¿Cómo afecta la crisis a los niños?

Un informe reciente realizado por UNICEF sobre “La infancia en España 2011-2013” ofrece datos escalofriantes como que casi 2.200.000 niños viven por debajo del umbral de la pobreza, siendo uno de los colectivos más afectado por la crisis económica.
 
Es probable que la palabra más escuchada en los últimos años haya sido “crisis”, aunque se ha pasado por alto cómo ha afectado y sigue afectando a los más vulnerables, es decir, a los niños. Los más pequeños sufren la crisis en sus casas cuando sus progenitores se quedan sin trabajo y sin ingresos. 

Sin entradas no hay dinero, y por tanto empiezan los recortes y los dramas. Existen muchas familias que se sienten ahogadas para poder llegar a final de mes y otras que ni siquiera pueden hacer frente a tantos gastos, como pagar la hipoteca o el alquiler y acaban siendo desahuciadas. A todos los padres les gusta que sus hijos tengan siempre lo mejor, aunque no siempre puede ser así. Muchos se ven obligados a recortar también en la calidad de la alimentación o en la ropa –y los caprichos, inimaginables-.
 
Los medios de comunicación hacen noticias entendibles para los adultos y los políticos también toman medidas y hacen recortes pero, quién piensa en los niños. Es un círculo vicioso. Muchos hijos sufren y sienten impotencia al ver cómo sus padres han perdido el trabajo y no saben cómo llegar a  final de mes. La falta de ingresos en muchas familias con todos los miembros parados dificulta la convivencia y los pequeños se suelen percatar del ambiente tenso convirtiéndose en víctimas indirectas.
 
En estas situaciones muchos se preguntarán cómo es posible que exista dinero para inyectar a los bancos y no para evitar desahucios de familias enteras donde su nueva vivienda será la calle, los menores tendrán que ir a centros y los separarán de lo que más quieren, su familia. Creo que se necesita reflexionar y actuar para evitar que los niños sean víctimas de la crisis.