La Corte de Faraón

Da sonrojo escuchar las declaraciones de Correa, el famoso Gurtel, con los trapicheos de estos logreros de la política, de esta nueva picaresca. La pregunta es como es posible que un señor tan serio como Aznar se rodeará de esta Corte de Faraón, que como en la revista se iban todos a Judea, si hay niños que no lo lean, estos golfos no sólo cantaban "vámonos a Judea", sino que practicaban a fruición como comprobamos por los desahogados gastos nocturnos de los chicos de las tarjetitas black. Que gente, que gentuza! Que desenvoltura al pedir mordidas y repartirse las coimas,que cara dura, es increíble como puede haber tanto ladrón en este país, como se utiliza el dinero para formación de parados en propio beneficio, como se especula a cara descubierta, roza lo inverosímil, como en las candidas paredes de Génova se realizaban operaciones inconfesables, se compraban y vendían contratos y canonjias. Somos así los españoles, no tenemos virtudes cívicas en materia de dinero, somos pillos redomados todos los españoles como los adlateres de socialistas y populares que no han tenido rebozo en enriquecerse sin tregua. Surge la crítica despiadada de los jansenitas e intransigentes Ciudadanos, los que quieren convertir a los españoles, en virtuosos daneses y para ello proponen estomagantes listas de muchísimos puntos, la síntesis no va con ellos, imagínense queridos lectores si Rivera hubiera sido Moisés,en vez de diez mandamientos hubiéramos tenido 400! No nos sirven, apuntan en la buena dirección, la regeneración, aunque para ello se precise un mayor milagro del de Fátima y que decir tiene la furia anticorrupcion de los podemitas, que practican el nepotismo de novias y parientes,ignorando que promover, enchufar a familiares y amigos también es corrupción, sea por derecho vergonzante de pernada o por mal entendido amor a la familia, que está prohibido en las organizaciones internacionales, otro tipo de pillos que proclaman el no a las puertas giratorias, mientras las abren gozosamente para deudos y amiguitos y claro está amiguitas, que se debe ser justo en cuestiones de género. Que hacer ante esta Corte de Faraón en que los golfos unidos jamás serán vencido. Tenemos remedio o nuestros genes nos conducen sin remedio al cohecho y al soborno. Necesitaremos el farol de Diogenes para encontrar a los justos, despues de ver en la tele en estos día a los personajes que se arrastran indecorosamente embadurnados hasta la coronilla de deshechos económicos nos vienen las dudas, menos mal que el Divino Pedro se ha ido a Disneylandia a encontrar soluciones, este Mandela de Pozuelo tal vez venga con un zurrón de buenos consejos para aconsejar al Padrastro nacional, el hombre impasible de Pontevedra. Visto lo visto Alberto y Susana sonreiran ante el espectáculo increíble de la Corte de Faraón y se verán en la piel de los futuros líderes que dirimaran las justas electorales del futuro próximo.Las Cortes de Faraón de Andalucía y Madrid no pueden repetirse. Aquí puede aplicarse el Nunca Mais galaico.