por el que podrían despeñarse a los opositores chicos de las mareas: tened cuidado.
Una acotación aparte, es la impresión que me causó, después de participar en la multitudinaria fiesta del orgullo en Madrid. Causa impresión, al día siguiente ver esta joya de ciudad que es Lugo, llena de romanos y castreños, sobre todo las damas a las que les iban estupendamente estas elegantes túnicas.
Hay que ver lo que nos gusta a los españoles disfrazarnos. Es cierto que en el orgullo se reivindicaba el respeto a la diversidad con el bonito lema Ama a quien te Ama y que Cristina Cifuentes, en versión wonder woman, quiso robar el show a la emocionadísima alcaldesa Carmena que citó versos de García Lorca sobre el Amor Oscuro, y que, en cambio en Lugo se festeja la romanización de la ciudad, pero sin que su alcaldesa aparezca en plan de Venus Capitolina.
Don Xulio, me explica que en el año 2001 el Ayuntamiento decidió organizar un festival de verano ya que el patrón de la ciudad San Froilán, cae en otoño y se tuvo, esta es mi opinión, la excelente idea de organizar un espectáculo digno del dignísimo Donald Trump que estaría estupendo de senador diciendo disparates o de gladiador luchando contra el Progreso.
En esta fiesta, se involucran todos, hasta Pablo, el hijo mayor de Teté que forma parte de una Cohorte, desfila durante tres días con un ensordecedor redoble de tambores.
Sentado en un café de la Plaza de España, todo aquél alegre gentío evocaban en mí los versos en la plaza de Vicente Aleixandre que recitaba, que escribía era una gran plaza abierta, y había olor de existencia. Un olor a gran sol descubierto, a viento rizándolo, un gran viento que sobre las cabezas pasaba su mano, su gran mano que rozaba las frentes unidas y las reconfortaba... allí, cada uno puede mirarse, puede alegrarse y puede reconocerse y más adelante entra en el hervor, en la plaza. Entra en el torrente que te reclama y allí, sé tu mismo. O pequeño corazón diminuto, corazón que quiere latir para ser, él también, el unánime corazón que le alcanza.
Los mediterráneos somos pueblos enamorados de la calle, de la plaza, del ágora y, tanto en Madrid como en Lugo, en estas jornadas de julio se han vivido momentos de gran regocijo. De ese corazón diminuto, que quiere latir del que nos habla el poeta Aleixandre. La poesía cambia los colores de la vida, los negros y grises se convierten en amarillos, rojos y verdes.
Las personas chabacanas, que abundan mucho, en nada menos que en hadas y ángeles, aunque siempre el diablo maneje su infatigable rabo y ponga sal y pimienta a estos grandes carnavales que tanto nos gustan.
Volviendo a la exposición no dejéis de visitarla y llevad a nuestros pequeños y mayores a disfrutar de tanta creatividad, decía Einstein que el conocimiento tiene límite pero la imaginación no. Sed imaginativos.
