Música en la ausencia

"Que respire su partitura”.

Ahora, cuando escribo estas líneas en la tarde, silba el viento entre los árboles como en la mejor música de la naturaleza y caen las gotas de lluvia, campanillas de cristalinas aguas, en la tierra que abriga nuestra estancia.

Todo estaba preparado para acudir a la cita con la mejor música de mano de la Filarmónica Ferrolana que anunciaba para el pasado jueves, un prometedor concierto con una de nuestras mejores orquestas, la Sinfónica de Galicia y un interesantísimo programa marcado por la contemporaneidad de la obra de los compositores polacos Pendereki con su Agnus Dei y Karlowicz, del que se interpretaban las Eternal Songs, de melodías líricas, descriptivas, sentimentales y plenas.

También del joven creador español, David del Puerto, que obtiene con su obra un importante reconocimiento internacional, siendo interpretada por importantes orquestas europeas, el Cap de Quers , un homenaje a la Orquesta de Cadaqués y, en una línea más tradicional el Concierto para violonchelo en La menor de Schumann, creado en 1850, una obra que refleja la naturaleza del romanticismo, envuelta en pasión e intensidad lírica con el solista David Ethève, a quien tantas veces hemos podido escuchar en nuestra Ferrolterra en sus justas interpretaciones nunca exentas de emoción y sentimiento.

La propuesta musical de la Filarmónica era más que tentadora y ya, con las entradas en platea en mano para acudir a la cita musical, el tiempo se puso en contra… ( Silbaba el viento entre los árboles….). Acudir al Jofre en la lluviosa tarde se convirtió en algo temerario. Así que batiéndonos en retirada, nos quedamos con la música del agua y del viento que silbaba, recordando los violines inquietudes en el alma…