Donde las dan las toman

Desde Corea en una pausa de la Conferencia a la que estoy asistiendo me entero del bombazo judicial de la petición fiscal para Griñan y Chaves que deja al descubierto el régimen clientelar de Andalucía y que pone en un brete a toda la clase política del bipartidismo,los otros dos todavía no han tenido de tiempo de someterse a la prueba de fuego, por no hablar de los antiguos convergentes sumidos hasta el cuello por la corrupcion del tres por ciento. Rita Barbera respirara un poco con sus mil eurazos sospechosos y con su madrinazgo de este puerto de arrebatacapas que se ha demostrado la fértil tierra valenciana, donde naranjos y aprovechados flo‎recen por doquier. He revisado en mis vuelos de Madrid a Helsinki y a Seúl, muchos periódicos franceses, ingleses y alemanes y no he visto ningún comentario sobre la ciénaga hispana. Creo que en general se desconfía de los simpáticos bribones del Sur de Europa. Si Rivera se asoma a la prensa francesa se llevará una alegría por la persecución a los evasores fiscales que se clasifican entre activos y pasivos,los que lo hicieron y los que lo heredaron, con elevadas multas que oscilan del 35 al 15 en uno y en otro caso y una sentencia firme que planea sobre un ministro de tres años.Como se ve las aguas bajan turbias también en nuestros vecinos. En toda tierra de vecinos cuecen habas, lo cual no es una excusa, pero exige una fiscalización rigurosa, distinguiendo entre el dolo y la negligencia, dejando entre Pinto y Valdemoro a las chapuzas y malas practicas tan habituales en nuestro horizonte político. Es una puerta estrecha por la que habrán pasar nuestros políticos, no va a ser un camino de rosas, hay muchas espinas con grandes pinchos. Ahora vivimos la hora de la caza de brujas. Se serenaran las aguas, mejorara la moral publica, no por civismo, sino por temor a la condena social y a la penal. De momento estamos en el y tu más que desmoraliza a los pequeños defraudadores de la vida cotidiana, que tiran la piedra y guardan la mano. Donde las dan las toman y callar es imposible en la jaula de grillos que son las campañas electorales.