Opinión en Galicia

Buscador


autor opinión

Editorial

Ver todos los editoriales »

Archivo

'Visiones de una España diferente. Relato Visual (1950-1969)'

lunes, 11 de abril de 2022
Viendo el pasado domingo la manifestación del mundo rural me pregunté qué quedaría hoy de aquel de los años 50 y 60, del cual las últimas generaciones ni saben, ni 'Visiones de una España diferente. Relato Visual (1950-1969)'imaginan: quedarían perplejos ante los reportajes o las fotografías de aquel ambiente y sus atavíos en el más miserable mundo agrario.

Servidora ha escrito sobre aquel campesinado al hilo de las fotografías tomadas por jóvenes del Servicio Universitario de Trabajo-SUT- de 1954 a 1969, entre el nacional catolicismo y el sesentayochismo antifranquista. El texto -del cual extracto aquí algún fragmento- ha sido publicado el pasado mes de diciembre dentro del libro "El SUT, visiones de una España diferente. Relato visual (1950-1969)" (Ed. La Catarata), de cual extracto aquí algún fragmento, animándoles a ver las bellas fotografías testimoniales de aquel tremendo rural:

"El interés por la imagen del mundo rural ha sido enorme a lo largo de la historia de la fotografía, la pintura, la escultura y todas las artes, y de manera muy especial ha estado en el foco la de España, al ser este un país que conservó la esencia primitiva de aquella cultura popular hasta muy tardíamente, viéndose en ella la pureza de nuestra universo originario. La curiosidad etnográfica por captar tipos y costumbres del campo español más remoto, desde el romanticismo hasta las generaciones del 98, del 14 y del 27, llevaría a la fascinación de fotógrafos extranjeros y españoles ante aquellas reliquias ancestrales, que iban perviviendo en pueblos y aldeas, siendo fuentes de inspiración tanto para nuestra literatura como para el arte. Liberales y conservadores, republicanos y monárquicos potenciarían de diversos modos la imagen rural, desde distintos puntos de vista ideológicos y con distintos objetivos.

Pero, además de aquel afán identitario etnológico "casticista" que buscaba rescatar de la desaparición objetos lujosos casi perdidos y adornos típicos, como joyas, peinetas y atavíos antiguos usados en días de fiesta y de labor, fijándolos con fotografías o en pintura, el adentrarse en aquel mundo también produciría la toma de una conciencia social crítica ante el espectáculo de atraso, miseria y explotación en la que estaba inmerso el campesinado español día a día, sol a sol. Los ejemplos de tal censura fueron más en los años de la República y en la cultura detractora de la larga postguerra, que veía falaz el folklorismo populista del franquismo. Cuando la juventud del SUT se encontró ante aquellos tipos, pueblos, trabajos y costumbres, pienso que tal experiencia tuvo las dos caras.

La progresiva urbanización de la España de los años 20 y 30 se detuvo con la guerra civil, y ello habría de retrasar en casi treinta años la modernización económica, con lo cual el país se "reagrarizó" y se "rerulalizó", de tal manera que hacia principios de los años sesenta la población española era todavía en su mayoría rural o semirural. Esta colección de fotos empieza con las del trillo y acaba con la del tractor, cuya aparición fue marcando en el trabajo del campo un antes y un después a lo largo del espacio de tiempo que transcurrió entre 1954 y 1969, fechas primera y última de este repertorio…

"...En general, la conciencia política de aquel mundo campesino, si la tenían, estaba centrada en la crítica a los poderes locales, a sus abusos y caciquismo, pero no solía ir más allá, porque reinaba el desconocimiento de derechos, el silencio y el miedo. Eso sí, aún sin información, se sentían abandonados, olvidados.

Aquel mundo cerrado era su mundo, tardarían en conocer otro, viviendo en él su destino con un estar de costumbre a lo largo de generaciones: se comía de un solo plato o perol para todos, y con una cuchara cada comensal iba cogiendo de allí desde tiempos inmemoriales; en las cortijadas andaluzas cada cual atacaba las tajadas del centro de la mesa con una navaja, según han informado alguno de los chicos que allí trabajaron por los años que se tomaron estas fotos; no había agua corriente, ni baños, ni alcantarillado, ni luz, ni teléfono, ni adoquines, ni asfalto. Y todo ello quedó detenido a lo largo de un tiempo infinito, en aquella larguísima postguerra, que los mantuvo en su pasado más miserable."
Pena López, Carmen
Pena López, Carmen


Las opiniones expresadas en este documento son de exclusiva responsabilidad de los autores y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de la empresa editora


PUBLICIDAD
ACTUALIDAD GALICIADIGITAL
Blog de GaliciaDigital
PUBLICACIONES