Gómez Fernández, Ramón.
Lo pinto sin un balón.
Jugaba con los de REPA.
Un jugador con visión.
No jugaba al patadón
y yo quiero que se sepa.
Este señor era Blanco
y trabajaba en un Banco.
O, mejor, era una Caja,
y ya no sé si trabaja
¡Qué dominio del balón
de un jugador cerebral
a quien toda la afición
le llamaba genial
!
Y sin ninguna excepción.
Pulpi de Caja Rural
era todo un goleador.
¿Qué habrá sido de Pulpi?
¿Cuál ha sido su final?
Todo pasa, todo pasa.
Pasa todo, pasa todo,
y aquí no queda nada.
Pasan también las ciudades:
Madrid, Roma, París, Praga
y hasta de prisa pasa Pisa.
A mi me da en la nariz
que este chaval desgarbado
se llama Carlos Mouriz.
Un jugador entre rejas
casi no es jugador.
Tiene que pedir permiso
para tocar el balón.
Jugaba en Bonxe y era
ante todo goleador.
Carlos Gómez, Carlos Gómez,
también era jugador
en el equipo de Bonxe.
Dime dónde estás ahora.
Dime en qué lugar te escondes.
¿Sigues aún entre rejas,
Carlos Gómez, Carlos Gómez?
Me voy a hacer una apuesta:
¿a que ustedes no conocen
a José Manuel Cuesta?
Al fin aquí llegó su hora.
¿A que lo conocen ahora?
Era clase y era arte
y un jugador modelo.
Se llama Jesús Duarte
y jugaba en el Castelo.
