Opinión en Galicia

Buscador


autor opinión

Editorial

Ver todos los editoriales »

Archivo

La iglesia del convento de San Francisco

jueves, 08 de noviembre de 2012
Memoria de Lugo. Los conventos y sus iglesias

La iglesia del convento de San Francisco

El papa Martín V decía desde Roma el 11 de julio de 1425 al abad del monasterio de San Julián de Samos, que don Fadrique Enríquez, duque de Arjona y conde de Trastámara, le había expuesto que en la iglesia del convento de San Francisco descansaban algunos de sus hermanos y parientes y, por profesar especial afecto a esta orden, y desear ser sepultado en su iglesia, intentaba construir magníficos mausoleos y encerrar en ellos los restos mortales de sus antepasados. Para ello destinó 16.500 maravedis anuales, sobre la renta y los derechos que el conde de Trastámara tenía en algunos de sus territorios. La casa del duque en Lugo estaba junto a la puerta Falsa. En 1416, eran conocidas como los pazos del conde don Fadrique, las casas del Conde y las torres del Conde.

A partir de este momento se debió de iniciar la construcción de la iglesia. En el último tercio del siglo XV se reconstruyó una parte del claustro, en el que aparece su escudo de armas, y se continuó la iglesia cuya pared S se hizo en el año 1460, siendo guardián el padre Pedro de Hevia, según consta en una inscripción.

Sobre uno de los contrafuertes de la fachada S hay un escudo cuartelado, que por los muebles parece indudable que hace referencia a uno de los protectores, pues tiene en el primer cuartel dos corderos, posiblemente de los Cordido, en el segundo el dimidiado de León y Castilla, en el tercero los palos vibrados de la casa de Trastámara, y en el cuarto los seis roeles de los Castro.

En la sacristía hubo una inscripción de recordatorio a este linaje protector del convento para que los religiosos que fuesen sacerdotes se acordasen de los duques de Arjona en sus misas, advirtiendo que los tenían por fundadores y patronos del convento.

La iglesia es gótica, con planta de cruz latina y tres ábsides cubiertos con bóveda de crucería. Las claves de los arcos de la nave principal tienen símbolos relacionados con la orden franciscana. La cubierta es de madera siendo el artesonado central el más notable, de estilo mudéjar.

La fachada principal remata a dos aguas con cruz griega y la recorre un ventanal. La portada está formada por un arco trebolado. La torre es una construcción posterior. El rosetón de la fachada S, es semejante al de la fachada N de la catedral.

El sepulcro de don Pedro Enríquez de Castro

En la iglesia hay seis arcosolios destinados a sepulcros, de los que sólo tres conservan estatuas yacentes vestidos con armadura, dos en la capilla absidal del lado del Evangelio y uno en la del lado de la Epístola, posiblemente el de don Pedro Enríquez de Castro que Falleció en Ourense el día 2 de mayo de 1400, siendo trasladados sus restos años después a este enterramiento.

Su lápida, que desapareció, tenía una inscripción que decía que era hijo de don Fadrique, maestre de Santiago, nieto de don Alonso, que murió en la contienda de Gibraltar, y que fue conde de Trastámara, Lemos y Sarria, Bollo y Viana, señor de Villafranca y Ponferrada, Condestable de Castilla y Pertiguero Mayor de Santiago.

La estatua está orientada hacia el E, como las iglesias, mirando hacia Jerusalén y al Paraíso. Es un caballero vestido de punta en blanco con armadura de combate para montar a caballo. Se diferencia de las utilizadas en los torneos y a pie, en tener ristre para lanza en el pecho, el faldón de mallas corto y las espuelas.

Los sepulcros de Pedro Fernández y su hermano Rodrigo Alfonso

Están en la capilla que era de San Antonio. La reedificó fray García de Quiroga, que está enterrado en ella. También están los sepulcros de don Pedro Fernández Bolaño y el de su hermano don Rodrigo Alfonso de Saavedra.

El primero era hijo de don Alfonso López de Saavedra y de doña Sancha, hermana de Fernán Pérez de Andrade O Bo. La estatua yacente se orienta, hacia el Este. El sarcófago está formada por el tablero destinado al epitafio y a las piedras de armas, y la cubierta con la estatua yacente del difunto, sobre una sábana, apoya la cabeza en dos almohadones y los pies sobre un perro.

Se le representa vestido con armadura completa, con gorjal que remata en bacinete sin visera, lo que impide ver el rostro completo. Las manos con manoplas, sobre la espada. En el borde de la lauda tiene la inscripción que dice que era merino mayor del duque don Fadrique.

El sepulcro inmediato es semejante al anterior y corresponde a su hermano, don Rodrigo Alfonso de Saavedra. La vestimenta del difunto es idéntica a la del otro sepulcro.
De Abel Vilela, Adolfo
De Abel Vilela, Adolfo


Las opiniones expresadas en este documento son de exclusiva responsabilidad de los autores y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de la empresa editora


PUBLICIDAD
ACTUALIDAD GALICIADIGITAL
Blog de GaliciaDigital
PUBLICACIONES