Jugar y apostar son dos palabras que dan vida a una de las tradiciones más populares en el territorio español desde hace años: la
Quiniela. Juego asociado al deporte que, desde hace muchísimo tiempo ha logrado atraer a una ingente cantidad de adeptos. Una costumbre propia de aquellos que aman el fútbol, a través del que pretenden obtener algún beneficio, basándose no sólo en sus sentimientos y emociones sino, especialmente, en sus sensaciones de cara a los distintos partidos que se suceden jornada tras jornada. Algo que, aunque muchos no lo crean, va más allá del azar. En este sentido, la realización de la misma requiere de cierta habilidad. Por ello, para conseguir unos resultados positivos es recomendable cumplir una serie de requisitos.
Un total de 37 jornadas para poder apostar, y no todas ellas son sinónimos de alegrías. No obstante, las penas no quitan para nada esa ilusión de seguir intentándolo y, en algún momento, encontrar la oportunidad y la consiguiente recompensa de hacer pleno. Por ello, y con el objetivo de favorecer el panorama de aquellos que juegan cada jornada, algunos expertos ofrecen ciertos trucos a la hora de realizar las apuestas.
En primera instancia, es aconsejable, antes de hacer la Quiniela, dejar a un lado los sentimientos y las emociones, ya que ambos influyan de manera significativa en tus pronósticos en el momento de echarla. Por consiguiente, nada de valorar positivamente al equipo de tus amores ni de apostar en contra de aquellos a los que tengas cierta inquina. La objetividad, en este punto, juega un papel fundamental, ya que cada partido debe ser analizado en función de lo que ofrezca, siempre desde una posición neutral.
Otro de los consejos a tener en cuenta se centra en estudiar cada encuentro, valorando qué resultado ha cosechado cada equipo en sus choques anteriores. Es decir, aquellos ganados como local, aquellos ganados como visitante, las bajas en cada convocatoria, las lesiones, así como el estado de forma de los jugadores de ambos conjuntos, e incluso los resultados que se hayan dado entre esos mismos equipos en temporadas anteriores. En definitiva, una recopilación de todas aquellas estadísticas que puedan ayudar a escoger la mejor opción. En esta línea, también merece la pena revisar las estadísticas generales de los equipos y los resultados que sean calificados como históricos.
Al mismo tiempo, siempre es aconsejable apostar a favor de aquellos equipos que gocen de una situación privilegiada en la tabla clasificatoria. Los conjuntos que popularmente se conocen como los rompe-quinielas, aunque, finalmente, los números de las estadísticas hablarán pos sí mismos. De igual forma, la ventaja del conjunto local es otro factor esencial para valorar de cara a una disputa reñida. Tampoco hay que olvidar que existen una serie de factores que pueden influir en el estado psicológico de todos los componentes de una cita futbolística (jugadores, entrenadores o árbitros). Algunos de estos son el ánimo del público a lo largo de la semana, la fatiga que pueda causar un viaje o el ambiente existente tanto dentro como fuera del estadio.
