
Estas intrépidas jóvenes que protagonizan nuestra política son una gran novedad. Preparadas, de palabra fácil y apasionadas. Tres ejemplos, Soraya la super abogada del Estado, que en su pequeño cuerpo encierra todo el saber de la maquinaria del Estado y sale al ruedo parlamentario con mucho garbo y fuerza. Inés la jerezana recriada en Barcelona, que habla catalán con su apuesto marido indepentista, que en un mitin de Albert Rivera cayó del caballo de la indiferencia y se convirtió en ferviente Ciudadana siempre con la bandera española y cada vez más estrella de las televisiones. Irene la aspirante a Evita española con su desmelenado Pablo el peronista de Vallecas, con su agresividad y su retórica incendiaria, ultimamente ha descubierto el rimmel de ojos y el pintalabios, confiemos en que no se debilite su ataque a la temible y desvergonzada trama a la que azota su Pablo, como le hubiera gustado hacer con la exmujer de Carlos Herrera. Tres jóvenes de la generación Coca Cola, las tres de armas tomar y descubrimiento de esta hora interesante en que la democracia española se enfrenta al pluralismo en singular duelo de capa y espada contra el populismo, que en España reviste ribetes anarquistas y justicialistas. Tres oradoras de campeonato, la precisa Soraya, la remilgada Inés y la desmadrada Irene/Evita. Cola Cao a todo trapo con sus galanes de la generación Ikea. Una mezcla muy en boga de desayuno y muebles resueltos para estas parejas en que ellas son incendiarias y ellos me imagino resignados, excepto el peronista de Vallecas, que es infatigable en su indignación antes contra la casta y ahora contra la trama. En un panorama de vidas obligadamente monótonas y abnegadas, como me dijo una edecana mexicana, estas mujeres intrépidas son el condimento que alegra la vida política y da alas a tantas muchachas que las toman como ejemplo y las espolean a descubrir un futuro incierto en lo laboral y toda una jungla en lo afectivo. Isabel la Católica, Agustina de Aragón y Clara Campoamor estarían orgullosas de ellas. Leña al mono chicas.