Peldaño a peldaño avanzamos hacia el cambio

Hoy se subirá, esperemos, un segundo peldaño en la situación política actual de España. El primero, como todos recordarán, fue acabar con el bipartidismo y la mayoría absoluta. Dos temas de capital importancia para reforzar la democracia y la responsabilidad social en nuestro estado.

Los resultados de las elecciones municipales han generado un abanico de partidos entre los que se encuentran los cuatro más importantes: los tradicionales PP y PSOE, que por detentar el poder tantos años están manchados hasta las cejas, y desvirtuaron su ideario de tal forma que, si comenzaron derecha- izquierda, hoy son : más derecha y menos izquierda; y Podemos (nueva izquierda) y Ciudadanos (nueva derecha), junto con coaliciones, uniones, mareas o frentes, la mayoría de izquierdas. Para constituir los ayuntamientos, el sábado 13, deben pactar, en buena lógica, por afinidad en los programas y objetivos a conseguir. Por los pactos que hagan se conocerá, si lo más importante es mantener el programa, eliminar al PP que se entiende como involución y rémora para el progreso del pais; o conseguir el poder a toda costa.

En el ambiente se observan, especialmente, tres sentimientos populares: 1) no sirvió para nada todo lo que hemos trabajado, 2) sólo les importa el poder, 3) el sábado habrá algún traidor que no deje que la izquierda se coloque en los ayuntamientos. Cualquiera de los tres, los sufrimos en la propia casa.

El desánimo proviene de la creencia de que hay fuerzas ocultas, poderes fácticos incontrolables, que pasan por encima de lo que digan las urnas. En la noche de escrutinios y resultados, ya se oyó en reuniones domésticas en Madrid “no dejarán que la izquierda tome el poder total, en el ayuntamiento y en la comunidad”, así resultó, pero se entiende que por resolución de los votantes, aunque los deseos de los poderosos realmente sean otros. Lo que ocurre de verdad en un país, nos lo cuentan los historiadores muchos años después. Aquí, en España, se han traducido y publicado monografías que exponen la intromisión e intervención de multinacionales y sistemas de información internacional en la trasición de la dictadura a la democracia. Esos estudios desvelan fuentes que ayudan a comprender el hecho de que los que más habían trabajado, los que más se habían preparado, los que se arriesgaron en la clandestinidad en el interior, fueron CCOO, pero el PC no consiguió el poder, sí el PSOE. No siempre los que mojan la camiseta obtienen las ganancias, pero de todos depende acabar con los intermediarios. Como dato anecdótico de actualidad añado la noticia, de hace cuatro días, de que el candidato Pedro Sánchez ha sido invitado a participar en la reunión anual, del elitista e internacional Club Bilderberg, que se celebra en Austria estos días; afirman los expertos en el tema, que todos los presidentes de los EEUU antes de serlo, pasaron por el Club, al que también acudió Zapatero en 2010.

El desánimo también proviene, de que a pesar de toda la corrupción que anegó a este país, muchas personas no se dan por enteradas y votan con la mayor inconsciencia, con la mayor irresponsabilidad y a esas masas no se les ha educado lo suficiente, y de ello son muy culpables los partidos en el poder, que se valieron de la ignorancia para cautivar los votos, sabedores de que si conseguían ciudadanos críticos, perdían el poder. Me viene a la mente una polémica hace poco con una señora de mi edad, con estudios, que cuando le preguntaba si conocía los robos millonarios protagonizados por altos cargos respondía, “Si,Sí, ¡qué vergüenza! ¡que malvados!”; entonces la apuré un poco más y me atreví a espetarle ¿y tú qué haces para evitarlo?, ni lo pensó un minuto: “YO, REZO”. No olvides que TAMBIÉN REZAN ELLOS.

Otro descontento social es el de aquel que aspira a obtener la mayoría en las primeras o segundas votaciones. Eso es tan difícil como que, a la segunda vez que compras un décimo, te toque el primer premio. Las mayorías absolutas son difíciles de conseguir porque necesitan una tupida red de propaganda y de clientelismo que embobe, imponga el miedo o mantengan estómagos agradecidos.

Malas formas de conseguir el poder, e indecentes formas de ejecutarlo, “SI o Sí”, es el absolutismo, dominio despótico, autoritario y dictatorial, aunque prometan los mayores derechos y libertades. Lo hemos sufrido en el sector religioso muchos años y en el político hasta estos días. Ese deseo (por otra parte común a todos los partidos) es lo peor que se observa en la izquierda popular de los círculos, no el programa, ni los comités obreros ( de los que ellos nunca hablaron) pero fueron acusados de querer montar los “soviets”, que eso son los comités obreros, en su origen nada malo sino una indispensable organización ante el caos producido por la caída del imperio zarista; lo malo, lo peor, fueron los jerarcas, el estado-patrón, las cúpulas de mandatarios que los subyugaron y manipularon.

A los comités se asemejan las asambleas ciudadanas, en la forma de discutir un tema y de buscar soluciones, como las mareas en Galicia. Nada de temer. Que Tengan Mucha Suerte y Que Nunca se Corrompan.