Charanga veraniega

En esta España lastimosa y festiva, tan de contrastes, particularmente durante los meses veraniegos, está haciendo su particular agosto “la charanga del diputado Gordillo” y su particular Sindicato de Asaltantes a Tiendas (SAT).

Después del asalto a Mercadona y tras haber comprobado su gratuidad jurídica y los elevados réditos mediáticos obtenidos, el populista alcalde de Marinaleda y diputado autonómico andaluz se ha lanzado de gira veraniega, probando todo tipo de escenarios, ya sean entidades bancarias, fincas latifundistas y, últimamente, establecimientos hoteleros y, todo sea dicho, con gran éxito de público y prensa.

En un país como el nuestro, donde a cualquier paria le pueden caer unos cuantos meses de cárcel por robar una barra de pan para llenar el estómago, la charanga de Gordillo con su cabecilla al frente, se permite campar a sus anchas por el solar hispano impartiendo su propia justicia a tirios y troyanos gracias a la total impunidad que le otorga su condición de aforado, sin que las fuerzas del orden y las autoridades competentes, o diría más bien incompetentes, que las dirigen sepan que medidas tomar para preservar el derecho a la propiedad que, al parecer, en este país está reservado en exclusiva para la casta política y es que la diosa justicia ibérica más que ciega parece bisoña y siempre mira por la rendija con quien hay que ser implacable y con quien conviene ser tolerante.

El ejemplo de Gordillo ya ha tenido su réplica en Mérida, en esta ocasión en el supermercado Carrefour y también protagonizado por un diputado extremeño de Izquierda Unida, don Víctor Casco y es que, a este paso, no tardaremos en ver pululando por toda la geografía española a distintas bandas de bandoleros encabezadas por su “Curro Jiménez aforado” correspondiente. Quedamos a la espera de que aparezcan en escena los marxista-capitalistas de siempre, Pilar Barden, Willy Toledo y toda la progresía de los de Nunca Mais. Al fin y al cabo, una charanga sin sus actores principales resulta un tanto descafeinada.