Jugadores míticos verinenses

El viernes siete de junio se va a celebrar en Verin la "Gala del deporte". Con motivo del evento aportamos en Opimion de "Galicia Dixital" un comentario sobre jugadores miticos de la ciudad, retomando datos de buestra larga vida profesional en los diarios madrileños "Gol" y "Marca, en "Meta" de Vigo, "Iman" de la Coruña y como corresponsal. en España. de "Mundo Desportivo" de Lisboa.

1.- "Callao", Angel Cabido

Fue el gran mito del fútbol verinense, porque su figura como eje del ataque del equipo C.D.Verín, en aquella alineación de los mejores valores con Juanito Guerra Andre, Vicentito Conde Barrio, Octavio Cid Guerra, Paulino y Pirrimpin Castro, Cesareo, Carlos y Pedro Gonzales Fuetes, Lilo, Pepe, Andres...cuyos nombres, practicamente desconocidos por el deporte nacional en los primeros años cuarenta, quedaban en el recuerdo de una afición que vibraba en el Toral, en aquellos amistosos frente a conjuntos con cierto renombre regional.

Asi surgía "Callao", que de carpintero en la sección de embalajes del Balneario de Sousas, al servicio de don Eugenio Ochoa Mulette y de doña Maria Govantes, saltaría a la fama. Diariamente, por aquella fuerte amistad que nos unía a los propietarios de Sousas, compartíamos la inquietud de Angel Cabido y, mucho más, cuando a comienzos de la temporada futbolística del 44, se desplazaba a León, para someterse a prueba con la Cultural y Deportiva Leonesa, de Segunda División, en su campo de La Corredera.

Llegaba "Callao" a la capital leonesa de la mano de los estudiantes de Veterinaria, Vicente Conde Barrio, su compañero del C.D. Verin y Angel Sola Castro "Lito" de la familia propietaria del Bar Aurora, quienes le acogieron en su pensión y le arroparon en las pruebas, que el internacional del Oviedo Herrerita, en busca de nuevos fichajes para su equipo, se fijó en aquel desconocido muchacho verinense y teniendo a su lado a Vicente y Lito, estos le pusieron en antecendentes. Como la Cultural no aceptó la oferta, Herrerita, se llevó al carpintero de Sousas a la Capital del Principado, encargandose del alojamiento y los gastos de quien iba a ser su protegido.

Se dio la circunstancia de que en aquel inicio de temporada estaban aquejados de gripe dos delanteros del Real Oviedo, sólo quedaban en el ataque Antón, otra de sus figuras y Herrerita, y tenían el compromiso del encuentro frente al At. Bilbao en San Mamés. Una de las bajas, fue cubierta por Angel, quien se alinearía con el nombre de Cabido. Fue un encuentro memorable para los asturianos ya que tanto Herrerita, como Antón, conocedores de la habilidad del verinense en los remates con la cabeza y fuerte patada con ambos pies, le pusieron balones en bandeja, logrando nuestro mítico jugador marcar un par de golazos que, al siguiente lunes fueron noticia destacada en los diarios nacionales y el salto a la fama de "Callao".

Ni que decir tiene que en Verin la noticia se divulgó rápidamente y los ventanales del Café Aurora se empapelaron con recortes, viñetas de Cabido con dos cañoncitos en sus botas, fotografías y reseñas que se sucedieron en los siguientes encuentros del once astur ya que el mítico "Callao" continuó de titular indiscutible del Real Oviedo.

Llegaron aquellas fechas navideñas y Angel Cabido las pasó en Verin en el domicilio familiar de Las Puertas de Madrid, calle de Amaro Refojo en cuyo número 33 vivíamos, puerta con puerta y, le hicimos nuestra primera entrevista para la Prensa Nacional y Regional, que ilustramos con fotografías familiares para dejar constancia de su espectacular trayectoria y la afición verinense le felicitó de manera entusiasta en aquella su primera fugaz visita navideña.

Después continuaron los triunfos en todos los escenarios del fútbol nacional y llegó a ser internacional en la entonces selección B que jugó en Riazor en la Coruña.

Pasadas aquellas temporadas en el Oviedo, fue cedido al Palencia aspirante al ascenso a Segunda y, coincidimos en un viaje en ferrocarril que nos dirigíamos a León, en 1947, y le hicimos una amplia entrevista que publicamos en el "Diario de León", que fue la última de cuantas publicamos en aquella etapa, llena de recuerdos de sus primeros pasos e incluso recordamos un accidente de carretera, cuando acompañaba a los propietarios de Sousas y el "rediez" que conducía don Eugenio Ochoa, le fallaron los frenos en las Estivadas y terminó volcando cerca de Florderrey. Y Cabido que iba en la parte posterior se lanzó al vacío del vehículo, resultando milagrosamente ileso y heridos graves los demas ocupantes. Asi, nos afirmaba, que este hecho fue de los mas tristes y recordados de su vida.

Retirado del fútbol, tras contraer madrimonio con una parienta nuestra de O Rios, retornó a Verín, donde residieron en la "misma calle y en la casa del portal de enfrente".

2.- Cesáreo, "Pirrimpin", y otros. ¿Quién acuñó el ¡Hala Verín!?(información de Joaquín Nieves López)

Con el mito "Callao" se abría el periodo brillante del C.D.VERIN y la afición surgió en la Villa y pueblos del alfoz que acudían masivamente a los encuentros que se celebraban en el Toral, así, recordamos que en uno de aquellos amistosos, jugaba el Vigués con su "estrella" Nano, de fuerte pegada, quien inauguraba el tanteador para los visitantes. Y fue cuando, entre la multitud, con fuerte vozarrón, un entusiasta seguidor local, Jaime Pallín Zaton, lanzó el grito de "HALA VERIN,QUE NO SE TE VE" que secudaron todos los asistentes con el HALA VERIN, que, a partir de ese momento, fue el grito de ánimo en todos los encuentros, dándose la circunstancia de que Jaime Pallin, seguidor del C.D.VERIN , acompañó a un grupo de aficionados en el antiguo campo orensano de La Lonia, entre ellos muchachos estudiantes en la Capital y fueron tan insistentes y briosos los gritos de HALA VERIN que contagiaron al público y, quedaba ya definitivamente confirmado el animoso Verín a perpetuidad.

Su iniciador Jaime Pallin Zaton, ingresó en la Guardia Civil, destinado a la villa leonesa de Cistierna, donde prestó servicio durante décadas y, solíamos visitarle, ya retirado, en su domicilio en una vivienda de su propiedad, a pocos metros del Cuartel, acompañado de su esposa, también verinense, del barrio de San Lázaro, propietaria de una pescadería en aquella población leonesa. Ya en los ultimos años del pasado siglo, en una de aquellas visitas, Pallin se encontraba aquejado de una lesión, pero en nuestras conversaciones no faltaban las referidas a sus años juveniles en Verin y a su famoso "alirón" y asegraba que llegó a ser guardameta suplente del equipo de sus amores.

Recordaba Jaime, no solo a "Callao" ya que también lo hacía con elogios para aquel grupo y así decía que en Orense, la Orensana y el Puente se volcaron hacia la cantera verinense, para fichar a Cesáreo, defensa del C.D.Verin, famoso por aquellos despejes "en plancha" alejando el peligro en el área y arropando a aquellos guardametas Conaita, Carlos Gonzalez, o Pirrimpin. Asimismo destacaba en la zaga el otro defensa Lilo, quien, incorporado a filas, fue destinado a Africa donde se integro en el Melilla, entonces equipo del único grupo de Segunda División, donde destacó, según recogían las crónicas del diario local EL TELEGRAMA DEL RIF, y la prensa deportiva nacional.

En Verín, el centrocampista Andres, fue requerido por uno de los equipos de la Capital de la Provincia, y después de abandonar el fútbol retornó a la Villa, ingresando como Policia Municipal, y con él soliamos recordar a nuestro equipo cuando competía con grupos potentes de Chaves, Orense, Lemos, Valladolid, y los siempre riivales Xinzo y Allariz,donde estaba su ídolo Carriega, que pasó a militar en equipos de categoría nacional y a entrenador titulado. Ya, para entonces, uno de los nuevos valores del fútbol verinense, Rodolfo, de oficio mecanico de los talleres de Empresa Guerra, fichó por la U.D. Orensana, siendo uno de los artífices de su desaparición, al no poder, llegar a un acuerdo tras finalizar su contrato, y el club, por falta de fondos descendió de categoría y desapareció, para resurgir, temporadas después con el actual nombre de Club Orense.

3.- Los hermanos Chaves Couto, Arias, Martín Esperanza(información de Joaquín Nieves López)

Verín, que no contaba con equipo en categoría nacional, disponía de una gran cantera de valores que fueron saltando a la fama, como algo insólito en el aspecto deportivo de aquellos años, donde muchachos que jugaban en patios de colegio, tal en este caso en el del frontón de los Hermanos de las EECC, con el nombre de La Salle, o estudiantes de Academia Verinense en el Toral. Destacaba la saga delos hermanos Chaves Couto, con quien participamos en sus juegos infantiles cuando residían en Abedes, donde su tío don Emilio Couto, como Parroco, ocupaba la casona Rectoral y diestro anexo, con pradera, en la que dábamos las patadas a la pelota y ya destacaban, Emilio, el mayor, Pepe, el mediano y Avelino.

Cuando la familia se trasladó a la Villa, los Chaves alineaban en los juveniles de los Hermanos de la Salle, de donde pasaron a la formacion del C.D. Verín, participando en otras actividades de atletismo en Campeonatos Provinciales en la Capital de la Provincia, consiguiendo trofeos en diversas modalidades.

Emilio, debido a una grave lesión en un partido de la que tuvo que ser sometido a intervención quirúrgica, abandonó el deporte, pasando Pepe a militar en un equipo de Segunda División asturiano y Avelino, el más destacado de la saga, ocupó más atención periodística militando en el Zaragoza, en cuyo Club ocupaba cargo directivo el periodista Ulpiano Vigil Escalera, nuestro antiguo compañero en la redacción del diario leones "Proa" de donde pasó a dirigir el aragonés "Amanecer" y que siempre nos hablaba con elogios. Como el decia "tu paisano de Verín".

Avelino Chaves, a punto de ingresar en filas, llegó a León para ofrecer sus servicios a la Cultural y Deportiva Leonesa, cuyo presidente era el gallego pontevedrés don Salvador Rocha, celtista hasta la médula, ya que como propietario de su restaurante "Rocha" solia hacer escala el equipo celeste en los desplazamientos a Cataluña y el Pais Vasco. La gestión de la directiva culturalista con la Base Aerea no cuajó y Chaves, con idéntica pretensión se trasladó a Granada, fichando por el equipo andaluz de donde dio el salto a Zaragoza.

Ya en la Capital maña entabló amistad con los leoneses César Rodríguez, el famoso, entonces, internacional del Barsa y su hermano Calo Rodriguez defensa del Zaragoza. Aquella amistad de Avelino con Cesar y Calo, siendo su invitado a casa de estos en León, donde en los talleres de la Fundición familiar, consegimos un amplio reportaje fotográfico para MARCA, en nuestra condición de corresponsal del diario en León.

Avelino, alineó con el conjunto aragonés cuando ambos militaban en Segunda División y apovechando aquellas visitas compartíamos momentos en el Hotel y, posteriormente, en los vestuarios del Campo y, como es lógico, no podía faltar cualquier alusión, grande o pequeña de sus años en Verín de sus primeros pasos en el fútbol y de quienes destacaron en sus filas.

Otro de aquellos valores verinenses fue Arias, quien destacó como extremo del Deportivo de La Coruña. Los comienzos juveniles del rapaz que vivía en su casa familiar de El Toral y cuyos progresos, seguidos de cerca por su cuñado Pepe funcionario del Ayuntamiento, también hay que situarlos en otros deportes, como campeonatos de atletismo juveniles en Orense, donde le acompañamos y compartimos estancia en el Hotel Roma. Como anécdota de uno de aquellos viajes a la Capital recordamos que fue en los difíciles años de racionamiento y "plato único" y, al preguntar el camarero del Hotel, que deseábamos de postre, Arias, colocando la mano en el estómago, dijo "tráigame un par de huevos fritos, por que si me abre el estomago sólo me encuentra risa y helados". Ni que decir que el espontáneo gesto llenó de hilaridad a cuantos compartíamos aquel almuerzo con anécdota imborrable
que, al recordarla, nos hace mirar hacia aquel pasado, que, quizá nuestros deportistas de hoy supongan que son fantasías, cuando fueron realidad.

De Arias solia hablarnos en León el entonces presidente del Burgos, el militar de Intendencia Preciado, ahora retirado con el grado de general, en Madrid y que por aquellos años acudía a Verin a visitar a una hermosa muchacha que fue su novia y, por sus contactos con futbolistas, conocía a fondo a muchas de aquellas figuras, como también conocía el orensano Comisario de Policía don Apolinar Portela, quien ,siendo Jefe de la Policía Leonesa, mantenía contactos con jugadores orensanos, muchos de ellos, como Pita legendario portero del Deportivo.

En Verin paso su niñez Martín Esperanza, hijo del Capitán del cuerpo de Carabineros Martin Esperanza, quien pasó al Colegio de Huérfanos de Valdemoro, destacando en los equipos juveniles del Madrid, y, al pasar a la plantilla del Pontevedra, su nombre se asoció al deporte verinense, ya que en la Villa residían sus hermanas, cuyos maridos, recordamos, fallecieron de forma prematura, tal el caso de Manuel Perez Garcia-Sabugo, muerto en desgraciado accidente de automovil en el Cumial de Orense y el otro cuñado del futbolista Juan Benito Sola Castro "Pilas", murió cuando ocupaba el cargo de Fiscal en los juzgados de Ferrol.

De Manuel Perez Garcia Sabugo, alcalde que presto gran atención al futbol verinense, le tendrán en la memoria aficionados e hinchas acérrimos como Albino, comerciante de Estevesiños, quien formó parte de una de aquellas directivas del Club y nos suministraba información en su tienda de la Avenida de Luis Espada, punto de tertulia de aficionados, que acudían al Bar Deportivo, al de Luis o de Alfonso Jimenez y Carola, lugar de nuestras citas en viajes a la Villa.

4.- El local "LA PEÑA". Verín, "parada y fonda"(información de Joaquín Nieves López)

Allá por la mitad del pasado siglo la afición futbolística verinense se inclinaba, entonces, por el Club más representativo de Galicia el R.C.Celta de Vigo, el "Celtiña" , cuando militaba en Primera División, y los resultados, los facilitábamos en la sesión de tarde del recién inaugurado "Cine Puga" en el intermedio, cuando se ponían en pantalla las diapositivas comerciales.

Pero al margen de esa sala, que había sido "Café Moderno", pero, allá por los años veinte fue punto de reunión de aficionados al fútbol, de ahí que su propietario don Carlos Rivas, diese a su local el nombre de "La Peña", poniendo a disposición de aquel primer club que conocimos uno de los pequeños reservados, para juegos, como sede social al servicio de entusiastas del balompié verinense, posiblemente lo que fue el embrión del futuro de nuestro fútbol.

Recordamos como en aquellos años de mitad del siglo XX, Verín fue "parada y fonda", no sólo de los camioneros vigueses, que transportaban pescado por la única via rápida que entonces unía a Galicia con Madrid, la carretera Nacional Villacastín Vigo, camioneros que desde el puerto vigués en su primera etapa se detenían en "Casa Romanones" para cenar y continuar viaje, ruta que con parada y fonda hacían muchos equipos en autocar. Uno de los que en ida y regreso gustaban de la parada verinense era el Celta, que, con su entrenador el mítico Ricardo Zamora a la cabeza, reservaba mesa en "Fonda Juanita", en la Avda de Portugal. Fue en esa fonda de la familia Bernabé donde tuvimos nuestro primer contacto con don Ricardo, cuando, entonces, muchos aficionados le recordaban como la figura mas destacada de los juegos de Amberes. Y, conocedores de aquel interés por esas paradas frecuentes, en una ocasión nos desvelaba el secreto almorzando en un Restaurante leones, afirmaba que en Verín, en la Casa Juanita, además de su cocina tradicional, adquiría encargos de artículos portugueses, dejando, así, despejado aquel curioso y misterioso alto en la ruta.

También recordamos que otros equipos tenían a Verín como parada y fonda, haciendo reservas en el Restaurante Aurora, como los conjuntos del Zamora, el Valladolid y otros de Tercera, en sus desplazamientos a Orense, Pontevedra y Santiago, estancias que aprovechavamos para entrevistar a sus técnicos, como el del At. Zamora, Muñoz en su desplazamiento a Compostela, para nuestras colaboraciones en "Marca". Uno de los mejores hombres de la selección portuguesa, el defensa Feliciano, frecuentemente visitaba en Verin a deportistas, tuvimos oportunidad de conseguir jugosas declaraciones, guardando el recuerdo de aquel corpulento atleta.

Posiblemente fuesen muchos más los futbolistas que tuviesen algún recuerdo de aquel Verín de antaño, cuyo paso y alto en el camino no llegamos conocer, ya que, nuestros confidentes fueron los encargados de establecimientos hosteleros acreditados en la Villa.

5.- Luis Reigada, "Kike" León, Rodolfo(información de Joaquín Nieves López)

De aquellos años de mitad del pasado siglo, cuando C.D.Verin solamente figuraba como un equipo de aficionados, sólo presente en competiciones provinciales, campeonatos auspiciados por organismos oficiales y concertar amistosos con otros grupos de la provincia o del norte de Portugal, seguimos recordando a los valores de la cantera que saltaban a la primera categoría de la provincia con la U.D.Orensana, que seguía de cerca a quienes destacaban en el futbol verinense.

A los ya destacados Cabido, Chaves, Arias, Lilo, Andrés, etc. iban surgiendo en C.D.Verín otros muchachos que despuntaban allá por la década de los cincuenta y tenemos que referirnos a quienes cubrieron ficha para la Liga Nacional con la desaparecida U.D.Orensana, comenzando por Luis Reigada, sobrino del fundador del club verinense en posguerra Juan Reigada Cabido, éste ebanista, de la familia de ferreteros de la Calle Mayor, donde despuntaba como jugador en la línea de ataque. Luis, quien se trasladó a la capital donde estampó ficha por el primer equipo provincial.

De aquella epoca destacaba en C.D.Verín, como guardameta, Enrique León, miembro de la familia de relojeros, en cuyo taller, frente al templo parroquial, desde joven aprendió el oficio de su abuelo y tío, quien dada su afición al deporte, al igual que Reigada, fueron requeridos sus servicios para la Orensana, destacando por su valentía defendiendo los colores del conjunto de las Burgas. Fue Kike León Sola un hombre carismático de aquella saga familiar verinense y, al contraer matrimonio con la hija de un industrial de materiales de hierro para la construcción, con importantes instalaciones en Ourense y Leon, regentó, en esta ciudad el negocio donde compartimos la vieja amistad y paisanaje.

Enrique León , fue seguidor del futbol verinense y un constante viajero por paises exóticos y safaris, como hobby, adquiriendo los más variados objetos de aquellos lugares que visitaba, desde lanzas y tambores de tan tan, dardos y máscaras, lo más representativo de cada pais, que, llegado el momento, decidió instalar en la ciudad leonesa una tienda-museo, para vender su exótica mercancía, comercio que fue lugar de reunion de verinenses, donde siempre recordaba aquellos años defendiendo los colores de C.D.Verín. Para quienes escriban la historia de Verín, tienen en Enrique León un personaje digno de estudio, como futbolista y como hombre de negocios.

En aquel trío de jugadores de mitad de siglo hay que añadir el nombre de Rodolfo, quien, en la Villa, comenzó trabajando como mecánico de los talleres de vehículos de la "Empresa Guerra", en la que un familiar de los propietarios, oriundo de Castilla, había sido titular del Real Valladolid, Sañudo, quien afincado en la Villa dejaba atrás el deporte activo, pero seguidor del fútbol. Del taller de aquella empresa de autocares de línea, pasó Rodolfo a U.D.Orensana, tras iniciarse como titular de aquel emblemático C.D.Verin, sumándose a la nómina de quienes con entusiasmo supieron defender los colores de aquel modesto club.

Rodolfo, recibió ofertas de los grandes equipos gallegos, lo que rechazó por su vinculación a la Orensana, a cuyo Club perteneció hasta su desaparición cuando estaba en el fútbol nacional y perdió la categoría, porque la directiva no pudo ponerse al día en el abono de deudas a jugadores y fue sometida a un riguroso expediente federativo.

Estos retazos pueden unirse a otros ya expuestos para la historia que, con acierto, recoge este nuevo Club que milita en categoria nacional quien no puede olvidar a quienes a lo largo del último siglo forjaron las bases del futuro y de este presente.

6.- El campo José Arjiz(información de Joaquín Nieves López)

Entre las notas sobre el deporte en Verin de los años de mitad del pasado siglo, hay que destacar también a quienes desde las instituciones pusieron interés de una u otra manera, con nombres que hay que añadir a los de deportistas que pusieron muy elevado el pabellón de la Villa, cuando las circunstancias iban exigiendo dar impulso a viejas aspiraciones. De aquella época tenemos un buen recuerdo del abogado y regidor municipal don Jose Arjiz Salgado, oriundo de Mourazos y casado con una verinense de la Familia Tresguerras, quien, al frente de la alcaldía, entre los viejos proyectos, sacó adelante el de infraestructuras deportivas.

Arjiz Salgado, durante los primeros meses de la Guerra Civil, fue director del semanario "España Nueva", que apareció cuando "Nuevo Tamega" y "Eco de Monterrey" dejaron el vacío de los semanarios. De este que se imprimía en la imprenta de la Viuda de Ramon Fuentes, doña Carmen, hace referencia en "Varones Ilustres" don Jesus Taboada pág.169: "periódico -escribe- de corta vida y pequeña tirada que algunos coleccionistas conservan". Al acceder a la Alcaldia dio impulso al deporte amateur. Ilusionado con la idea de dotar a la población de un campo de deportes aprovechó el momento oportuno de una visita a la Villa del entonces ministro de Información y Turismo don Manuel Fraga Iribarne, acompañado de su esposa doña María del Carmen Estevez Eguiagaray, hija del militar verinense don Ignacio Estevez Estevez, familia que tenia su casa solariega en las calles de El Pozo, esquina a la de Amaro Refojo.

En el transcurso de un almuerzo en el restaurante del Gran Hotel de Cabreiroa, donde se le hizo entrega del pergamino que concedía al ilustre matrimonio el nombramiento de "hijos adoptivos de Verin", el señor Arjiz expuso la petición formal de la necesidad de construir en la población un moderno campo de deportes, que, en principio, se proyectaba en terrenos de La Granja, o en La Alameda, pero seria finalmente en las inmediaciones de Caldeliñas, donde se habían construido los bloques de "casas baratas", lugar que necesitaba de buen drenaje, por estar enfangado por uno de los arroyos de A Rasela y el Salgueiro.

En aquella visita, el Ministro, acompañado por quien, años después, le sustituyó en el cargo, don Pío Cabanillas Gallas, durante la proyección de un documental turístico hispano-argentino que promocionaban los Hermanos Álvarez y se exhibió en su local "Cine Buenos Aires", directivos del club de fútbol verinense, hicieron entrega a Fraga de un escrito agradeciendo su apoyo a la construcción del campo de deportes, lo que también contó con el beneplácito de las primeras autoridades orensanas allí presentes.

Conservamos de aquella visita ministerial la crónica que, como enviado especial de la Agencia "PYRESA", cursamos a la misma, así como los documentos gráficos facilitados por la coresponsalía de "EFE". En una de aquellas fotografías, en nuestro poder, están el señor Fraga, su esposa, el señor Cabanillas Gallas, el concejal de deportes don Casiano Grangel Garcia, don Jesus Taboada Chivite y el autor de este comentario que sólo pretende dar a conocer pequeñas pinceladas, que nos recuerdan viejos tiempos de cronista deportivo en Verín del diario madrileño "Gol", pinceladas que titulábamos "Salpicaduras Verinenses", retazos y píldoras de nuestro deporte, que tanta aceptación tenían entre los seguidores del C.D. Verín desde todos los rincones del país.

7.- "Paco da Tahona" y César Simón, capellán del CD Verín (información de Joaquín Nieves López)

De aquellos años cuarenta, con diversas referencias a aquel modesto equipo, que iniciaba lo que iba a ser el mejor exponente del deporte verinense, tenemos en memoria pinceladas publicadas bajo el titulo de "Gotas deportivas", en el primer diario nacional del deporte en la postguerra "GOL", con breves notas de nuestro Club, tras su fundación por Juan Reigada Cabido, arropado por entusiastas como el ya citado en estos recordatorios, el entonces Administrador de Correos, don Justo de las Heras, casado con la verinense doña Carmen Luna, matrimonio que cedió un local familiar en la Avenida de Luis Espada, para instalar el domicilio social de CD Verin, así como almacén de vestuario, material y utillaje, destacando las redes de las porterías, hechas artesanalmente por dos vecinos aficionados a la pesca que causaron sensación el día que se estrenaron frente a un conjunto vigués.

Otro de los técnicos, asesor en materia de reglas de juego, con la normativa recogida en publicaciones del árbitro internacional Pedro Escartin, era Francisco Castro el confitero, popularmente conocido como "Paco da Tahona", quien, gran conocedor de aquellas reglas que explicaba a sus muchachos, fue incombustible arbitro en todos los partidos, siempre imparcial en el terreno de juego, como se reflejaba en las reseñas de propios y extraños.

Asimismo tenía el equipo además de técnicos y asesores un "director espiritual", misión que se recabó del reverendo don Cesar Simón Bouzo, parroco de Ábedes y Cabreiroa, asignándole el cargo de capellán del Club, teniendo en cuenta que entonces era el sacerdote más joven de la comarca, dada la avanzada edad del párroco verinense don Santiago Rodriguez y el coadjutor don Emilio Arturo Sanchez. Además directivos y jugadores procedían del centro religioso HH de las EE.CC. de San Juan Bautista de la Salle , razón suficiente para dotar a la sociedad de un capellán.

Don Cesar Simón Bouzo, pronto pasó a ejercer la capellanía castrense, al ganar las oposiciones de aquel rango militar, y, como tal, recordamos la anócdota de que en su doble coincidencia en el ministerio sacerdotal, uno de aquellos reclutas, jugador del equipo, le tuvo como "pater" en el Regimiento de Medina del Campo, quien le comentaba todo lo que acontecía en Verin y su contorno.

A título de curiosidad adjuntamos fotografías del Capellan, que son de la autoria de Máximo Godas, en cuyos archivos, suponemos, conserven los herederos de aquel estudio dicho material, y que, por nuestra parte, aportamos a esta nota retrospectiva como en su momento hicimos en las crónicas "Gotas deportivas" del desaparecido diario madrileño GOL, y si quienes tienen a su cargo, recopilar estos datos lo consideran a su buen criterio,entender y saber, ser merecedoras de que no queden en el olvido sirvan para conocimiento de aquellos que quieren conocer lo que fue aquel modesto Club de los amores de nuestros mayores.

8.- Un amistoso de 1954 (información de Joaquín Nieves López)

El viejo campo de "La Granja" al que dedicamos otros retazos de la historia del futbol de mediados del pasado siglo, fue escenario de encuentros amistosos que desde Alemania nos trae el recuerdo de un partido otoñal, en la víspera de la festividad del Pilar el 10 de octubre de 1954, fotos que desde su residencia alemana de Nuremberg, envía para nuestro archivo deportivo la encantadora poetisa verinense Angelines del Rio Nieves, nuestra prima conocedora de trabajos que dedicamos a viejos recuerdos, muchos recogidos en esta página web del C.D.Verin en su historia.

Sacamos del olvido uno de aquellos encuentros de andar por casa, incluyendo las fotografías de la madrina, hermana de Ángeles, acompañada de su padre, a la sazón comandante del puesto de la Guardia Civil de Alvarellos, Luciano del Rio, instantánea que al lado del once añadimos a otros retazos que hacen historia de aquella afición tan sentida por quienes fueron destacados hinchas del Club.

Formaban la alineación caras conocidas como Pepe, funcionario del Ayuntamiento al frente del negociado de Quintas, cuñado de Avelino Arias, recordado jugador del Deportivo, otros jugadores son Pepe(quien regentó el Bar Deportivo), recordado de aquella alineación de Callao, Vicente Conde, Juan Guerra, Paulino y Pirrimpin Vega Castro, sobrinos del inolvidable árbitro Paco Castro, confitro, popularmente conocido como Paco da Tahona, Carlos y Pedro González Fuentes, Octavio Cid, Liló, Cesáreo, y los hermanos Chaves. Pero en la foto de ese amistoso están otros conocidos como los hermanos Ricardo y Castocito "Chita" y Carlos, "Tatari", propietario del taller de ruedas de carruajes al lado del campo