Las cifras globales de ventas de vivienda en España aumentaron en 2015 por segundo año consecutivo según el Instituto Nacional de Estadística. Este incremento se dio en prácticamente todas las comunidades autónomas exceptuando Navarra.
En términos globales, la compraventa de viviendas aumentó un 11,1% este último año con respecto al anterior ejercicio, alcanzando 354.132 transacciones. Este repunte fue posible sobre todo por el alza de venta de casas de segunda mano donde en comunidades como Galicia, superó a las de obra nueva, algo que no se daba desde el año 2007. En la región gallega concretamente, los datos positivos en la venta de inmuebles usados, ha hecho posible que la recuperación del mercado de la vivienda sea un hecho. Gracias a la adquisición de este tipo de inmuebles, los datos de compraventa de viviendas han subido por primera vez desde 2010, modificando la caída que venía arrastrando desde los años de la burbuja inmobiliaria, pasando de 11.966 viviendas vendidas en 2014 a 12.431 en 2015, según los últimos datos arrojados por el Instituto Nacional de Estadística.
Para analizar estos datos hay que tener en cuenta, además, lo que el INE considera que son las viviendas de segunda mano: inmuebles que llevan más de dos años desocupados, independientemente de que hayan sido habitados previamente o no, es decir, que en este conjunto de casas podrían encontrarse stocks que han tenido salida gracias al aumento de concesión de hipotecas y al descenso de los precios.
Pero mientras Galicia aumenta sólo un 3,9%, por debajo de la media nacional, Cataluña es una de las comunidades donde más se incrementó la compraventa de viviendas en 2015 superando el 14%, con un total de 54.571 viviendas vendidas durante todo el año. En esta cantidad total, la obra nueva ronda un 16%, lo cual supone una bajada en términos relativos de 10 puntos con respecto al año anterior. En esta comunidad, las promotoras inmobiliarias están instando a las administraciones públicas a tomar parte en la recuperación de la oferta de nueva construcción. Si bien en 2015 se construyeron unas 6.000 viviendas en nuevos proyectos, se prevé que este año la cantidad alcance los 10.000 inmuebles. Estos datos, que apuntan a un aumento de la actividad en la construcción, son posibles gracias a la recuperación económicay la apertura de financiación por parte de las entidades bancarias, que hace posible un aumento de demanda para este tipo de propiedades.
En cualquier caso, el sector demanda apoyo a las administraciones públicas, ya que opina que los ayuntamientos son unos actores esenciales para poner en marcha el flujo económico derivaado del sector de la vivienda. La flexibilización de trámites y gestiones urbanísticas, tanto en la capital como en el resto de municipios de la comunidad, hará posible que los diferentes activos de suelo urbanizable puedan albergar proyectos inmobiliarios en el corto plazo. A este hecho, se le une la profesionalización del sector, que tras el periodo de recesión ha mantenido en pie a las empresas inmobiliarias más solventes y con pilares sólidos.
Un ejemplo de las promotoras que han seguido construyendo durante estos años a pesar de las vicisitudes es
corp-promotores.es. En su web se pueden ver algunos de los proyectos inmobiliarios que han llevado a cabo tanto en Barcelona como en otras poblaciones de Cataluña, algunas de ellas con el cartel de todo vendido, y otras en pleno proceso de comercialización en la actualidad.
