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Revoluciones árabes en cadena

martes, 26 de abril de 2011
¿Qué dirección tomará una pelota en un tejado inclinado? El más mínimo obstáculo la hará cambiar de sentido sin duda y caerá por el lugar más inesperado. La trayectoria de la pelota tiene un sinfín de posibilidades sin que podamos predecirlas. Tal es el símil utilizado comúnmente para explicar que estamos inmersos en un sistema imprevisible, que no obedece indefectiblemente a leyes, similar al del tiempo atmosférico, parecido por ejemplo al funcionamiento de la Bolsa en el que una incidencia mínima puede tener insospechadas consecuencias. Si se me permite una cita docta, Aristóteles dejó escrito que “el hombre tiene mil planes para sí mismo pero el azar sólo tiene uno para cada uno”.

Los que creen en el azar ponen el repetido ejemplo clásico siguiente, que se ha puesto de moda: “El aleteo de una mariposa podría llegar a provocar una catástrofe en otro lado del mundo”. Tal “Teoría del caos” se nos hace cuesta arriba, resulta difícil de aceptar. Era lo que nos faltaba, además de los desastres naturales, de las guerras, de la represión, del infortunio, de la adversidad, nos enfrentamos a la más pura incertidumbre. No, el hombre no está en un mundo fatalista, puede rebelarse contra su suerte, es el principio de todo humanismo.

Nadie previó ni presintió la ola de transformaciones que van estallando una tras otra como por simpatía en todo el mundo árabe y que están dando lugar a una nueva configuración y relación de fuerzas entre las naciones de la orilla sur del Mediterráneo. Tales cambios enfrentan también a jóvenes y mayores dentro de las distintas sociedades. Algunas dictaduras del área, como Túnez y Egipto, han caído como fichas de dominó y todo el conjunto se tambalea. Esto no responde a pulsiones islamistas, como pudiera creerse, sino a impulsos de renovación de unos jóvenes que coinciden en rechazar, por obsoleto, el mundo heredado de sus padres. Las revueltas árabes tienen dos características, los insurgentes carecen de recursos y la mayoría sueña con más libertad. Se comunican entre sí por la moderna información instantánea de las redes sociales: Internet, Google, FaceBook, Twiter, redes que constituyen un hito histórico solo comparable al de la invención de la imprenta por el alemán Johannes Gutenberg en el siglo XV.

El pasado 13 de abril hizo tres meses día por día que un informático obligado por la falta de empleo a convertirse en vendedor ambulante se prendió fuego en Túnez en un gesto desesperado de protesta contra las autoridades policiales que no le dejaban instalar en la calle el carrito de chamarilero con el que sustentaba a su familia. Fue la chispa inesperada que desencadenó las protestas primero en Túnez, después en Egipto, extendiéndose más tarde por todo el note de África, contagiando a Libia, Argelia, Marruecos, un tsunami de libertad, como se diría con una comparación al uso. Hasta la fecha, tal es el ejemplo más elocuente que conocemos en la realidad del “efecto mariposa” que he tratado de describir antes.

Aunque este periodo de disturbios de tres meses sea un corto espacio de tiempo para prefigurar lo que van a dar de sí los cambios, se puede hacer ya un balance provisional de los logros conseguidos.

Primero. En Marruecos, el rey Mohamed VI, poniéndose la venda antes de la herida, indultó a 190 presos políticos, entre ellos tres dirigentes saharahuis, en un gesto apaciguador destinado a atajar de antemano las posibles revueltas reivindicativas.

Segundo. Las revoluciones de Túnez y Egipto progresan lenta pero inexorablemente. En Túnez, el nuevo gobierno acusó al ex dictador Ben Ali , refugiado en Arabia Saudí, de 18 delitos, entre ellos el de homicidio y tráfico de drogas. El nuevo Túnez avanza hacia la democracia. Innova en el mundo musulmán al instaurar listas paritarias de hombres y mujeres para las elecciones a la Asamblea Constituyente del 24 de julio. Así lo ha decidido la Alta Instancia para la Realización de los Objetivos de la Revolución, órgano de 155 miembros que representa a toda la sociedad, El país cuenta con una población femenina evolucionada, Junto con Líbano, Túnez es la nación musulmana más adelantada en lo referente a la condición femenina, la poligamia está prohibida desde 1957 y la ley electoral de la dictadura ya reservaba a las mujeres el 25% de los puestos en las listas. La transición que guía el presidente interino, Fuad Mebaza,va en serio.

Tercero. El caso de Egipto es varias veces relevante. En primer lugar por ser cronológicamente la segunda revolución en la zona pero también a causa de tratarse de la de mayor envergadura por su población, desarrollo y territorio. Acaba de superar un test crucial, los generales que conducen la revolución han detenido al antiguo dictador Hosni Mubarak para interrogarle. Parecía intocable tras 30 años de gobierno pero tanto él como sus hijos se hallan bajo arresto. En los primeros meses de cambio, las cosas han avanzado según constatan agencias internacionales y observadores. El pueblo egipcio ya dio carta blanca en un referendo a los militares el mes pasado para hacer las reformas proyectadas. La nueva Constitución limitará a dos mandatos la jefatura del Estado y establece todas las garantías para un poder democrático que se elegirá por sufragio universal antes de final de año. No hay indicio alguno de que vaya a surgir un espadón entre los militares, Egipto parece ir por buen camino también.

La inusitada rebeldía árabe después de años de estancamiento y postración ya forma parte del acervo político de nuestros días y no parece tener vuelta atrás.
Acuña, Ramón Luis
Acuña, Ramón Luis


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